Situado en el extremo
noroccidental del Valle de Basaburúa, no muy distante de su límite con el Valle
de Malerreka que se extiende al Norte y del Valle de Larraún que lo hace al
Oeste, el monte Ireber ( 1208 m ) es la máxima elevación de la divisoria
cantábrico-mediterránea en el tramo comprendido entre el Puerto de Belate ( 847
m ) y el Puerto de Azpíroz ( 616 m ).
La “ recóndita “
situación geográfica de este macizo, alejado “ relativamente “ de núcleo de población
alguno, y sobre todo el estar conformado por un conjunto de suaves y
redondeadas cimas de similar altitud que las hace pasar prácticamente
desapercibidas ante la mirada de los montañeros que normalmente buscan cumbres
más “ airosas “, hace de este un “ enclave “ habitualmente poco frecuentado.
El anteriormente
mencionado Ireber ( 1208 m ), su “ vecino “ Ernaitzu ( 1204 m ), así como el
también “ cercano “ Launtze ( 1195 m ), conforman una “ trilogía “ digna de
visitar.
Como he comentado
anteriormente, estas cumbres quedan “ relativamente “ alejadas de núcleos de
población por lo que los puntos de partida más habituales para los que buscan
alcanzarlas de una manera más “ cómoda “ suelen ser: Iontza ( 901 m ), paraje
al que accede una estrecha carreterita que nace en Beruete ( 700 m ), el Puerto
de Huici ( 808 m ) o el Puerto de Usategieta ( 693 m ), conocido también como
Alto de Tardoa, Alto de Ezkurra o Basakabi.
Los que buscan
itinerarios más “ largos “ hacia estas cumbres y además quieren tomar como
punto de partida algún núcleo de población deberían pensar en hacerlo desde
Beruete ( 700 m ) o Arrarás/Arrarats ( 670 m ), localidades ambas
pertenecientes al Valle de Basaburúa y que serían las poblaciones más “
cercanas “.
No muy distante de la “
trilogía “ de cumbres a la que hemos hecho referencia se alza el monte
Beigañe/Begaña ( 1104 m ), otra de las cimas destacadas de la citada divisoria
cantábrico-mediterránea en el mencionado tramo comprendido entre el Puerto de
Belate ( 847 m ) y el Puerto de Azpíroz ( 616 m ). Su poco “ llamativa “
silueta, amplia, alomada y totalmente cubierta por un frondoso bosque de hayas,
hace que esta “ centenaria “ cumbre, que aparece en el Catalogo de Cimas de
Euskal Herria, pase prácticamente desapercibida para los montañeros que aspiran
a “ coronar “ objetivos más “ importantes “.
Su proximidad a Otsola
( 903 m ), bucólico enclave al que se accede “ cómodamente “ desde Arrarás/Arrarats
( 670 m ) y que es asiduamente frecuentado por los montañeros que buscan coronar
algunas de las cimas “ principales “ que se elevan cercanas, como pudieran ser
los citados Ireber ( 1208 m ) o Ernaitzu/Ernaizu ( 1204 m ), hacen de esta la vía
más utilizada para los que, partiendo desde dicha localidad, buscan alcanzar su
cumbre.
Otro punto de partida “
clásico “ para los que buscan “ conquistar “ la cima de Beigañe/Begaña ( 1104 m
) es el Puerto de Gorostieta ( 830 m ). Las balizas rojiblancas de la Senda
GR-12 que lo atraviesan y que alcanzan “ cómodamente “ el collado de Abarketa (
993 m ), cuello abierto bajo la vertiente septentrional del monte en cuestión,
facilitarán sobremanera el acceso desde este “ olvidado “ paso de montaña.
Son varias las rutas ya
realizadas por la zona y entre algunas de estas destacaríamos: “ Launtze-Ireber-Ernaitzu/Ernaizu-Seganbe/Seanbe( Desde Arrarás/Arrarats ) “ o “ Beigañe o Begaña y Murgi ( DesdeArrarás/Arrarats ) ”.
Buscando realizar una
ruta “ circular “ en la que pretendemos “ coronar “ las cimas de Beigañe o
Begaña ( 1104 m ), Launtze/Laontze ( 1195 m ), Ireber ( 1208 m ) y
Ernaitzu/Ernaizu ( 1204 m ), además de las menos conocidas de Ozpegaña ( 1034 m
) y Arnabarrita ( 1009 m ), queda claro que los puntos de partida más “
adecuados “ pudieran ser las localidades de Beruete ( 700 m ) o Arrarás/Arrarats
( 670 m ).
En esta ocasión, y una
vez más, vamos a optar por la segunda, Arrarás/Arrarats ( 670 m ). Esta es mi
propuesta, espero que la disfrutéis.
Resumen
del Itinerario
Comenzamos este
itinerario en Arrarás ( 670 m ), concretamente junto a la iglesia erigida en
honor a San Pedro que aparece enclavada en la parte alta de esta pequeña
localidad perteneciente al Valle de Basaburúa.
Por la izquierda de la
citada iglesia tomaremos el carretil cementado, Otsolako bidea, que tras dejar
a su paso algún disperso caserío perteneciente a la mencionada población, da
acceso al bucólico paraje de Otsola ( 903 m ).
En este bello enclave,
junto a un poste indicador, enlazamos con la Senda GR-12, ruta que tomaremos
por la derecha ( NE ) buscando encaminarnos hacia el collado de Abarketa ( 993
m ). No tardaremos en abandonar la balizada senda para “ desviarnos “ hacia
Beigañe o Begaña ( 1104 m ), en cuya cumbre desembocaremos tras un agradable
ascenso por el frondoso bosque de hayas que la cubre.
Iniciamos el descenso
buscando alcanzar, ahora sí, el collado de Abarketa ( 993 m ), “ cuello “ que
atravesamos para remontar hacia la cercana “ cimita “ de Ozpegaña ( 1034 m ),
la que alcanzaremos de inmediato.
En dirección opuesta a
la de ascenso perderemos altura para desembocar en la pista que atraviesa el
Valle de Otsola, por la que continuaremos en tendido ascenso por la derecha (
NW ) hasta dar alcance a un discreto “ colladito “ ( 944 m ), lugar en el que
aparece enclavada una borda.
Abandonamos la pista
para remontar por detrás de la citada borda en acusado ascenso buscando
alcanzar la cima de Arnabarrita ( 1009 m ), en la que desembocaremos en breve.
Nuevamente iniciaremos
el descenso en dirección opuesta a la de ascenso para, junto a una alambrada,
dar alcance nuevamente a la Senda GR-12, junto a cuyas balizas buscaremos
adentrarnos en el hayedo. Alcanzamos su parte alta, punto en el que las
abandonaremos para continuar ganando altura, ya por terreno despejado, hacia el
collado de Bi Ahizpen Sepulture ( 1170 m ) aunque antes nos desviaremos hacia
la cercana cumbre de Launtze/Laontze ( 1195 m ).
Desde esta, ahora sí,
descendemos hasta el citado cuello ( 1170 m ), lugar en el que destaca el
dolmen del mismo nombre y en cuyas inmediaciones asoma un pequeño refugio.
Un discreto sendero
atraviesa un corto tramo de arbolado para posteriormente desembocar bajo la
herbosa vertiente septentrional de Ireber ( 1208 m ), cuya rocosa cumbre
alcanzaremos rápidamente y sin dificultad reseñable.
Descendemos en
dirección opuesta a la de ascenso buscando alcanzar el collado de Sobresate (
1134 m ), cuello en el que volvemos a “ tropezar “ con las balizas “
rojiblancas “ de la Senda GR-12 que atraviesan perpendicularmente y que
volveremos a obviar para continuar ganando altura por la herbosa ladera NW. de
Ernaitzu ( 1204 m ), en cuya cumbre desembocaremos cómodamente.
Nuevamente perderemos
altura por la vertiente opuesta a la de subida buscando alcanzar el sendero por
el que terminaremos desembocando en el collado de Arrarás o Karate ( 841 m ),
atravesado por una amplia pista, Arrarasbide.
Tomamos esta por la
izquierda ( NE ) para, obviando apenas unos pocos metros más adelante la que
nace por la derecha ( E ) buscando dar acceso a la cima de Seanbe/Seganbe ( 1018 m ), continuar de
frente ( NE ). Iniciamos un acusado descenso y no tardamos en desembocar en la
pequeña localidad de Arrarás ( 670 m ), punto de partida de este itinerario.
Datos
del Itinerario
Desnivel:
911 m
Tiempo:
De 4 h a 6 h
Distancia:
14´22 km
Inicio:
Arrarás/Arrarats ( Valle de Basaburua )
Fecha
de realización: Febrero 2023
Epoca
recomendada: Todo el año
Cimas:
Beigañe o Begaña ( 1104 m ); Ozpegaña ( 1034 m ), Arnabarrita ( 1009 m ); Launtze/Laontze
( 1195 m ); Ireber ( 1208 m ); Ernaitzu/Ernaizu ( 1204 m )
Descripción del
Itinerario
Este itinerario lo
iniciaremos desde la parte alta de Arrarás ( 670 m ), lugar en el que destaca
la iglesia de la localidad, erigida en honor a San Pedro.
Por la izquierda del
edificio religioso nace una pista hormigonada que nos permitirá abandonar el
casco urbano de esta pequeña población del Valle de Basaburúa dejando a su paso
un par de viviendas situadas a sus afueras. Un cartel nos indica la prohibición
del “ paso de vehículos “, evitando así la circulación por el carretil
cementado por el que nosotros caminamos.
No tardaremos en dejar
a nuestro paso unas “ leñeras “ y poco más adelante un paso canadiense, tras el
que cual el vial cementado se bifurca. Obviaremos el camino, Muskilloko bidea,
que nace por la derecha ( E ) mientras continuamos de frente ( N ) por Otsolako
bidea.
Paulatinamente, el vial
cementado por el que continuamos ascendiendo pierde inclinación permitiéndonos
un “ plácido “ discurrir. A nuestro paso dejaremos en breve Kasteneko Borda (
735 m ) y posteriormente Etxeaundiko Borda ( 748 m ), dos bellos y cuidados
caserones asentados a orillas de Otsolako bidea.
El cementado camino
continúa su discurrir mientras por nuestra izquierda ( W ), en el fondo del
barranco, va apareciendo Alkardurko Erreka, riachuelo que tras épocas de
lluvias desciende de forma caudalosa formando bellas cascadas.
Cuando Otsolako bidea
definitivamente pierde inclinación su piso deja de ser cementado para ser de
tierra, momento a partir del cual Alkardurko Erreka discurrirá a escasos metros
a nuestra izquierda ( W ) ya de forma más “ tendida “.
En breve alcanzaremos
un portillo que nos cierra el paso y que, tras atravesarlo, nos permite el
acceso al bello enclave de Otsola ( 903 m ).
Caminamos por la amplia
pista en dirección a un cercano poste indicador, lugar en el que enlazamos con
la Senda de Euskal Herria o GR-12 y punto en el que recibiremos por la derecha
( NE ) el camino procedente del Alto del Puerto de Gorostieta ( 830 m ), el
cual deberemos tomar.
Abandonando el camino
que continúa al frente ( N ) ganaremos altura por la derecha ( NE ) por la
amplia pista que, tras un corto aunque acusado ascenso, no tarda en aparecer “ cerrada “ por un portillo.
Atravesamos este para,
de inmediato, trazar una cerrada curva hacia la izquierda ( NE ), lugar en el
que deberemos abandonar la balizada pista para tomar el camino que nace al
frente ( E ) y que a escasos metros salva el cauce de Urtzupeko Erreka.
El notorio camino
remonta en dirección al cercano hayedo buscando adentrarse en este, por el que
continuaremos ganando altura en tendido ascenso. En algunos tramos se aprecia un
marcado pasillo que se abre paso entre las hayas aunque conforme avanzamos acaba
por difuminarse.
Evitando lo alto de la
loma y dejándola para el descenso, remontaremos por la frondosa ladera
occidental de Beigañe o Begaña ( 1104 m ) para, sin dificultad reseñable,
terminar desembocando en su cima. Beigañe/Begaña ( 1104 m ). Un buzón la señaliza.
Nula panorámica debido a que las hayas lo cubren todo.
Iniciamos el descenso,
ahora sí, discurriendo por lo alto de la loma en dirección NW., por la que no
tardaremos en alcanzar el collado de Abarketa ( 993 m ). Por este discreto y
despejado “ colladito “ ( 993 m ) atraviesa un amplio camino, es la Senda GR-12
que abandonamos anteriormente al “ desviarnos “ hacia la cima de Beigañe o
Begaña ( 1104 m ).
Haciendo caso omiso a
la balizada “ Senda “, atravesaremos el citado “ cuello “ ( 993 m ) para,
adentrándonos nuevamente entre las hayas, remontar de frente ( NW ) buscando
alcanzar la amplia cumbre de Ozpegaña ( 1034 m ), en la que desembocaremos tras
un corto aunque acusado ascenso. Un hito la señaliza. Al igual que en la cima
de Beigañe o Begaña ( 1104 m ), las hayas nos privan de panorámica alguna.
En dirección opuesta a
la de ascenso tomaremos un amplio camino que parece ha servido para dar acceso
a la cima recién visitada, en la que se ha realizado una “ entresaca “.
El citado camino no
tarda en aparecer atravesado por una alambrada, la que deberemos salvar para
continuar descendiendo en dirección a la amplia y notoria pista que atraviesa
perpendicularmente mientras cruza por el Valle de Otsola. No tardaremos en darle
alcance, momento en el que deberemos tomarla para continuar ascendiendo por la
derecha ( NW ) buscando desembocar en el discreto “ colladito “ ( 944 m ) en el
que aparece enclavada una “ coqueta “ borda.
Será junto a la citada
borda cuando abandonaremos la pista mientras buscamos remontar por detrás de
esta siguiendo la línea de palomeras que “ salpica “ la semidespejada ladera
oriental de Arnabarrita ( 1009 m ), nuestro siguiente objetivo.
Entre hayas y algún que
otro arbusto remontaremos en acusado ascenso para terminar alcanzando una
alambrada que discurre paralela a nuestra derecha ( N ), junto a la que terminaremos
desembocando en la amplia cima. Arnabarrita ( 1009 m ), un hito señaliza la cumbre
que aparece cubierta de hayas, lo que vuelve a privarnos de panorámica alguna.
En dirección opuesta a la
de subida iniciaremos el descenso mientras continuamos caminando junto a la
citada alambrada. Esta no tardará en trazar una curva de 90 º hacia la izquierda
( S ), lugar en el que destaca una de las mugas que delimita los términos de Beruete
y Arrarás/Arrarats.
Seguimos perdiendo
altura junto a la alambrada que desciende por la despejada ladera meridional de
la cima recién “ conquistada “ para terminar alcanzando el amplio camino que
discurre por la parte baja de esta. Es la senda GR-12, el balizado camino que
abandonamos anteriormente a la altura del poste indicador enclavado en la parte
baja del Valle de Otsola.
Un portillo, junto al
que aparece otra de las mugas que delimita los términos de Beruete y
Arrarás/Arrarats, nos permitirá salvar la alambrada junto a la que hemos descendido.
Una vez atravesado el
citado portillo el camino pasa a convertirse en senda y de inmediato se adentra
en el frondoso hayedo, por el que, acompañados en todo momento de las balizas “
rojiblancas “, iniciaremos un acusado
ascenso.
El sendero alcanza la
parte alta del bosque de hayas, lugar en el que un pequeño portillo nos
permitirá salir a terreno abierto. Abandonamos las balizas “ rojiblancas “ que
continúan por nuestra izquierda ( S ) en dirección al Portillo de Sobresate (
1134 m ) para, dejando un abrevadero a nuestra derecha ( N ), remontar por la
herbosa ladera que se extiende ante nosotros.
Una amplia pista, hoy
cubierta de nieve, gana altura en acusado ascenso mientras busca alcanzar el
cercano collado de Bi Ahizpen Sepulture ( 1170 m ) Unos pocos metros antes de
alcanzarlo dejaremos a nuestro paso un pequeño refugio ( 1159 m ).
Sin necesidad de llegar
a alcanzar el citado collado ( 1170 m ), antes de encaminarnos hacia este,
buscaremos ascender por nuestra derecha ( N ) para remontar por la herbosa
ladera de Launtze/Laontze
( 1195 m ), en cuya cumbre desembocaremos tras corto y tendido ascenso. Una
piedra, en la que se puede leer su nombre, la identifica. Bella y abierta
panorámica.
Sin camino definido
descenderemos por la herbosa ladera meridional de la cima recién conquistada
mientras buscamos alcanzar, ahora sí, el cercano collado de Bi Ahizpen
Sepulture ( 1170 m ), en el que destaca el dolmen del mismo nombre y un redil
para el ganado.
Dejando el citado redil
a nuestra derecha ( W ), tomaremos un pequeño y no muy notorio sendero que busca
adentrarse entre las hayas. La senda de inmediato gana notoriedad para, tras corto
discurrir por el hayedo, salir a terreno abierto, desembocando bajo la ladera
septentrional de Ireber ( 1208 m ), cuya rocosa cumbre despunta cercana sobre
nuestras cabezas.
Una prácticamente
inapreciable senda se dibuja en la herbosa ladera buscando evitar el rocoso
mogote cimero por la derecha ( NW ). Dejamos atrás la hierba para, ya entre
rocas y sin excesivas dificultades, desembocar en la citada cima. Ireber (
1208 m ), amplia cumbre salpicada de rocas entre las que destacan dos buzones
montañeros. Bella y abierta panorámica.
En dirección opuesta a
la de ascenso iniciaremos el descenso entre rocas para alcanzar de inmediato el
notorio sendero que se dibuja en la herbosa ladera y por el que buscaremos
encaminarnos hacia el hayedo.
Entre hayas alcanzaremos
de inmediato una pista que atraviesa perpendicularmente, por la que
continuaremos hacia la izquierda ( N ) buscando salir al collado de Sobresate (
1134 m ), cuello en el que desembocamos de inmediato y lugar en el que volvemos
a enlazar con las marcas “ rojiblancas “ de la Senda GR-12. Una baliza lo
señaliza.
De frente ( SE ), ante
nosotros y en la herbosa ladera, se dibuja una notoria “ rodada “ que tomaremos
para iniciar el “ cómodo “ ascenso que nos permitirá desembocar rápidamente en
la cima de Ernaitzu/Ernaizu
( 1204 m ). Amplia y herbosa cumbre en la que destacan un vértice geodésico y
dos buzones montañeros. Bella y abierta panorámica.
Iniciamos el descenso
encaminándonos hacia la cercana cota arbolada que asoma cercana y en cuyas
inmediaciones nos toparemos con una alambrada.
Apenas unos metros
antes de alcanzar la citada alambrada buscaremos el discreto sendero que
desciende por la derecha ( SE ) adentrándose entre las hayas. No tardaremos en
abandonar el hayedo para salir a una extensa campa herbosa, lugar en el que
alcanzamos un amplio camino y punto en el que obviaremos el marcado sendero que
nace por nuestra izquierda ( NE ) mientras descendemos por la derecha ( E ) en
dirección al bosque de hayas que se extiende en esa dirección.
Una vez alcanzado el citado
hayedo nos adentraremos por un, en principio, poco perceptible sendero, el cual
no tardará en ganar notoriedad para convertirse en un camino que aparece
balizado con esporádicos hitos. Este no tarda en alcanzar un rústico portillo
con “ paso “ aledaño, por el cual atravesaremos “ cómodamente “ la alambrada
que cierra nuestro camino.
A partir del citado
portillo el camino se difumina entre las hayas aunque siguiendo en la misma
dirección ( SE ) no nos resultará complicado desembocar en una pequeña pista
que atraviesa perpendicularmente, por la que continuaremos hacia la derecha ( S
).
Discurrimos bajo un “
clareado “ hayedo y no tardamos en alcanzar una abierta campa situada bajo la
vertiente septentrional de la discreta y prácticamente apreciable cumbre de
Txiale ( 1023 m ), “ cimita “ que hoy obviaremos.
Atravesaremos la citada
campa para volver a adentrarnos en el hayedo, momento en el que haremos caso
omiso del camino que continúa por la derecha ( W ) mientras nosotros seguimos
por la izquierda ( E ).
El camino se abre paso
entre las hayas en un notorio discurrir mientras pierde altura “ cómodamente “.
Paulatinamente este irá perdiendo entidad para transformarse en senda, por la
que terminaremos abandonando el hayedo buscando salir a terreno abierto.
El sendero alcanza el
borde superior de un prado, junto a cuya alambrada lo “ rodearemos “ para
terminar desembocando en el collado de Arrarás o Karate ( 841 m ), discreto
cuello que es atravesado por una amplia pista, Arrarasbide.
Tomamos la pista por la
izquierda ( NE ) aunque, apenas unos pocos metros más adelante, esta se
bifurca. En este punto haremos caso omiso de la que nace por la derecha ( E ), buscando
dar acceso a la cima de Seanbe/Seganbe ( 1018 m ), mientras optamos por continuar de frente ( NE ) descendiendo
hacia la localidad de Arrarás/Arrarats ( 670 m ).
La pista, cementada en
los tramos de mayor pendiente, no deja lugar a la menor duda y por ella
descenderemos hasta desembocar en una estratégica bifurcación, en la que deberemos continuar por la izquierda
( NE ).
No tardamos en “ tropezar “ con un nuevo cruce, punto en el que haremos
caso omiso del camino que continúa de frente ( N ) mientras seguimos por la
derecha ( E ). El camino tomado atraviesa Otsolako Erreka, cuyo cauce nosotros
evitaremos por un puente de hormigón.
La pista cementada inicia un brutal aunque corto ascenso para desembocar de
inmediato en Arrarás/Arrarats ( 670 m ), localidad por la que callejearemos buscando alcanzar su parte
alta, lugar en el que tenemos estacionado nuestro vehículo y desde donde
iniciamos este itinerario.
Track del Itinerario
Fotos del Itinerario
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Estacionamos nuestro vehículo en la parte alta de Arrarás, en las inmediaciones de la iglesia de la localidad |
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Frontón de Arrarás, " encajonado " entre enormes caserones
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Fuente en Arrarás, enclavada bajo una bella casona
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En la parte alta de Arrarás destaca su iglesia, erigida en honor a San Pedro
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Iniciamos nuestro itinerario tomando el carretil cementado que nace por la izquierda de la iglesia de Arrarás |
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Rápidamente dejaremos atrás el casco urbano de Arrarás |
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Nuestro camino deja a su paso verdes y extensos prados mientras que Seganbe/Seanbe ( izda ) y Txiale ( dcha ), boscosas cumbres entre las que se abre el collado de Arrarás o Karate, despuntan cercanos |
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Aviso a " navegantes ", no está permitido la circulación de vehículos por el carretil cementado por el que caminamos |
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Junto al carretil hormigonado por el que continuamos ascendiendo dejaremos a nuestro paso varias chabolas y leñeras |
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No tardaremos en dar alcance a un paso canadiense, tras el cual el carretil cementado se bifurca. En este lugar obviaremos el camino, Muskilloko bidea, que nace por la derecha para continuar de frente por Otsolako bidea |
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Otsolako bidea parece perder inclinación mientras discurre bajo la boscosa ladera de Beigañe/Begaña |
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Nuestro cementado camino, Otsolako bidea, deja a su paso un cruce, lugar en el que haremos caso omiso del que nace por la izquierda. Continuamos de frente |
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Otsolako bidea deja a su paso Kasteneko Borda |
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Una talla de madera colocada en su fachada lo identifica |
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Seganbe/Seanbe ( centro ) despunta ante nosotros |
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Otsolako bidea acentúa paulatinamente su inclinación |
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Etxeaundiko Borda asoma sobre nuestro camino |
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El cementado camino, Otsolako bidea, nos permite un agradable y placentero ascenso |
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Bifurcación, lugar en el que obviaremos el camino que nace por la izquierda mientras continuamos de frente por el carretil hormigonado |
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Las últimas lluvias y la nieve han alimentado las regatas
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Una pequeña cascada cae a la vera de nuestro camino |
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El carretil cementado aparece " cortado " aunque tiene una pequeña " variante " por su derecha
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En algunos tramos nuestro camino prácticamente desaparece bajo la hojarasca |
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Un tramo de Otsolako Bidea aparece " protegido " |
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Alkardurko Erreka asoma tímidamente entre las hayas mientas discurre bajo nuestro camino |
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Otsolako bidea nuevamente acentúa su pendiente |
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Alkardurko Erreka baja con " generoso " caudal |
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Alkardurko Erreka discurre caudalosa
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Pequeñas cascadas forman Alkardurko Erreka |
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Cascada en Alkardurko Erreka |
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Precioso tramo de cascada en Alkardurko Erreka
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Seguimos ascendiendo por Otsolako bidea mientras continuamente dejamos a nuestro paso numerosas regatas. Esta es Urtzupeko Erreka |
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Urtzupeko Erreka |
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Otsolako bidea alcanza prácticamente el cauce de Alkardurko Erreka para continuar discurriendo paralelos |
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Cascada en Alkardurko Erreka |
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Otsolako bidea pierde inclinación, momento en el que su piso cementado pasa a ser de tierra |
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Otsolako bidea pierde definitivamente inclinación para continuar en plácido ascenso mientras discurre paralelo a Alkardurko Erreka |
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Otsolako bidea busca abandonar la protección del hayedo para salir a terreno abierto |
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Otsolako bidea alcanza el portillo que da acceso al paraje del mismo nombre, Otsola
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Nuestro camino se adentra en Otsola minetras que la redondeada cumbre de Arnabarrita ( izda ), por la que posteriormente pasaremos, despunta al fondo |
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Una vez que nos adentramos en el paraje de Otsola, de inmediato nos topamos con un notorio cruce, punto en el que destaca un poste indicador y lugar en el que " enlazamos " con la Senda GR-12 que atraviesa perpendicularmente. Continuaremos por la balizada senda ( dcha ) en ascenso
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Poste indicador enclavado en la bifurcación, desde el que damos vista a Arnabarrita ( centro ), una de las cumbres a visitar en este itinerario |
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Detalle del poste indicador enclavado en Otsola |
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Nuestro camino gana altura en forma de pista mientras que sobre esta asoma la boscosa cumbre de Ozpegaña ( centro ), por la que pasaremos en breve |
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El Valle de Otsola queda rápidamente por debajo mientras que Arnabarrita ( dcha ) despunta sobre este |
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Arnabarrita ( izda ) destaca sobre el Valle de Otsola |
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El camino continúa su acusado ascenso |
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Seganbe/Seanbe ( dcha ) despunta en primer término
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Nuestro camino pierde inclinación mientras busca alcanzar el portillo que lo " cierra " |
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Las balizas " rojiblancas " aparecen en el portillo que nos cierra el paso. Lo atravesamos |
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Nada más dejar atrás el portillo que acabamos de atravesar abandonaremos el balizado camino que continúa ascendiendo por la izquierda para tomar el más herboso que nace por la derecha |
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Nuestro camino es atravesado por Urtzupeko Erreka, la salvaremos para continuar por este |
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El camino discurre notorio entre los helechos, caídos en esta época del año, buscando alcanzar el hayedo |
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Nuestro camino parece perder notoriedad al alcanzar el hayedo |
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Al adentrarnos entre las hayas el camino nuevamente gana notoriedad |
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Un nítido " pasillo " atraviesa entre las hayas |
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Remontamos en paulatino ascenso entre las hayas |
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La nieve hace acto de presencia aunque no hay mucho espesor |
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Últimos metros hacia la cima de Beigañe/Begaña |
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En agradable ascenso y en tendida pendiente, caminando en todo momento entre hayas, buscamos alcanzar la cima de Beigañe/Begaña, en la que ya asoma el buzón ( centro ) que la identifica |
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Buzón montañero en la cima de Beigañe/Begaña |
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Detalle del buzón montañero enclavado en la cima de Beigañe/Begaña
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Detalle del buzón montañero enclavado en la cima de Beigañe/Begaña |
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Detalle de la placa colocada en el buzón montañero enclavado en la cima de Beigañe/Begaña |
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Cima de Beigañe/Begaña |
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Iniciamos el descenso por el camino utilizado en la subida aunque de inmediato lo abandonamos por la derecha para caminar por lo alto de la loma
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Atrás queda la cima de Beigañe/Begaña |
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Mientras perdemos altura por lo alto de la loma aparece nuevamente la nieve |
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Los rayos de sol se " cuelan " entre el " desnudo " hayedo |
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Descendemos por el " intuible " pasillo que se abre en el hayedo |
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Paulatinamente el camino va " apareciendo " mientras que la nieve se difumina |
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Abandonamos el hayedo para salir a terreno despejado dando vista al collado de Abarketa, lugar en el que atraviesa la Senda GR-12 |
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En el collado de Abarketa recibimos por la izquierda ( centro en la foto ) el balizado camino abandonado anteriormente que asciende desde el paraje de Otsola |
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Atravesamos el camino que cruza el collado de Abarketa para adentrarnos nuevamente entre las hayas buscando remontar hacia la cima de Ozpegaña |
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En acusado ascenso remontamos por la arbolada ladera SE. de Ozpegaña |
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No tardamos en alcanzar la amplia loma cimera de Ozpegaña |
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Desde la amplia loma cimera de Ozpegaña damos vista a Ernaitzu ( izda ) e Ireber ( centro ), cumbres que vamos a " coronar " en breve |
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La " desnudez " del hayedo nos permite intuir la silueta de Beigañe/Begaña ( centro ), cumbre que acabamos de visitar |
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Un hito de piedras " señaliza " la amplia cima de Ozpegaña |
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Detalle del hito enclavado en la cima de Ozpegaña |
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Abandonamos la amplia cumbre de Ozpegaña |
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Desde la cima de Ozpegaña, en dirección opuesta a la de ascenso, tomaremos el amplio camino que ha permitido la " entresaca " en esta cumbre |
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Tomamos la amplia pista que da acceso a esta cumbre por la vertiente opuesta a la empleada en el ascenso |
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El notorio camino se abre paso entre las hayas iniciando un acusado descenso |
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Una alambrada nos cierra el paso. No nos queda más remedio que atravesarla |
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Tras salvar la alambrada nuestro camino abandona el hayedo buscando desembocar en el Valle de Otsola, sobre el que ya asoma nuestro siguiente objetivo, Arnabarrita ( dcha ) |
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El camino se torna herboso mientras busca alcanzar la pista que atraviesa el Valle de Otsola |
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No tardamos en desembocar en la amplia pista que atraviesa las campas de Otsola |
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Una vez alcanzada la pista continuaremos por esta en ascenso hacia la derecha, encaminándonos hacia la visible cumbre de Arnabarrita ( izda ) |
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Las arboladas y ya visitadas cumbres de Ozpegaña ( centro ) y Beigañe ( derecha al fondo ) asoman sobre la pista por la que venimos caminando |
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Mirada hacia el Valle de Otsola |
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La pista alcanza un discreto colladito, lugar en el que queda enclavada una borda |
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En el punto en el que nuestro camino alcanza la borda será donde lo abandonaremos para dirigirnos hacia esta |
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Desde la borda comenzaremos a ascender en direción a la línea de palomeras que " salpica " la ladera oriental de Arnabarrita |
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Dejamos rápidamente atrás la borda junto a la que acabamos de pasar |
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En acusado ascenso ganamos altura por la herbosa ladera oriental de Arnabarrita |
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Esporádicos neveros tapizan la parte alta de la loma cimera de Arnabarrita |
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No tardamos en alcanzar la amplia cumbre de Arnabarrita, atravesada por una alambrada |
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Junto a la alambrada, bajo las hayas, destaca el hito cimero que señaliza la cumbre de Arnabarrita |
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Hito en la cima de Arnabarrita |
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Abandonamos la amplia cumbre de Arnabarrita para iniciar el descenso en dirección opuesta a la de ascenso |
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Perdemos altura plácidamente caminando junto a la alambrada |
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La alambrada junto a la que descendemos no tarda en trazar un ángulo de 90º, punto en el que llamará nuestra atención una muga |
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En una de las caras de la muga se aprecia la letra " A " de Arrarás |
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En otra de las caras de la muga se aprecia la letra " B " de Beruete |
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Abandonamos el hayedo para continuar descendiendo junto a la alambrada por terreno herboso |
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Mientras descendemos de Arnabarrita damos vista a Beigañe/Begaña ( centro ), primera de las cumbres visitadas en este itinerario |
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Buscamos descender hacia el balizado camino que anteriormente abandonamos al alcanzar el Valle de Otsola, el cual aparece muy concurrido |
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La alambrada junto a la que hemos descendido termina por hacernos alcanzar el balizado camino, el cual salva el portillo que asoma en primer término |
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Las balizas rojiblancas nos " invitan " a atravesar el citado portillo |
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Junto al portillo que acabamos de atravesar, enclavado bajo la vertiente meridional de Arnabarrita, destaca otra de las mugas que delimita los términos de Beruete y Arrarás |
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Una vez salvado el portillo el amplio camino se transforma en un notorio sendero |
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La marcada senda busca adentrarse en el frondoso hayedo
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Las marcas de pintura ( dcha ) balizan escrupulosamente el camino a seguir |
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La senda acentúa su inclinación mientras gana altura entre las hayas |
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Paulatinamente el camino parece ganar notoriedad |
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El notorio camino parece perder inclinación mientras nos da una pequeña " tregua "
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La marcada senda atraviesa un claro en el bosque |
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La nieve vuelve a hacer acto de presencia mientras que el marcado camino se abre paso entre las hayas |
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La nieve lo cubre todo y hace " desaparecer " el camino aunque este se intuye entre las hayas |
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Las numerosas balizas no dan margen a equivocarse |
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El sendero se dibuja notorio bajo el manto de nieve |
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Alcanzamos el borde del arbolado, al que llegan también dos montañeras |
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En la parte alta del hayedo un portillo nos permite salir a terreno abierto, lugar desde el que divisamos en primer término la herbosa cumbre de Launtze, nuestro próximo objetivo |
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En el pequeño portillo abandonamos las balizas rojiblancas que continúan por la izquierda ( centro en la foto ) en dirección al cercano collado de Sobresate, cuello por el que pasaremos posteriormente |
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Desde el portillo buscaremos encaminarnos hacia la herbosa vertiente meridional de Launtze |
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Desde nuestro ascenso hacia Launtze echamos una mirada hacia la ladera de Ernaitzu, por la que pasaremos posteriormente y hacia la que se encaminan dos montañeras |
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Ganamos altura en acusado ascenso por la despejada ladera de Launtze |
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Un amplio y notorio camino se intuye bajo el manto de nieve |
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El camino nos permite alcanzar un pequeño refugio enclavado en las inmediaciones del collado de Bi Ahizpen Sepulture |
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Desde el pequeño refugio divisamos cercano el collado de Bi Ahizpen Sepulture, hacia el que nos encaminamos |
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Sin llegar a alcanzar el collado de Bi Ahizpen Sepulture nos desviaremos por nuestra derecha para iniciar el ascenso por la tendida ladera meridional de Launtze |
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La amplia loma cimera de Launtze aparece " limpia " de nieve |
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Desde nuestro ascenso hacia la cima de Launtze damos vista a Beigañe/Begaña ( centro ), primera de las cumbres alcanzada en este itinerario |
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Mirada hacia Ernaitzu ( izda ) e Ireber ( dcha ) desde las laderas de Launtze |
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No tardaremos en alcanzar la cima de Launtze, amplia cumbre herbosa desde la que divisamos cercano el parque eólico de Aritz-Kornieta ( centro ) |
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Mirada desde la cima de Launtze hacia la Sierra de Aralar que se extiende en el horizonte |
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Cercano, bajo la vertiente septentrional de Launtze, asoma cercano el parque eólico de Zuparrobi/Zuperrori, enclavado en la cumbre homónima ( dcha ). Al fondo, en el horizonte, despunta Mendaur ( dcha ) |
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Piedra enclavada en la cima de Launtze, en la que se puede leer el nombre del monte en cuestión |
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Desde la amplia y herbosa cumbre de Launtze echamos una mirada hacia nuestro próximo objetivo, Ireber ( centro ) |
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Desde la cima de Launtze, con Ireber ( izda ) asomando al fondo, descenderemos plácidamente hacia el cercano collado de Bi Ahizpen Sepulture, cuello que se abre en primer término |
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En el collado de Bi Ahizpen Sepulture, en un pequeño " claro " herboso, asoma el dolmen del mismo nombre |
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Dolmen de Bi Ahizpen Sepulture |
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Una placa identifica el dolmen de Bi Ahizpen Sepulture
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Dolmen de Bi Ahizpen Sepulture y placa que lo señaliza |
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Sobre el dolmen de Bi Ahizpen Sepulture despunta la herbosa cumbre de Launtze, de la que acabamos de descender |
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Desde el collado de Bi Ahizpen Sepulture buscaremos tomar el " intuíble "camino que, adentrándose en el hayedo, da acceso a la cumbre de Ireber |
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Dejamos atrás el collado de Bi Ahizpen Sepulture, en el que destacan el dolmen del mismo nombre, un redil para el ganado y sobre el que despunta la amplia y herbosa cumbre de Launtze
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Una notoria senda se adentra en el hayedo camino de Ireber
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El marcado sendero se encamina hacia el ya visible Ireber |
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Remontamos en acusado ascenso por la vertiente septentrional de Ireber |
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Mientras ascendemos hacia la cumbre de Ireber, a nuestra espalda queda la rocosa cota NW de Ireber ( izda ) y tras esta Launtze ( dcha ) |
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Desde las laderas de Ireber también damos vista a la cota de Ireber W., tras la que se extiende en el horizonte la Sierra de Aralar ( izda ) |
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Camino de la cima de Ireber buscaremos evitar el zócalo rocoso que la defiende |
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En nuestro ascenso hacia la cima de Ireber dejaremos atrás la herbosa ladera para adentrarnos en el roquedo que la " corona " |
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Rápidamente desembocamos en la cima de Ireber, " coronada " por dos buzones montañeros tras los que asoma Ernaitzu ( centro )
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Detalle de uno de los buzones montañeros enclavados en la cima de Ireber
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Abandonamos la cima de Ireber, tras la que asoman las cotas de Ireber W. ( izda ) e Ireber NW. ( dcha ) |
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Desde la cima de Ireber disfrutamos de una abierta panorámica hacia Beriain ( izda ), Artxueta ( centro ) y la Sierra de Aralar ( dcha ) |
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Bajo la vertiente occidental de Ireber se extienden las campas de Iontza mientras que en el horizonte despuntan Erga ( izda ) y la inconfundible y alargada silueta de Beriain ( dcha ) |
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Bajo Erga se abre el Paso de las Dos Hermanas y, tras este, el Paso de Oskia |
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Paso de las Dos Hermanas y, tras este, el Paso de Oskia, abierto entre Oskia/Bizkai ( izda ) y Gaztelu ( dcha ) |
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En dirección opuesta a la de ascenso perderemos altura por la ladera SE. de Ireber buscando encaminarnos hacia amplia cumbre de Ernaitzu ( centro ) que despunta ante nosotros |
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Queda rápidamente atrás la rocosa cima de Ireber
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Descendemos de Ireber por su vertiente SE. dando vista a Ernaitzu |
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Dejamos atrás la rocosa cumbre de Ireber
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En nuestro descenso desde la cima de Ireber, dando vista en todo momento a Ernaitzu, buscaremos encaminarnos hacia el collado de Sobresate. Vuelvo a coincidir con las montañeras que vi anteriormente |
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Mirada atrás hacia la ladera SE. de Ireber, por la que venimos descendiendo |
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Nos adentramos en el hayedo mientras buscamos encaminarnos hacia el collado de Sobresate
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No tardamos en desembocar en una notoria pista, por la que continuaremos hacia la izquierda |
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La pista desemboca de inmediato en el collado de Sobresate
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Collado de Sobresate, una baliza de la Senda GR-12 ( izda ) destaca en el lugar
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Baliza de GR-12 en el collado de Sobresate con vista a Mendaur ( centro ) |
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Baliza de GR-12 enclavada en el collado de Sobresate
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Abandonamos el collado de Sobresate para remontar por la ladera NW. de Ernaitzu, completamente cubierta de nieve |
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Dejamos atrás el collado de Sobresate, sobre el que despuntan Ireber ( izda ) y Launtze ( dcha ) |
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Ireber despunta sobre el collado de Sobresate, cuello que acabamos de dejar atrás |
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Una profunda huella se dibuja en la ladera de Ernaitzu |
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Desde la ladera de Ernaitzu echamos una mirada atrás hacia Ireber ( izda ), cumbre " escoltada " por la cota W. y la cota NW., y Launtze ( dcha ) |
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Ireber ( centro ), rocosa cumbre que aparece " escoltada " por la cota W. ( izda ) y la cota NW. ( dcha ) |
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La pendiente pierde inclinación en la parte alta de la amplia loma cimera de Ernaitzu |
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Vértice geodésico en la cima de Ernaitzu con cista a Erga ( centro ) |
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Privilegiada panorámica desde la cima de Ernaitzu hacia Erga, cumbre bajo la que se abre el Paso de las Dos Hermanas y, tras este, el Paso de Oskia |
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Paso de las Dos Hermanas ( centro ) y, tras este, el Paso de Oskia |
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Cima de Ernaitzu |
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Buzón en la cima de Ernaitzu |
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Buzón en la cima de Ernaitzu |
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Vértice geodésico y buzón montañero en la cima de Ernaitzu con vista a Erakurri ( izda ), Iruñarri ( centro ) y Mendaur ( dcha ) |
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Buzón montañero en la cima de Ernaitzu con vista a Mendaur ( centro ) |
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Mirada desde la cima de Ernaitzu hacia Mendaur ( centro ), cumbre que aparece " escoltada " por Mendieder ( izda ) y Atzurdi Punta ( dcha ) |
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Abandonamos la cima de Ernaitzu, en la que destacan un vértice geodésico y dos buzones montañeros |
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Mientras abandonamos la cima de Ernaitzu damos vista a Erakurri ( izda ) |
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Iruñarri visto desde Ernaitzu |
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Erakurri visto desde Ernaitzu |
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Desde la cima de Ernaitzu nos encaminamos hacia el cercano " bosquete " ( centro ) que asoma en primer término |
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En las inmediaciones de la alambrada que nos separa del cercano " bosquete " tomaremos una estrecha pero notoria senda que desciende por la derecha |
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El marcado sendero, desaparecido bajo la nieve, pierde altura buscando adentrarse entre las hayas
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En cuanto la nieve desaparece la senda por la que descendemos gana notoriedad |
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El marcado sendero atraviesa un pequeño claro en el bosque de hayas |
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Tras corto discurrir bajo el hayedo la senda busca desembocar en una extensa pradera, hoy completamente cubierta de nieve
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Una vez alcanzada la amplia pradera buscaremos descender hacia el hayedo que se extiende a nuestra derecha ( centro en la foto ), sobre el que despunta la arbolada cumbre de Seganbe/Seanbe ( dcha )
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Abajo, en primer término, asoma la discreta " cimita " de Murgi mientras que la pequeña localidad de Igoa ( dcha ) aparece al fondo |
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Sin camino definido, ya que la nieve lo cubre todo, perdemos altura camino del hayedo |
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La nieve rápidamente desaparece dejando a la vista la " alfombra " de hierba que tapiza este bello paraje |
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No tardaremos en alcanzar el hayedo, en el cual deberemos adentrarnos |
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Grandes " manchas " de nieve tapizan el entorno |
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Atravesamos amplios " claros " en el hayedo mientras buscamos encaminarnos hacia una alambrada que cruza perpendicularmente |
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Alcanzamos un portillo en la alambrada que cuenta con " paso " aledaño. Lo atravesaremos |
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Un discreto camino se intuye entre las hayas
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A nuestro paso, bajo un haya, dejaremos una rústica construcción |
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El sendero por el que descendemos no tarda en desembocar en un amplio camino que nos atraviesa perpendicularmente. Lo tomaremos para continuar por la derecha |
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Punto en el que nuestro sendero ( dcha ) desemboca en el amplio camino, por el que deberemos continuar |
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Paulatinamente la pista se torna más herbosa |
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Al adentrarse nuevamente en el hayedo la pista se bifurca. Continuaremos por la izquierda |
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La pista se transforma en camino mientras discurre bajo la frondosa ladera NE. de Txiale |
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El camino no tarda en convertirse en un notorio sendero
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El camino gana notoriedad paulatinamente y busca dejar a su paso un registro de agua ( dcha ) que asoma entre las hayas |
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Cercano al camino, entre las hayas, dejaremos a nuestro paso un viejo registro de agua |
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En algunos tramos nuestro camino amenaza con difuminarse entre las hayas |
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La senda vuelve a hacerse notoria mientras discurre por un limpio hayedo
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La senda en todo momento se dibuja notoria |
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Cercano asoma el collado de Arrarás o Karate, hacia el que buscamos descender mientras que la piramidal silueta de Seganbe/Seanbe despunta ante nosotros |
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La notoria senda discurre junto a la alambrada que cierra el prado en cuyo extremo opuesto se abre el collado de Arrarás o Karate |
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Terminamos desembocando en Otsolabide, camino que atraviesa perpendicularmente y en el que descansan dos montañeros. Continuaremos por este hacia la derecha |
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A la altura de un discreto hito ( centro ) nuestro sendero ( izda ) desemboca en Otsolabide, amplio camino que atraviesa perpendicularmente y por el que continuaremos hacia la derecha ( desde donde saco la foto ) |
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Alcanzamos el collado de Arrarás o Karate, atravesado por una amplia pista, Arrarasbide. Continuamos por la izquierda |
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Collado de Arrarás o Karate, lugar en el que nuestro camino ( izda ) desemboca en la amplia pista, Arrarasbide, que lo atraviesa. Continuamos por nuestra izquierda ( derecha en la foto ) |
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Arrarasbide se bifura de inmediato, punto en el que abandonaremos la pista que asciende por la derecha hacia Seganbe/Seanbe mientras continuamos de frente ( centro ) hacia Arrarás |
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Arrarasbide busca adentrarse en el cercano hayedo |
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No tardamos en alcanzar un paso canadiense. Lo atravesamos |
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En los tramos de mayor pendiente, con Beigañe/Begaña ( izda ) asomando al fondo, Arrarasbide se muestra cementado |
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Arrarasbide traza una cerrada curva, momento en el que nace un herboso camino por la derecha, el cual obviaremos mientras continuamos descendiendo por la izquierda |
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Alternamos tramos cementados con otros de tierra mientras ya damos vista a Arrarás ( dcha ) y al disperso caserío que se extiende bajo las laderas de Beigañe/Begaña ( izda ) |
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Beigañe/Begaña ( izda ), primera de las cumbres visitadas en este itinerario, despunta ante nosotros |
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Arrarás asoma bajo Murgi entre el desnudo hayedo |
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En fuerte pendiente terminaremos desembocando en una estratégica encrucijada de caminos
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Nuestro camino ( izda ) traza una cerrada curva de 180º y por este continuaremos obviando los otros que nacen en este estratégico cruce |
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Beigañe/Begaña ( centro ) destaca sobre nuestro camino |
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No tardamos en " tropezar " con una nueva bifurcación, lugar en el que haremos caso omiso del camino que nace de frente ( izda ) mientras atravesamos el puente ( dcha ) que aparece en primer término y que salva Otsolako Erreka |
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Otsolako Erreka baja prácticamente " seco " |
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Dejamos atrás el puente que salva Otsolako Erreka para ascender en fuerte pendiente por la pista cementada que da acceso a Arrarás |
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Tras corto aunque acusado ascenso desembocamos en Arrarás, localidad sobre cuyos tejados asoma la cima de Murgi ( centro ) |
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Entramos en Arrarás, localidad sobre la que despunta Beigañe/Begaña |
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Una vez alcanzado el casco urbano de Arrarás desembocaremos en una calle que atraviesa perpendicularmente. Continuamos por la izquierda mientras que al frente despunta Beigañe/Begaña ( centro ), primera de las cumbres visitadas en este itinerario |
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Caserón en Arrarás |
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Callejeamos por Arrarás buscando alcanzar la parte alta de la localidad |
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Alcanzamos la parte alta de Arrarás, lugar en el que destaca la iglesia de la localidad y punto en el que tenemos estacionado nuestro vehículo |
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En la parte alta de Arrarás destaca su iglesia y tras esta asoma tímidamente la arbolada cumbre de Murgi |
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Iglesia de Arrarás, erigida en honor a San Pedro, principio y final de este itinerario |
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