martes, 30 de mayo de 2023

GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona ( Belascoáin/Beraskoain-Eguillor/Egillor ) 4ª Etapa

Enclavada en el centro geográfico de Navarra, se denomina como Cuenca de Pamplona a la comarca que se extiende entorno a la capital de la Comunidad Foral.  

El libro de Javier Zubieta Barcos, “ Montes de la Cuenca de Pamplona “, con prólogo de Julio Martínez Torres, comienza así:  “ Esto es una cazuela rodeada de montes “, así definió la Cuenca de Pamplona el piloto J. Cuadra, comandante del Fokker 27 tras aterrizar sobre las pistas del aeropuerto de Noáin en el primer vuelo comercial, el 6 de Julio del año 1972 “. 

Con una “ frontera “ no muy concreta, “ tradicionalmente “ parece ser que los “ límites “ de la Cuenca de Pamplona los marcaba el alcance del sonido de la Campana María de la catedral de Pamplona.

La Cuenca de Pamplona linda al norte con las comarcas de La Barranca, Ultzamaldea y los Valles Pirenaicos, al Este con la Comarca de Aoiz, al Sur con las de Tafalla y Puente la Reina y al Oeste con la de Estella. La conforman 28 municipios que ocupan una extensión aproximada de 587´29 km².

La Cuenca de Pamplona, esa que en su día alguien denominó como una “ cazuela rodeada de montes “, aparece “ encerrada “ por un conjunto de sierras y macizos de mayor o menor entidad que la “ delimitan “ geográficamente. Entre estos destacan: los macizos de Oskia, Eltxumendi y Ezkaba que despuntan  sobre la vertiente septentrional de Pamplona, la Sierra Morena o Sierra de Aranguren que se extiende sobre la vertiente oriental de la capital navarra, las sierras de Tajonar y de Erreniega que “ cierran “ por el Sur la Cuenca y las Sierras de Esparatz, Sarbil y Saldise que lo hacen por occidente.  

Allá por el año 2000, por iniciativa de la Federación Navarra de Montaña y con la idea de recorrer esas montañas que “ encierran “ la denominada como Cuenca de Pamplona, se creó la Senda GR-220, una ruta de aproximadamente 120 kilómetros de distancia que se dividió “ oficialmente “ en seis etapas.

 

Las etapas son:

 

   * Primera etapa: Fuerte Zabaldica-Ardanaz ( 14 kilómetros aproximadamente )

   * Segunda etapa: Ardanaz-Noáin ( 21 kilómetros aproximadamente )

   * Tercera etapa: Noáin-Belascoáin ( 26 kilómetros aproximadamente )

   * Cuarta etapa: Belascoáin-Eguillor ( 21 kilómetros aproximadamente )

   * Quinta etapa: Eguillor-Oteiza ( 21 kilómetros aproximadamente )

   * Sexta etapa: Oteiza-Zabaldica ( 17 kilómetros aproximadamente )

 

El trazado “ original “ de la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona se modificó 10 años más tarde de ese primer “ balizaje “, siendo este último el que, apareciendo escrupulosamente “ rebalizado “, actualmente podemos disfrutar.

Desde mi modesto punto de vista, y si exceptuamos la tercera jornada que resulta algo más larga, creo que las diferentes etapas, con su distancia y desnivel acumulado, son aptas para cualquier persona mínimamente acostumbrada a caminar por el monte. Sin dificultad reseñable, el trazado de las etapas discurre en su mayor parte por amplias y marcadas pistas así como por nítidos senderos que a día de hoy aparecen “ escrupulosamente “ balizados.

Esta que paso a reseñar será la cuarta de las seis jornadas en las que dividiremos esta Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona y en ella partiremos desde Belascoáin/Beraskoain ( 464 m ), población enclavada en el Valle de Echauri, para tras atravesar el macizo de Esparatz, la Sierra de Sarbil y la Sierra de Saldise, terminar en Belascoáin/Beraskoain ( 464 m ), más concretamente en el paraje de La Playa ( 397 m ), enclave situado a orillas del río Araquil y perteneciente al Valle de Ollo. Esta es mi propuesta, espero que la disfrutéis.

 

Resumen del Itinerario

 

La Senda GR-220 es una ruta de aproximadamente 120 kilómetros de distancia y unos 4700 metros de desnivel positivo que, con la idea de recorrer las montañas que “ encierran “ la denominada como Cuenca de Pamplona, se creó allá por el año 2000 por iniciativa de la Federación Navarra de Montaña. El itinerario “ original ” se modificó 10 años más tarde y es el que actualmente podemos disfrutar, apareciendo escrupulosamente “ rebalizado “.

 

La ruta se ha dividido “ oficialmente “ en seis etapas:

 

   * Primera etapa: Zabaldica-Ardanaz ( 14 kilómetros aproximadamente )

   * Segunda etapa: Ardanaz-Noáin ( 21 kilómetros aproximadamente )

   * Tercera etapa: Noáin-Belascoáin ( 26 kilómetros aproximadamente )

   * Cuarta etapa: Belascoáin-Eguillor ( 21 kilómetros aproximadamente )

   * Quinta etapa: Eguillor-Oteiza ( 21 kilómetros aproximadamente )

   * Sexta etapa: Oteiza-Zabaldica ( 17 kilómetros aproximadamente )

 

Esta es la cuarta de ellas y da comienzo en Belascoáin/Beraskoain ( 464 m ), localidad enclavada en el Valle de Echauri y desde cuyo casco urbano tomaremos la carretera NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin que le da acceso por su vertiente meridional.

Apenas caminaremos unos pocos metros por asfalto ya que de inmediato lo abandonaremos por la izquierda ( SW ) para tomar el amplio camino por el que, en acusado descenso, terminaremos desembocando en el Puente de Belascoáin ( 373 m ).

Atravesamos el citado puente, que salva el cauce del río Arga, y cruzamos la carretera NA-7100 Etxauri-Orendain para tomar la pista que nace al frente ( W ). Tampoco caminaremos mucho tramo por esta ya que, a la altura de la primera curva y siguiendo las marcas “ rojiblancas “, la abandonaremos por la izquierda ( W ) para continuar por un estrecho pero notorio sendero.

Dicho sendero, escrupulosamente balizado en todo momento, remonta “ encerrado “ entre vegetación de monte bajo buscando desembocar en una amplia pista. Ascendemos por esta aunque evitándola en lo posible por una senda que va “ atajando “ hasta que, definitivamente y ya por la mencionada pista, alcanzamos el collado de El Chaparral ( 856 m ).

Desde esta estratégica encrucijada de caminos continuaremos por la derecha ( NE ) tomando el camino que discurre bajo la vertiente occidental de Ollakarizketa ( 987 m ) hasta situarnos bajo su ladera Norte.

El balizado sendero se “ encajona “ entre un frondoso entorno buscando alcanzar prácticamente la inapreciable cumbre de Txarakadia ( 945 m ),  hacia la que, ante su extremada cercanía, no dudaremos en desviarnos.

Retomamos nuestro camino, por el que continuaremos, en todo momento acompañados de un escrupuloso balizaje, hacia el Puerto de Echauri ( 842 m ), atravesando antes por la cima de El Encinar ( 877 m ).

Cruzamos la carretera NA-700 Pamplona-Estella que “ corona “ el citado Puerto de Echauri ( 842 m ) para adentrarnos bajo la frondosidad del bosque, por el que ganaremos altura paulatinamente hasta alcanzar la ermita de la Virgen de la O, enclavada en la discreta cota de Monte Grande ( 880 m ).

El marcado camino deja atrás el mencionado edificio religioso y no tarda en alcanzar la cercana ermita de Santa Lucia ( 872 m ), desde la que acentúa paulatinamente su inclinación y termina por dejar a su paso un estratégico cruce. Obviando el sendero que asciende por la derecha ( N ) hacia la cima de Sarbil ( 1135 m ), continuaremos por la izquierda ( NW ) para, discurriendo bajo la vertiente occidental de la cumbre citada, adentrarnos bajo un tupido hayedo.

Un poste indicador señaliza una estratégica bifurcación, lugar en el que nuevamente seguiremos por la izquierda ( NW ) para abandonar el bosque mientras que, en descenso, buscamos alcanzar el paraje de Arpide ( 997 m ). En este punto, señalizado por un poste indicador, abandonaremos el camino por la derecha ( N ) para tomar la senda que discurre bajo la vertiente oriental de Itxesorde ( 1011 m ), cercana “ cimita “ hacia la que tampoco dudaremos en desviarnos.

Retomamos nuestro camino para, siguiendo el escrupuloso balizaje, atravesar la planicie tapizada de campos de cereal que nos separa de Mortxe ( 1123 m ), nuestro próximo objetivo.

Tras dejar a nuestro paso una pequeña antena, ya en las inmediaciones de la localidad de Azanza ( 841 m ), alcanzamos el paraje de Zozoi ( 942 m ), lugar en el que un poste indicador nos “ invita “ a continuar por la derecha ( N ) para, siguiendo en todo momento el escrupuloso balizaje, desembocar en la cima de Mortxe ( 1123 m ).

En direción opuesta a la de subida iniciaremos el descenso, desviándonos momentáneamente hacia la cercana cima de las Peñas de Saldise ( 1043 m ). Tras corta visita retomaremos nuestro camino, el cual deja a su paso la “ ruinosa “ ermita de San Cristóbal ( 640 m ) para desembocar junto al depósito de agua de Eguillor/Egillor ( 571 m ).

El vial que le da acceso pierde altura en acusado descenso dejando a su paso una Estación de Tratamiento de Agua Potable, desde cuyas inmediaciones y procurando evitar el asfalto, tomaremos la senda que finalmente terminará por desembocar en la carreterita que asciende desde la anteriormente citada localidad de Eguillor/Egillor ( 440 m ).

Cruzamos la mencionada carretera para, obviando la que desciende hacia la citada población, tomar la que nace por nuestra derecha ( SE ) para dar acceso a diferentes fincas.

Frente a una de estas fincas deberemos prestar atención para, siguiendo el detallado balizaje, descender por la izquierda ( NE ) por la notoria senda que nos hará desembocar a la altura de la Central Hidroeléctrica de Eguillor ( 398 m ), enclavada a orillas del río Araquil. Desde esta, continuaremos por la izquierda ( N ) buscando alcanzar de inmediato el paraje de La Playa ( 397 m ), situado a las afueras de Eguillor/Egillor ( 440 m ) y punto en el que damos por finalizada esta cuarta etapa. 

       

Datos del Itinerario

 

Desnivel: 1082 m

Tiempo: De 5 h a 7 h

Distancia: 20´28 km

Inicio: Belascoáin/Beraskoain ( Valle de Echauri )

Fecha de realización: Mayo 2022

Epoca recomendada: Todo el año 

Cimas: Txarakadia o Peña de en Medio ( 945 m ); El Encinar ( 877 m ); Monte Grande ( 880 m ); Itxesorde ( 1011 m ); Mortxe ( 1123 m ); Peñas de Saldise o Txortu ( 1043 m )      

 

Descripción del Itinerario

 

Estacionaremos nuestro vehículo en la plaza de Belascoáin/Beraskoain ( 464 m ), concretamente junto al frontón situado a la entrada de la población y lugar en el que aparece enclavado el panel informativo sobre la ruta que nos ocupa, es decir, la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona.

Desde el citado panel, situado a la orilla de la carreta NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin que da acceso a esta localidad del Valle de Echauri, tomaremos el mencionado vial asfaltado en sentido descendente para abandonar la población. Apenas caminaremos unos pocos metros por la citada carretera ya que, a la altura de la primera curva y siguiendo las balizas “ rojiblancas “, la abandonaremos de inmediato por su izquierda ( SW ).

Haciendo caso omiso de la calle que, también por la izquierda ( SE ), accede al casco urbano de la localidad, tomaremos el camino cementado que desciende por nuestra derecha ( SW ) para de inmediato convertirse en pista de tierra. Esta no tarda en volver a bifurcarse, momento en el que de nuevo obviaremos el camino que nace por la izquierda ( E ) mientras seguimos por la derecha ( W ) dejando a nuestro paso campos de cerezos.

Perdemos altura en acusado descenso para, tras dejar también a nuestro paso un depósito de agua, dar alcance a un nuevo cruce, lugar en el que haremos caso omiso del camino que asciende por nuestra derecha ( N ) mientras continuamos descendiendo de frente ( NW ).

Desembocamos  nuevamente en la carretera NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin, vial por el que seguiremos en dirección al cercano Puente de Belascoáin, construcción medieval que salva el cauce del río Arga y que nos da acceso a la carretera NA-700 Echauri-Orendain. Un panel informativo destaca en el lugar.

Atravesamos la citada carretera para tomar la amplia pista que nace al frente ( W ), por la que iniciamos un tendido ascenso. Apenas caminaremos un corto tramo por esta ya que, en breve y en el punto en el que traza una cerrada curva hacia la derecha ( NW ), la abandonaremos para continuar de frente ( W ).

El camino tomado se bifurca de inmediato, punto en el que deberemos tomar la estrecha pero notoria senda que nace por la derecha ( W ), por la que continuaremos en acusado ascenso.

El sendero, escrupulosamente balizado en todo momento, remonta “ encajonado “ entre vegetación de monte bajo y no tarda en dar alcance a un nuevo cruce, lugar en el que destaca un pequeño hito de piedras. Abandonamos el sendero que sigue de frente ( W ) para tomar la señaliza la senda que continúa ascendiendo por la derecha ( NW ) abriéndose paso entre los bojes que lo cubren todo.

Paulatinamente la senda gana inclinación y termina por dar alcance a una alambrada que, tras salvarla por el “ paso “ aledaño, nos permitirá desembocar en un camino más notorio que atraviesa perpendicularmente. Continuamos ascendiendo por este hacia la izquierda ( W ) y no tardaremos en dejar a nuestro paso una antigua choza circular construida con piedras, en cuyas inmediaciones llamará nuestra atención un obituario.

El sendero continúa su tendido ascenso y, a la altura de una de las piedras que señaliza la Cañada Real Valdorba Andía ( CRVA ), da alcance a una pista que cruza perpendicularmente. Atravesamos esta para, ligeramente a nuestra derecha ( NW ), tomar una estrecha y, en su inicio, poco perceptible senda que aparece señalizada con un hito y una apenas visible baliza “ rojiblanca “.

La senda se adentra en un frondoso paraje y no tarda en alcanzar, a la altura de un hito de piedras, una nueva pista que nos vuelve a atravesar perpendicularmente. Continuamos por esta hacia la izquierda ( W ) en agradable ascenso y en breve “ tropezamos “ con una bifurcación, lugar en el que las balizas “ rojiblancas “ nos “ invitan “ a abandonarla por la derecha ( SW ) tomando un notorio sendero.

En apenas unos metros, y nuevamente a la altura de un hito, la senda tomada vuelve a desembocar en la pista abandonada anteriormente que vuelve a cruzar perpendicularmente. La cruzamos para continuar al frente ( W ) tomando un notorio sendero que aparece señalizado con un nuevo hito.

Atravesamos bajo un túnel de vegetación, en todo momento acompañados de numerosas balizas “ rojiblancas “, para volver a desembocar en la pista, por la que ya continuaremos hacia la izquierda ( W ) para, sin abandonarla y tras atravesar un portillo, continuar remontando en direción al abierto collado de El Chaparral ( 856 m ).

En esta estratégica encrucijada de caminos, en la que aparecen enclavados varios postes indicadores, tomaremos un amplio y herboso camino que nace por la derecha ( NE ) y que remonta por la vertiente SW. de la frondosa cumbre de Ollakarizketa ( 987 m ).

El camino pierde paulatinamente entidad para transformarse en sendero y por este nos adentraremos bajo un tupido entorno mientras discurrimos bajo la ladera occidental del mencionado Ollakarizketa ( 987 m ) buscando alcanzar el paraje de Zugantzi ( 902 m ), enclavado bajo su vertiente septentrional. Un poste indicador destaca en el lugar señalizando el cruce de caminos en el que obviaremos el que desciende por la izquierda ( N ) hacia Salinas de Oro ( 678 m ) mientras continuamos por la derecha ( NE ).

El camino es amplio y notorio aunque discurre “ encajonado “ entre la frondosa vegetación que lo envuelve todo. No tardamos en alcanzar una pequeña campa herbosa, lugar en el que nuestro camino nuevamente se bifurca y punto en el que los hitos nos “ invitan “ a tomar el que continúa por la derecha ( E ).

El camino parece perder notoriedad y en breve alcanza un discreto cruce, lugar en el que las balizas e hitos señalizan un “ escondido “ sendero que nace por nuestra izquierda ( N ), por el que deberemos continuar.

La senda se adentra entre los bojes para continuar su paulatino ascenso, en todo momento discurriendo notoria y escrupulosamente balizada mientras discurre por la frondosa ladera meridional de Txarakadia ( 945 m ).

Alcanzamos la parte alta de la alomada y extremadamente frondosa cumbre citada, lugar en el que tropezaremos con la alambrada que delimita los términos de Salinas de Oro y el Valle de Guesálaz.

Caminamos junto a esta por un, en todo momento, notorio sendero. Numerosos hitos lo balizan mientras caminamos sin apenas desnivel por un tupido paraje.

Atravesamos la meseta cimera de Txarakadia ( 945 m ) aunque al “ tropezar “ con un amplio “ pasillo “ que, señalizado con cintas, nace por nuestra izquierda ( N ) buscando dar acceso a la cercana cumbre citada, no dudaremos en tomarlo para, de inmediato, desembocar en la mencionada cumbre. Txarakadia o Peña de en Medio ( 945 m ), un hito señaliza la tupida cima. Una inscripción en una de las piedras del mencionado hito la identifica. Sin panorámica alguna debido a lo “ cerrado “ del lugar.

El camino utilizado para alcanzar esta cima nos devuelve rápidamente al nuestro, por el que deberemos continuar, en todo momento discurriendo entre la frondosidad del entorno. Van apareciendo algunas palomeras, las que iremos dejando a nuestro paso mientras continuamos en plácido caminar.

Nuestro camino alcanza el paraje de Sorginantza ( 835m ), lugar en el que un poste indicador nos “ invita “ a abandonarlo para tomar la estrecha pero notoria senda que nace por la derecha ( E ) adentrándose entre los bojes que lo cubren todo.

El notorio sendero discurre por un estrecho pasillo que se abre entre los bojes y alcanza una pequeña explanada herbosa, cruce de caminos en el que un hito nos “ invita “ a continuar por la izquierda ( NE ), no tardando en alcanzar una alambrada. Esta delimita los términos de Vidaurreta/Bidaurreta y el Valle de Guesálaz y junto a ella remontaremos por la notoria senda en agradable ascenso mientras buscamos atravesar la más que discreta “ cimita “ de El Encinar ( 877 m ). Un hito la señaliza. Nula panorámica.

Continuamos en direción opuesta a la de ascenso y no tardamos en tropezar con una palomera enclavada junto a la alambrada anteriormente citada, la que deberemos cruzar para seguir discurriendo por el estrecho sendero que, entre el tupido bojedal, terminará por hacernos desembocar en lo alto del Puerto de Echauri ( 842 m ), atravesado por la carretera NA-700 Pamplona-Estella. Unas mesas y bancos enclavados en el lugar “ invitan” a un corto descanso. A escasos metros a nuestra derecha ( E ) podremos desviarnos hacia un “ mirador “, lugar que nos permite una bella y abierta panorámica hacia el Valle de Echauri.

Cruzamos el vial asfaltado para adentrarnos por el amplio camino que nace de frente ( N ), el cual inicia un “ cómodo ascenso, no tardando en alcanzar la ermita de la Virgen de la O, edificación enclavada en la prácticamente inapreciable cima de Monte Grande ( 880 m ). Desde la ermita disfrutaremos de una bella panorámica hacia el valle. En la parte trasera del blanco edificio una gran roca “ señaliza “ la cima de Monte Grande ( 880 m ), esta sin panorámica alguna.

Retomamos nuestro camino para continuar en dirección opuesta a la de subida, adentrándonos nuevamente en un frondoso entorno, por el que atravesaremos buscando encaminarnos hacia la ermita de Santa Lucia ( 872 m ), edificio enclavado en un pequeño claro abierto en el bosque y paraje en el que confluyen varios caminos. Un poste indicador destaca en el lugar.

Tomamos el camino que nace dejando la citada ermita a nuestra izquierda ( W ) y que adentrándose en el hayedo inicia un paulatino ascenso para ir acentuándose hasta alcanzar una notable inclinación. Tras un brutal ascenso alcanzaremos un hito que señaliza una discreta bifurcación, lugar en el que obviaremos el sendero que asciende por la derecha ( N ), en dirección a la cima de Sarbil ( 1135 m ), mientras continuamos hacia la izquierda ( NW ) por un camino que cada vez se hace más notorio y que se adentra en un frondoso hayedo.

En plácido caminar daremos alcance a una estratégica encrucijada de caminos que aparece balizada con un poste indicador, lugar en el que las balizas “ rojiblancas “ señalizan el camino que desciende por la izquierda ( NW ).  

El camino a seguir pierde altura paulatinamente junto a la alambrada que delimita una finca ganadera mientras gana notoriedad buscando descender hacia Muniáin de Guesálaz ( 815 m ) aunque nosotros, en breve y a la altura de una cerrada curva, lo abandonaremos para tomar la balizada senda que nace por la derecha ( NW ). Es el paraje de Arpide ( 991 m ), lugar en el que destaca un poste indicador.

El sendero, en todo momento perfectamente balizado, se adentra nuevamente entre bojes para, atravesando también amplios claros herbosos, discurrir por la ladera oriental de Itxesorde ( 1011 m ), cumbre que se eleva cercana a nuestra izquierda ( NW ) y hacia la que, ante su extremada cercanía, no dudaremos en desviarnos. Aprovechando los “ pasillos “ que se abren entre el boj la alcanzaremos de inmediato. Itxesorde ( 1011 m ), amplia y rodeada de vegetación de monte bajo. Un hito de piedras la señaliza. Limitada panorámica.

En dirección opuesta a la de ascenso, aprovechando nuevamente los “ pasillos “ que se abren entre los bojes, buscaremos retomar nuestro balizado sendero, en el que desembocaremos de inmediato y por el que continuaremos hacia la izquierda ( N ).

Perdemos altura siguiendo el escrupuloso balizaje, en el que hitos y marcas rojiblancas nos acompañan en la labor de atravesar las herbosas y amplias praderas que ” salpicadas “ de bojes se extienden por la amplia meseta de la Sierra de Sarbil.

Las balizas parecen querer encaminarnos hacia la Casa de Sarbil ( 937 m ), edificio que destaca en el centro de la citada meseta y sobre el que destaca la alargada cumbre de Mortxe ( 1123 m ), nuestro próximo objetivo.

Finalmente los hitos y balizas, tras dejar a su paso el dolmen de Sarbilzelai ( 920 m ) y atravesar un portillo que nos da acceso a un cada vez más notorio camino, se alejan paulatinamente de la citada Casa de Sarbil para desembocar en una amplia pista que atraviesa perpendicularmente.

Continuamos por esta de frente ( N ) y no tardamos en dejar a nuestro paso, a la izquierda ( W ) del camino, una antena y un pequeño edificio que le da servicio, lugar en el que también recibimos por la derecha ( SE ) una amplia pista, más notoria si cabe, a la que hacemos caso omiso.

De inmediato la pista pasa a ser hormigonada y por ella caminamos hasta “ tropezar “ con un nuevo cruce que aparece señalizado con un poste indicador. Estamos en el paraje de Zozoi ( 942 m ). 

Abandonamos el carretil cementado, Camino de Zozoi, que desciende de frente ( NW ), en dirección a la cercana localidad de Azanza ( 841 m ), mientras continuamos por la pista de tierra que nace por la derecha ( N ). Esta no tarda en volver a bifurcarse, momento en el que nuevamente tomaremos la que sigue por la derecha ( E ). Es el Camino de Arizdia.

Ganamos altura plácidamente entre campos de labor mientras que las balizas “ rojiblancas “ nos  acompañan en todo momento.

Damos alcance a un portillo que nos cierra el paso, tras el que nuestro camino se bifurca. Lo atravesamos y continuamos por la izquierda ( N ).

El marcado camino se abre paso entre vegetación de monte bajo mientras vamos dejando a nuestro paso bellos robles de gran porte. Paulatinamente el camino va perdiendo notoriedad para convertirse en un herboso sendero, el cual no tarda en volver a bifurcarse.

Acompañados en todo momento por las balizas “ rojiblancas “, además de por numerosos hitos, ganaremos altura “ cómodamente “ por la herbosa ladera que paulatinamente se va tornando más pedregosa. Dejamos a nuestro paso el paraje de Illarradi mientras buscamos encaminarnos hacia una visible baliza, la cual no tardaremos en alcanzar. Estamos en el paraje de Los Púlpitos ( 1100 m ), cota enclavada en el extremo SW. de la alomada cumbre de Mortxe ( 1123 m ), cuyo vértice geodésico asoma cercano a nuestra derecha ( NE ).

Caminamos en esa dirección ( NE ) por la amplia y herbosa loma, por la que no tardaremos en desembocar en la citada cumbre. Mortxe ( 1123 m ), un vértice geodésico y un buzón montañero la señalizan. Abierta panorámica.

En dirección opuesta a la de subida iniciaremos el descenso por el marcado y balizado senderito que desciende en dirección al “ paso “ que, salvando una alambrada, nos dará acceso  el pequeño “ cuello “ ( 1028 m ) sobre el que apenas destaca la discreta “ cota “ de las Peñas de Saldise ( 1043 m ).

Una vez alcanzado el citado “ colladito “ ( 1028 m ), las balizas señalizan el notorio sendero que desciende por la derecha ( E ) aunque nosotros, ante la cercanía de la mencionada “ cimita “ ( 1043 m ), no dudamos en desviarnos hacia esta.

Para ello remontaremos de frente ( N ) en dirección a una cercana alambrada que se extiende por lo alto de la loma, junto a la que continuaremos hasta prácticamente la cima. En su parte más alta abandonaremos la mencionada alambrada para salvar los últimos metros que nos permitirán alcanzar, sin dificultad reseñable, la cumbre. Peñas de Saldise o Txortu ( 1043 m ), pequeña y rocosa “ cimita “ de abierta panorámica. Una piedra, en la que aparece “ inscrito “ el nombre del monte en cuestión, la identifica.

El camino utilizado en el ascenso nos devuelve rápidamente al “ cuello “ ( 1028 m ) en el que, ahora sí, retomaremos nuestro balizado sendero, el cual nos encamina hacia una cercana balsa, en cuyas inmediaciones habitualmente pastan numerosas cabezas de ganado.

El camino gana notoriedad a la vez que acentúa paulatinamente la pendiente para terminar dando alcance al paraje de Xangulundi ( 839 m ), lugar en el que destaca un poste indicador y punto en el que abandonaremos el amplio camino para, tras salvar una alambrada por el “ paso “ colocado para tal efecto, tomar la senda que nace por la derecha ( E ).

El sendero, muy marcado en todo momento y escrupulosamente señalizado con hitos y balizas, alterna tramos de discurrir bajo la frondosidad del bosque con otros en los que atraviesa abiertos claros.

El escrupuloso balizaje no da lugar a la menor duda y junto a este dejaremos a nuestro paso unas pequeñas balsas y posteriormente la ruinosa ermita erigida en honor a San Cristóbal ( 640 m ), esta última enclavada bajo un tupido bosque.

Nuestro camino continúa su continuo descenso y termina por desembocar en el  depósito de agua de Eguillor/Egillor ( 571 m ), al que da acceso un carretil cementado que tomaremos para continuar perdiendo altura.

El citado vial posteriormente pasa a ser asfaltado y por este seguiremos descendiendo mientras obviamos posibles cruces en los que recibiremos caminos por la derecha ( SE )  y por la izquierda ( NW ).

Terminamos desembocando en la estrecha carreterita que, proveniente de la localidad de Eguillor/Egillor ( 440 m ), da acceso a la cercana Estación de Tratamiento de Agua Potable que asoma cercana a nuestra derecha ( SE ).

Obviando el citado vial que asciende hacia la mencionada “ estación “, deberemos continuar descendiendo de frente ( E ) aunque de inmediato, en el punto que este traza una cerrada curva hacia la derecha ( SE ), lo abandonaremos para tomar un, en principio, poco intuible sendero que nace al frente ( N ).

Este gana notoriedad de inmediato y, perfectamente balizado, alcanza nuevamente el vial asfaltado. Tomamos este por la izquierda ( N ) en dirección a Eguillor/Egillor ( 571 m ) aunque, de inmediato, alcanza un cruce, lugar en el que lo abandonaremos para tomar el que nace por la derecha ( SE ).

Este pierde altura “ cómodamente “ mientras da acceso a varias fincas, frente a una de las cuales deberemos estar “ atentos “ para, a la altura de un panel que indica “ atención cambios bruscos de caudal de agua “, tomar las escaleras de hormigón que descienden por la izquierda ( NE ). Estas dan acceso a una notoria senda, por la que continuaremos perdiendo altura para terminar desembocando en la Central Hidroeléctrica de Eguillor ( 398 m ), enclavada a orillas del río Araquil y a la que da acceso una amplia pista.

Tomando la citada pista por la izquierda ( N ) caminaremos junto a la margen izquierda del citado río mientras dejamos a nuestro paso los campos de cereal que se extienden a nuestra izquierda ( W ) y terminar alcanzando en breve el paraje de La Playa ( 397 m ), enclavado junto al puente que salva el cauce del Araquil y punto en el que damos por finalizada esta cuarta etapa.


Track del Itinerario


Fotos del Itinerario


A la entrada de Belascoáin/Beraskoain, enclavados a orillas de la carretera NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin, aparecen los paneles informativos ( izda ) sobre la Vuelta a la Cuenca de Pamplona o Senda GR-220. Junto a estos dimos por finalizada la tercera etapa y desde estos comenzaremos esta cuarta etapa

Detalle del panel informativo sobre la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona enclavado en Belascoáin/Beraskoain

A la entrada de Belascoáin/Beraskoain, junto al frontón de la localidad, podremos estacionar nuestro vehículo ( dcha )

Desde el panel informativo sobre la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona comenzaremos a caminar, en sentido descendente, por la carretera NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin

Las marcas rojiblancas ( izda ) balizan escrupulosamente el camino a seguir. Apenas caminamos unos pocos metros por asfalto cuando la carretera traza una cerrada curva hacia la derecha, momento en el que la abandonaremos para tomar el camino que nace la izquierda

El camino tomado se bifurca de inmediato, lugar en el que las balizas nos " invitan " a continuar por la derecha 

El camino tomado abandona Belascoáin/Beraskoain transformándose en pista de tierra

En breve " tropezamos " con un cruce, lugar en el que las balizas nuevamente nos vuelve " invitar " a continuar en descenso por la derecha  

El camino pierde altura " encerrado " entre campos y frutales

Belascoáin/Beraskoain queda rápidamente atrás asomando sobre los campos que vamos dejando a nuestro paso

Caminamos entre cerezos

A las cerezas les queda un poquito para terminar de madurar

A nuestro paso, a la derecha del camino ( izquierda en la foto ) dejaremos un pequeño depósito de agua 

Poco antes de desembocar nuevamente en la carretera NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin dejaremos a nuestro paso un nuevo cruce, lugar en el que obivaremos el camino que nace por la derecha en ascenso

Terminamos desembocando en la carretera NA-7015 Cizur Mayor-Belascoáin y por esta continuaremos hacia la izquierda para atravesar el puente " medieval " que salva el cauce del río Arga

Atravesamos el Puente de Belascoáin

Cruzamos sobre el río Arga

Una vez salvado el río Arga por el Puente de Belascoáin damos alcance a la carretera NA-7110 Echauri-Orendáin, vial que atravesaremos para continuar por la pista que nace al frente

En las inmediaciones del Puente de Belascoáin aparece enclavado un panel informativo sobre la ruta que nos ocupa, es decir, sobre la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona

Detalle del panel informativo sobre la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona enclavado en las inmediaciones del Puente de Belascoáin

Salvado el Puente de Belascoáin atravesaremos la carretera NA-7110 Echauri-Orendáin para tomar la pista que nace de frente

Apenas habremos caminado unos metros por la amplia pista cuando, a la altura de una cerrada curva, la abandonaremos para tomar el camino que nace al frente ( izda )

El camino no tarda en transformarse en un notorio sendero que aparece en todo momento escrupulosamente balizado

La senda amenaza con desaparecer entre la vegetación que la " envuelve " 

En breve " tropezaremos " con una marcada bifurcación, lugar en el que un hito ( dcha ) señaliza la senda que nace por la derecha, por la que deberemos continuar

Bifurcación en la que un hito nos  " invita " a tomar el notorio sendero que asciende por nuestra derecha ( izquierda en la foto ) 

La vegetación de monte bajo amenaza con " engullir " nuestro sendero

Las marcas rojiblancas ( dcha ) balizan escrupulosamente el notorio sendero

La marcada senda remonta en acusado ascenso

En algunos tramos el piso del sendero aparce " empedrado " 

El estrecho sendero se abre paso entre la vegetación de monte bajo que lo " envuelve " 

Desde el sendero por el que venimos remontando echamos una mirada hacia Belascoáin/Beraskoain, localidad desde la que hemos partido

Belascoáin/Beraskoain

El balizado sendero deja a su paso algunos de los viejos muros de piedra que delimitaban los campos que se extendían por la zona

El sendero busca alcanzar el " paso " que salva una alambrada

Una vez alcanzado el " paso ", lo atravesaremos para tomar el camino que cruza perpendicularmente, por el que continuaremos en ascenso hacia la izquierda  

La senda asciende paralela a la alambrada que acabamos de " salvar ", de la que se irá alejando paulatinamente

El sendero atraviesa amplios claros mientras discurre entre vegetación de monte bajo

El sendero en algunos tramos buscará adentrarse entre la vegetación que cubre este frondoso entorno

Además de las numerosas balizas ( centro ), esporádicos hitos ( izda ) señalizan nuestro camino

La notoria senda remonta en paulatino ascenso

No muy distante de nuestro camino, enclavado entre campos de cereal, llamará nuestra atención un blanco y renovado edificio, es la ermita de San Cristóbal ( centro )  

Ermita de San Cristóbal, recientemente restaurada

Nuestra notoria y balizada senda atraviesa entre un frondoso entorno

El notorio sendero atraviesa un amplio claro, lugar en el que destaca un obituario y una antigua choza  

Detalle del obituario que dejaremos a nuestro paso

Antigua choza que queda a la orilla de nuestro camino

El camino paulatinamente parece ganar notoriedad

Nuestro sendero se bifurca, punto en el que ascenderemos por la derecha 

La senda a seguir se dibuja notoria en el entorno

La estrecha pero marcada senda " serpentea " por la herbosa ladera que venimos atravesando 

Volvemos a mirar hacia Belascoáin/Belaskoain 

Las balizas " rojiblancas " señalizan en todo momento el camino a seguir

Nuestro camino vuelve a bifurcarse, momento en el que deberemso tomar la senda que nace por la derecha

A la altura de una piedra de " cañada " nuestro sendero desemboca en una camino más amplio y notorio que atraviesa perpendicularmente 

La piedra señaliza la Cañada Real Valdorba Andía ( CRVA )

Atravesamos el amplio y notorio camino que cruza perpendicularmente para tomar la senda ( centro ) que nace de frente. Una baliza pintada en un árbol ( centro ) la señaliza

Un pequeño hito y una baliza ( dcha ) señalizan la senda a seguir

El sendero tomado discurre notorio entre un frondoso entorno

A la altura de un notorio hito terminaremos desembocando en una amplia pista que atraviesa perpendicularmente, por la que deberemos continuar por la izquierda

La amplia pista gana altura plácidamente

Bifurcación, lugar en el que, como señaliza la baliza, abandonaremos la pista tomando el camino que nace por la derecha

El camino tomado se transforma de inmediato en un estrecho pero notorio sendero

A la altura de un notorio hito volveremos a desembocar en la pista abandonada anteriormente, la cual atravesaremos para seguir por la senda que nace de frente ( centro )

La senda tomada busca adentrarse en el frondoso bosque

El estrecho sendero, en todo momento escrupulosamente balizado, parece perder notoriedad

Nuestra senda vuelve a desembocar en una amplia pista que cruza perpendicularmente, por la que continuaremos hacia la izquierda

Ganamos altura en " cómodo " ascenso

Las balizas ( centro ) nos " invitan " a continuar por la pista

Un viejo portillo nos cierra el paso. Lo atravesaremos

La pista en algunos tramos se transforma en un herboso camino

Paulatinamente la pista gana notoriedad mientras busca alcanzar el collado de El Chaparral

Antes de alcanzar el collado de El Chaparral, bajo nuestro camino aparece una pequeña balsa. Sobre esta despunta Lakubarga ( dcha )

Terminamos desembocando en el collado de El Chaparral, encrucijada de caminos en la que destacan varios postes indicadores

Detalle del poste indicador enclavado en el collado de El Chaparral

Otro de los postes indicadores enclavados en el collado de El Chaparral

Detalle de otro de los postes indicadores enclavados en el collado de El Chaparral

Desde el collado de El Chaparral echamos una mirada hacia Peña Chiquita y Peña Grande ( dcha ), cimas que hoy se " alejan " de nuestra ruta 

Peña Chiquita ( izda ) y Peña Grande ( dcha )

Desde el collado de El Chaparral tomaremos el herboso camino que asciende por la vertiente SW. de Ollakarizketa, frondosa cumbre que se eleva ante nosotros

Dejamos atrás el collado de El Chaparral

Remontamos por el herboso camino buscando adentrarnos en el frondoso bosque

Nuestro camino paulatinamente se va adentrando entre la frondosidad del entorno

El camino parece ir perdiendo entidad y alcanza un cruce, lugar en el que, como indica la baliza ( dcha ), deberemos continuar por la izquierda

La marcada senda se abre paso entre el bosque 

El bosque paulatinamente parece querer " envolver " el sendero

La balizada senda se adentra en un cerrado bosque

El notorio sendero atraviesa esporádicos claros en el bosque

Esporádicos hitos " ayudan " en el balizaje de la ruta 

En el paraje de Zugantzi un poste indicador destaca a la orilla de nuestro amplio y herboso camino

El poste indicador enclavado en el paraje de Zugantzi señaliza una notoria bifurcación, lugar en el que deberemos continuar por el camino que sigue por la derecha 

Detalle del poste indicador enclavado en el paraje de Zugantzi

Bifurcación, lugar en el que obviaremos el camino que desciende hacia Salinas de Oro por la izquierda mientras remontamos por la derecha 

El notorio camino se abre paso entre la frondosa vegetación de monte bajo que lo envuelve

No tardaremos en desembocar en un pequeño claro en el bosque, cruce de caminos en el que un hito ( dcha ) nos " invita " a continuar por la derecha

Nos adentramos por un estrecho pero notorio sendero mientras que una baliza ( dcha ) nos " avisa " de un inminente cruce

Nuestro amplio y herboso camino alcanza una señalizada bifurcación, lugar en el que un hito y una baliza ( izda ) nos " invitan " a tomar la senda que nace por la izquierda

Un hito y una baliza señalizan la marcada senda que se adentra entre la frondosidad del bosque

La senda discurre entre la vegetación de monte bajo que la " envuelve " 

El " escrupuloso " balizaje señaliza en todo momento el sendero a seguir  

El sendero gana notoriedad mientras remonta en tendido ascenso

Nuestro camino alcanza la parte alta de la loma, lugar en el que destaca la alambrada que delimita los términos del Valle de Guesálaz y Salinas de Oro

Un claro en el bosque nos permite una abierta panorámica hacia el valle, donde destaca la localidad de Salinas de Oro

Salinas de Oro

Caminamos junto a la alambrada que delimita los términos de Salinas de Oro y el Valle de Guesálaz

El estrecho sendero se abre paso entre la vegetación de monte bajo que lo cubre todo

La senda continúa discurriendo por lo alto de la loma 

Los hitos comienzan a " aflorar " junto a nuestro camino

La senda se dibuja notoria y escrupulosamente balizada con hitos

La vegetación de monte bajo amenaza con " egullir " nuestro sendero

En un entorno cada vez más frondoso nuestro sendero continúa discurriendo notorio

El sendero ( izda ) por el que venimos discurriendo alcanza el punto en el que, por nuestra izquierda ( derecha en al foto ), nace el desvío que da acceso a la cima de Txarakadia. Lo tomamos

Algunas " cintas de plástico " ( dcha ) señalizan el camino a seguir

El camino parece ganar notoriedad

Terminamos alcanzando un amplio claro en el bosque, lugar en el que destaca un gran hito de piedras. Es la cima de Txarakadia o Peña de en Medio

Inscripición en una de las piedras del hito cimero de Txarakadia

El sendero utilizado en el acceso a la cima de Txaarakadia busca " devolvenos " a nuestro camino

Las " cintas de plástico " señalizan escrupulosamente el camino de aceso a la cima de Txarakadia

El sendero de acceso a la cima de Txarakadia ( izda ) no tarda en devolvernos a nuestro camino ( dcha ), por el que continuaremos en plácido discurrir

Sin apenas desnivel nuestro camino gana notoriedad mientras continúa su " cómodo " discurrir por la amplia loma 

Nuevamente convertido en sendero, este comienza a dejar a  su paso algunas palomeras ( dcha ) 

De nuevo en forma de herboso camino discurrimos por el amplio " pasillo " que se abre en el frondoso bosque

Atravesamos amplios claros en el bosque, lo que nos permite divisar ante nosotros la silueta de Sarbil ( centro )

En la cima de Sarbil se aprecia la ermita erigida en honor a Santa Cruz

Continuamos por un amplio y herboso camino, a cuya orilla llama nuestar atención un pequeño " indicador " ( dcha ) 

Detalle del " indicador " que dejaremos a nuestro paso junto al camino

En todo momento nuestro camino se muestra amplio y notorio

En el paraje de Sorginantza, a la orilla de nuestro camino, un poste indicador ( dcha ) señaliza una bifurcación, punto en el que lo abandonaremos para tomar la senda que nace por la derecha 

Poste indicador enclavado a la orilla de nuestro camino en el paraje de Sorginantza

Detalle del poste indicador

Nos adentramos por un estrecho sendero 

Bajo un " túnel " de vegetación alcanzamos un claro en el bosque

Nos topamos con un hito de piedras, lugar en el que nuestro camino se bifurca y punto donde deberemos continuar por nuestra izquierda

El camino gana notoriedad y vuelve a adentrarse en el frondoso bosque

Los hitos de piedras ( izda ) señalizan escrupulosamente nuestro camino

La senda discurre en tendido ascenso junto a una alambrada que delimita los términos del Valle de Guesálaz y Vidaurreta/Bidaurreta

La senda acentúa paulatinamente su pendiente mientras continúa discurriendo junto a la alambrada

Atravesamos por la cima de El Encinar, señalizada por un hito que aparece enclavado al otro lado de la alambrada

A la altura de una palomera atravesaremos la alambrada que ahora delimita los términos del Valle de Guesálaz y Echarri/Etxarri

El sendero se abre paso entre la frondosidad del entorno

Atravesamos esporádicos claros en el bosque

Las balizas rojiblancas señalizan en todo momento el notorio sendero

Terminamos desembocando en lo alto del Puerto de Echauri, atravesado por la carretera NA-700 Pamplona-Estella 

Monumento en el Puerto de Echauri

Panel en el Puerto de Echauri

Cruzamos la carretera que atraviesa el Puerto de Echauri buscando tomar el sendero que se adentra en el bosque que cubre la vertiente opuesta

Abandonamos el Puerto de Echauri

Un amplio y notorio sendero, escrupulosamente balizado en todo momento, se adentra bajo el frondoso bosque

Mientras caminamos entre la vegetación de monte bajo que cubre la parte baja del bosque, paulatinamente la senda acentúa su inclinación

El sendero alcanza la parte alta de la loma, lugar en el que asoma cercano un pequeño y blanco edificio

Es la ermita de la Virgen de la O

Desde la ermita de la Virgen de la O disfrutaremos de una abierta panorámica hacia parte de la Cuenca de Pamplona y el Valle de Echauri que se extiende en primer término

Ciriza

Echauri

Talla de madera enclavada en la fachada de la ermita de la Virgen de la O

La senda deja a su paso la ermita de la Virgen de la O, enclavada en la discreta cumbre de Monte Grande

El sendero atraviesa por la inapreciable cumbre de Monte Grande, en la que aparece enclavada la ermita de la Virgen de la O. Tras este pequeño edificio aparece el punto más elevado de esta más que discreta elevación

La cima de Monte Grande aparece tras la ermita de la Virgen de la O

Cima de Monte Grande, enclavada tras la ermita de la Virgen de la O

Tras visitar la cima de Monte Grande, de nuevo junto a la ermita de la Virgen de la O, retomaremos nuestro camino

El camino, muy notorio en todo momento, inicia un tendido descenso

Alcanzamos un discreto cruce, lugar en el que obviaremos el sendero que nace por nuestra derecha mientras seguimos de frente ( izda )

La estrecha senda parece querer abandonar la frondosidad del bosque

Salimos del bosque para continuar discurriendo entre vegetación de monte bajo mientras damos vista a Sarbil ( centro )

En la cima de Sarbil se aprecia el crucero que la " corona " 

Nuestro sendero no tardará en desembocar en la explanada en la que aparece enclavada la ermita erigida en honor a Santa Lucia, estratégica encrucijada de caminos en la que destaca un poste indicador

Detalle del poste indicador enclavado en las inmediaciones de la ermita de Santa Lucia

Placa en la fachada de la ermita de Santa Lucia

Dejando la ermita de Santa Lucia a nuestra izquierda tomaremos la senda que nace al frente ( centro )

El sendero, perfectamente balizado en todo momento, vuelve a adentrarse en el bosque

Paulatinamente la senda irá ganando notoriedad

El camino remonta en brutal ascenso

Nuestro camino se " encajona " entre grandes rocas

Tras un brutal ascenso, a la altura de un hito, nuestro camino se bifurca, momento en el que obviaremos la senda que asciende por la derecha hacia la cima de Sarbil mientras que nosotros continuamos por la izquierda 

En plácido discurrir nuestro camino busca adentrarse bajo un tupido hayedo

El camino gana en notoriedad mientras discurre a la sombra de las hayas

Desembocaremos en una amplia explanada abierta en el bosque, lugar en el que destaca el poste indicador que señaliza una notoria bifurcación. Obviando el camino que asciende por la derecha hacia la cima de Sarbil deberemos continuar por el que desciende hacia la izquierda

Detalle del poste indicador enclavado en la bifurcación

Abandonamos la bifurcación tomando el amplio y notorio camino que inica un tendido descenso

El camino tomado es amplio y notorio

Nuestro camino abandona el bosque y sale a terreno abierto, desde donde ya divisamos nuestro próximo objetivo, Mortxe ( centro ) 

Mientras perdemos altura plácidamente ante nosotros asoma la discreta cota de Itxesorde ( centro ) 

A nuestra derecha divisamos los extensos campos de cereal que tapizan la parte alta de la Sierra de Sarbil

Nuestro camino busca adentrarse nuevamente en el frondoso bosque

En el paraje de Arpide, en el punto en el que nuestro camino traza una cerrada curva hacia la izquierda,  aparece enclavado un poste indicador que señaliza la senda que nace por la derecha, por la que deberemos continuar

Detalle del poste indicador enclavado en el paraje de Arpide

Poste indicador enclavado en el paraje de Arpide, el cual señaliza el sendero que deberemos tomar

El sendero tomado se adentra entre el boj que lo cubre todo

En herboso sendero en algunos tramos amenaza con difuminarse, momento en el que los hitos " ayudan " en su señalización

El discreto sendero por el que caminamos atraviesa la alambrada que delimita los Valles de Guesálaz y Goñi

Numerosas balizas señalizan escrupulosamente el sendero a seguir

El sendero por el que discurrimos, escrupulosamente balizado en todo momento, deja a escasos metros sobre este la cerca cumbre de Itxesorde ( izda ), hacia la que no dudaremos en desviarnos

Aprovechando los " pasillos " que se abren entre el boj, buscaremos alcanzar la cima de Itxesorde

Hito en la cima de Itxesorde con vista a Sarbil ( centro )

Inscripción en el hito cimero de Itxesorde

Abandonamos la cima de Itxesorde caminando entre los bojes que tapizan sus laderas

Retomamos las balizas e hitos que señalizan nuestro camino, por el que continuaremos hacia la izquierda

Siguiendo las balizas rojiblancas alcanzaremos el paraje de Sarbilzelai, desde el que damos vista a la localidad de Azanza ( izda ),enclavada en las laderas de Mortxe ( centro )

Azanza

Baliza en el paraje de Sarbilzelai

Las balizas señalizan escrupulosamente el camino a seguir, el cual amenaza con difuminarse en las herbosas laderas

Hitos y balizas señalizan nuestro camino

Atravesamos amplias y herbosas praderas

Numerosos hitos y balizas " siembran " las herbosas praderas que vamos atravesando

A la izquierda de nuestro camino llamará nuestra atención un poste indicador ( centro ) que asoma cercano

Poste indicador, tras el que asoma la localidad de Goñi, enclavada en las laderas de la Sierra de Andía

Caminamos por terreno herboso y " tropezamos " con una " placa " ( dcha ) que " delata " la presencia de un monumento megalítico. Es el dolmen de Sarbilzelai

Placa que señaliza el dolmen de Sarbilzelai

Desde el dolmen de Sarbilzelai echamos una mirada atrás hacia Sarbil ( dcha )

Las balizas e hitos ( dcha ) señalizan un cada vez más notorio camino

Damos alcance a un portillo que cierra nuestro camino, el cual salvaremos por el " paso " aledaño ( dcha )

El marcado camino deja a su paso un " destrozado " poste indicador ( izda ) mientras se adentra entre la vegetación de monte bajo que tapiza las herbosas praderas

Poste indicador enclavado a la orilla de nuestro camino

Paulatinamente nuestro camino se hace más notorio si cabe

El balizado camino busca alcanzar una pista más amplia y notoria que atraviesa perpendicularmente, por la que continuaremos hacia la izquierda 

Ante nosotros vemos asomar una antena

No tardaremos en dejar a nuestro paso una pequeña antena y, junto a esta, la caseta que le da servicio

En las inmediaciones de la antena nuestra pista se bifurca. Hacemos caso omiso de la que nace por la derecha mientras que nosotros seguimos al frente por el vial que pasa a ser cementado

La localidad de Munárriz asoma cercana 

La pista cementada se bifurca en el paraje de Zozoi, momento en el que la abandonaremos para continuar por la derecha. Un poste indicador señaliza el cruce

Detalle del poste indicador enclavado en la bifurcación. Continuamos en direción a Eguillor/Egillor

La pista tomada continúa en tendido ascenso

De inmediato la pista se bifurca. Continuamos por la derecha por el Camino de Arizdia

El Camino de Arizdia gana altura en plácido ascenso

A la derecha del Camino de Arizdia se extienden extensos campos de cereal sobre los que destaca Sarbil

Desde el Camino de Arizdia ya damos vista a Mortxe, cima que asoma tímidamente sobre los campos de cereal que dejamos a nuestra izquierda

Un portillo nos cierra el paso, el cual atravesaremos para continuar por la izquierda

El camino continúa notorio en dirección a Mortxe, amplia loma que asoma al fondo

El camino se torna herboso

A nuestro paso dejaremos bellos ejemplares de roble

El amplio camino se transforma en notorio sendero 

En algunos tramos nuestro camino se difumina aunque los hitos lo señalizan escrupulosamente

Las balizas rojiblancas también señalizan nuestro camino

Nuestro camino discurre junto a los viejos muros de piedra que delimitan los extensos campos de cultivo, tras los que aparece cercana la localidad de Urdanoz mientras que Munárriz ( centro ) asoma al fondo

Munárriz asoma rodeada de campos de cultivo

Las balizas señalizan en todo momento el notorio sendero por el que caminamos

Paulatinamente nos iremos alejando de los muros de piedra que delimitan los campos

La notoria senda, en todo momento escrupulosamente balizada, acentúa su inclinación paulatinamente

Remontamos por el paraje de Illarradi

Baliza en el paraje de Illarradi

Conforme ganamos altura por las laderas de Mortxe los hitos que señalizan nuestro camino son más numerosos 

Los hitos ( centro ) y las balizas ( dcha ) señalizan escrupulosamente el camino a seguir

Las laderas de Mortxe se tornan pedregosas

Buscamos encaminarnos hacia la visible baliza ( izda ) enclavada en la parte alta de la loma cimera de Mortxe

Dando vista a la cima de Mortxe ( dcha ), alcanzamos la loma cimera en el paraje de Los Púlpitos, lugar en el que destaca una baliza

Baliza en el paraje de Los Púlpitos

Por la amplia y herbosa loma cimera nos encaminamos hacia la cercana cumbre de Mortxe ( centro )

A nuestros pies asoma el Valle de Ollo, sobre el que destaca la Sierra de Andia y en el horizonte Beriain

Miramos hacia Beriain ( izda ) y Leciza ( dcha ) 

Las balizas afloran en la loma cimera de Mortxe, cuya cumbre asoma ya cercana 

Txurregi ( centro ) y Gaztelu ( a su derecha ) despuntan sobre el Valle de Ollo que se extiende a nuestros pies

La Peña de Saldise ( centro ) asoma cercana mientras que en el horizonte aparecen Txurregi ( izda ), Gaztelu, Erga y Bizkai ( dcha ) 

Vértice geodésico y buzón montañero en la cima de Mortxe

Buzón montañero en la cima de Mortxe

Abandonamos la, hoy " concurrida ", cima de Mortxe

Desde la cima de Mortxe, por la ladera opuesta a la de ascenso, perderemos altura en dirección a la cercana Peña de Saldise ( centro ) que asoma en primer término 

Mientras descendemos por el paraje de Txortu echamos una mirada atrás hacia la cima de Mortxe

Baliza en el paraje de Txortu

Las balizas señalizan en todo momento el herboso y prácticamente inapreciable sendero por el que descendemos dando vista a la cercana Peña de Saldise ( centro ), tras la que aparecen en el horizonte Txurregi ( izda ), Gaztelu, Erga y Bizkai ( dcha ) 

Acompañados de los hitos que balizan nuestro camino buscaremos alcanzar el " paso " que nos permitirá salvar la alambrada que atraviesa perpendicularmente 

Siguiendo los numerosos hitos ( izda ) continuamos perdiendo altura por la herbosa ladera

Las balizas también son numerosas 

Hito en el discreto " colladito " abierto entre Mortxe y la Peña de Saldise, cumbre a la que, ante su cercanía, no dudo en desviarme    

Desde el hito junto al que decido desviarme hacia la cima de la Peña de Saldise gozamos de una bella y abierta panorámica hacia la Cuenca de Pamplona

Remontamos junto a una alambrada en dirección a la cercana Peña de Saldise

La alambrada se extiende por la parte alta de la loma cimera, por la que buscamos alcanzar la ya visible cumbre de la Peña de Saldise

Últimos metros hacia la cima de la Peña de Saldise

Cima de Saldise, desde la que damos vista a Txurregi ( izda ), Gaztelu ( centro ), el Paso de Oskia ( tras el que despunta Erga ) y Bizkai ( dcha ) 

Inscripción ( izda ) en el hito cimero que corona la cumbre de la Peña de Saldise, desde el que damos vista a Txurregi ( dcha ) y la Sierra de Satrústegi ( izda ) 

Mirada hacia el Valle de Ollo desde la cima de la Peña de Saldise

Desde la cima de la Peña de Saldise miramos también hacia Mortxe, cumbre que acabamos de " coronar "

Desde el hito cimero de la Peña de Saldise miramos hacia Eguillor/Egillor ( centro ), punto de destino de esta cuarta etapa

Abandonamos la cima de la Peña de Saldise buscando descender nuevamente hacia el " colladito " que nos separa de Mortxe, lugar desde el que nos desviamos hacia la cumbre en la que estamos 

Descendemos de la cima de la Peña de Saldise por sus herbosas laderas, sobre la que destaca Mortxe ( dcha ) 

No tardaremos en alcanzar nuevamente la línea de hitos y balizas, junto a los que deberemos continuar descendiendo

El sendero gana notoriedad de inmediato mientras continúa su tendido descenso dando vista a la Cuenca de Pamplona 

Descendemos dando vista a Txurregi ( izda ), Erga, el Paso de Oskia y Bizkai ( centro )mientras que el Castillo de Garaño ( derecha-abajo )

Castillo de Garaño

Mirada hacia Beasoain ( izda ), Eguillor/Egillor y el paraje de La Playa ( pabellón-centro ), este último nuestro destino para esta cuarta etapa

Nuestro sendero busca encaaminarse hacia una pequeña balsa ( centro ) que asoma cercana 

Mirada hacia Eguillor/Egillor y el paraje de La Playa ( pabellón y puente sobre el río Araquil )

La notoria senda no tarda en dejar a su paso una balsa artificial

Desde la balsa artificial nuestro sendero acentuará su pendiente notablemente

A nuestro paso dejaremos también un abrevadero, lugar frecuentado por numerosas cabezas de ganado

Dando vista al Paso de Oskia, abierto entre Gaztelu ( centro ) y Bizkai ( dcha ), nuestro camino gana en notoriedad

El notorio camino pierde altura en plácido descenso

Mirada hacia el Castillo de Garaño ( izda ), bajo el que asoman Beasoain y Eguillor/Egillor

La Cuenca de Pamplona se extiende en el horizonte bajo Izaga ( centro ) y La Higa

En el paraje de Txangulundi nuestro camino alcanza una balizada bifurcación, lugar en el que destaca un poste indicador y punto en el que lo abandonaremos para atravesar la alambrada por el " paso " habiltado para tal efecto

Poste indicador y " paso " en la alambrada. Lo atravesaremos

Detalle del poste indicador enclavado en el paraje de Txangulundi

Una vez salvado el " paso " en la alambrada, nuestro sendero, en todo momento perfectamente balizado, continúa su " cómodo " discurrir

La senda se adentra en un frondoso entorno

Balizas e hitos señalizan nuestro notorio sendero

Volvemos a adentranos en el frondoso bosque

A nuestro paso dejaremos bellos ejemplares de hayas

El balizado sendero discurre entre el joven hayedo

Hitos y balizas señalizan en todo momento el camino a seguir

Nuestro camino gana notoriedad paulatinamente

La notoria senda atraviesa un amplio claro en el bosque

Nuestro sendero, a la altura de un hito, termina desembocando en un camino más amplio y notorio que atraviesa perpendicularmete, por el que continuaremos descendiendo hacia la izquierda 

A nuestro paso, junto al camino, dejaremos a nuestro paso una balsa

El camino continúa en agradable discurrir

A nuestro paso queda una nueva balsa

 A la orilla de nuestro camino, en un claro abierto en el bosque, destacan las ruinas de una vieja borda ( dcha )

El camino, muy notorio, atraviesa un amplio claro en el bosque

Nuestro camino, el Camino de San Cristobal, pierde altura en acusado descenso

Nuestro camino se bifurca, momento en el que lo abandonaremos paar tomar la senda que nace por la izquierda

Entre la frondosidad del entorno asoma una nueva balsa

Balsa que queda a nuestro paso junto al camino

Un murete de piedra asoma en las inmediaciones de nuestro camino

La senda deja a su paso la ermita de San Cristóbal, en ruinoso estado

Baliza en la pared de la ruinosa ermita de San Cristóbal

El camino se adentra bajo un "túnel " de vegetaión

Atravesamos esporádicos claros abiertos en el bosque

Los hitos ( dcha ) balizan el camino a seguir, desde el que ya divisamos el paraje de La Playa ( centro ), destino de esta cuarta etapa

Nuestro camino, escrupulosamente balizado con hitos, paulainamente va ganando notoriedad

Desembocamos junto al depósito de agua de Eguillor, sobre el que destaca la alargada cumbre de Bizkai

El camino deja a su paso el depósito de agua de Eguillor

Desembocamos en el carretil cementado que da acceso al depósito de agua de Eguillor, por el que continuaremos descendiendo hacia la derecha 

Punto en el que nuestro camino ( izda ) desemboca en el carretil cementado que da acceso al depósito de agua de Eguillor, el cual dejaremos rápidamenete atrás

El carretil hormigonado pierde altura en acusado descenso

El vial por el que descendemos pasa a ser asfaltado y se bifurca, punto en el que obviaremos el que nace por la derecha mientras continuamos perdiendo altura de frente ( centro )

Desde el vial por el que venimos descendiendo damos vista a la Estación de Tratamiento de Agua Potable de Eguillor

Acompañados de las balizas rojiblancas continuaremos perdiendo altura en acusada pendiente

La carreterita por la que descendemos deja a su paso un nuevo cruce, lugar en el que obviaremos el camino que nace por nuestra izquierda mientras continuamos descendiendo de frente ( centro )

A la altura de un viejo caserón ( izda ) terminamos desembocando en la carreterita que, por la derecha, da acceso a la Estación de Tratamiento de Agua Potable de Eguillor. Continuaremos descendiendo por esta de frente ( centro )

Dejamos atrás el lugar en el que el vial ( dcha ) por el que venimos descendiendo desemboca en la carreterita que da acceso a la Estación de Tratamiento de Agua Potable de Eguillor ( izda )

Apenas caminaremos unos pocos metros por la carreterita ya que, en cuanto esta traza una cerrada curva hacia la derecha, la abandonaremos para tomar el prácticamente inapreciable sendero que nace de frente ( centro )

Entre la alta hierba apenas se aprecia el punto en el que nace el sendero ( centro ) que deberemos tomar

La senda, balizada con hitos, gana notoriedad de inmediato

De inmediato desembocaremos nuevamente en el vial asfaltado que acabamos de abandonar. Continuaremos por este en descenso hacia la izquierda

La carreterita se bifurca de inmediato, lugar en el que abandonamos la que continúa hacia Eguillor/Egillor ( izda ) para tomar la que nace por la derecha 

Mirada atrás hacia el lugar en el que abandonamos la carreterita que da acceso a la Estación de Tratamiento de Agua Potable de Eguillor, por la que venimos descendiendo, para tomar el vial que nace  por nuestra derecha ( izquierda en la foto  )

El vial tomado deja a su paso el acceso a diferentes fincas

Abandonaremos el asfalto junto a una señal ( izda ) que tendremos como referencia y que aparece enclavada frente a una de las fincas a la que da acceso el vial por el que caminamos  

Señal que tomaremos como referencia para abandonar el asfalto por nuestra izquierda

Descendemos por un tramo de escaleras de hormigón

Tras salvar las escaleras de hormigón continuaremos por un notorio sendero

Las balizas ( dcha ) señalizan la estrecha pero notoria senda que se abre paso entre la alta hierba

La senda por la que caminamos nos permite dar vista a la localidad de Beasoain, tras la que se abre el Passo de Oskia entre Gaztelu ( izda ) y Bizkai ( dcha )

También damos vista al puente que salva el río Araquil, junto al que, en el paraje de La Playa, veo que ya han venido a recogerme

El notorio sendero discurre entre altas hierbas

Mientras perdemos altura por la notoria senda damos vista al río Araquil ( centro )

La marcada senda termina alcanzando los campos de cultivo que se extiende en la parte baja del valle

Desembocamos junto a la Central Hidroeléctrica de Eguillor/Egillor 

Alcanzamos la amplia pista que da acceso a la Central Hidroeléctrica de Eguillor/Egillor, por la que deberemos continuar hacia la izquierda 

Central Hidroeléctrica de Eguillor/Egillor

La amplia pista tomada discurre sin apenas desnivel 

Dejamos atrás la Central Hidroeléctrica de Eguillor/Egillor mientras caminamos junto a la margen izquierda del río Araquil ( izda )

El río Araquil discurre junto a nuestro camino  

A la orilla de nuestro camino aparecen algunos bancos que " invitan " al descanso 

Sobre el polígono industrial que asoma ya cercano se intuye el Paso de Oskia ( centro ), abierto entre Gaztelu ( izda ) y Bizkai ( dcha )

Sobre los campos de cereal que vamos dejando a nuestro paso destaca la localidad de Eguillor/Egillor

Eguillor/Egillor

El Castillo de Garaño ( izda ), Txurregi ( centro ) y Gaztelu ( dcha ) despuntan sobre el polígono industrial que asoma en primer término 

Alcanzamos el paraje de La Playa, enclavado junto al puente que salva el río Araquil y donde ya me están esperando  

Puente sobre el río Araquil en el paraje de La Playa

Detalle de uno de los paneles informativos enclavados en el paraje de La Playa

Detalle de uno de los paneles informativos enclavados en el paraje de La Playa

Paraje de La Playa, lugar en el damos por finalizada esta cuarta etapa y donde aparecen enclavados dos paneles informativos sobre la Senda GR-220 o Vuelta a la Cuenca de Pamplona, tras lo que asoma la localidad de Eguillor/Egillor

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