Enclavado en la
vertiente cantábrica de Navarra, allá donde confluyen las tierras del Valle de
Baztán y las de Echalar/Etxalar, en un remoto paraje se “ esconde “el que dicen
fue el único molino de la zona que durante la Guerra Civil ( 1936-1939 ) permaneció
en funcionamiento de manera clandestina.
Infernuko Errota, el ”
Molino del Infierno “, toma nombre del riachuelo sobre el que se levanta,
Infernuko Erreka, la “ Regata del Infierno “. Construido en la época carlista
este molino desempeñó un importante papel para los numerosos soldados dispersos
por la zona ya que acudían a él para aprovisionarse de harina. El molino
perteneció a la Villa de Echalar/Etxalar y al Valle de Baztán.
Tras años de
funcionamiento, en los que la gente de la zona se acercaba a moler el maíz
cosechado en los campos, el molino se abandonó y estuvo en estado ruinoso. Todo
cambió cuando, en el año 2000, la familia Argarate, vecinos del cercano caserío
Etxebertzeko Borda, lo adquirió y rehabilitó. A día de hoy, gracias a esta familia,
el ” Molino del Infierno “ luce ese “ renovado “ aspecto que lo ha convertido
en todo un “ reclamo “ turístico, cultural e histórico.
Obviamente son
numerosos los caminos que antaño accedían a este remoto paraje y aunque muchos
de ellos prácticamente han desaparecido o han caído en el olvido todavía
podemos disfrutar de algunas de esas rutas.
Debido a su ubicación,
los itinerarios más “ clásicos “ son los que parten desde Echalar/Etxalar ( 97
m ) o sus alrededores y por supuesto los que también lo hacen desde la
vertiente baztanesa.
El Valle de Baztán nos
ofrece los accesos más “ cómodos “ y actualmente los más utilizados.
El estrecho y sinuoso
carretil asfaltado NA-4453 da acceso al paraje de Orabidea, recóndito lugar en
el que queda enclavado Infernuko Errota.
El sendero balizado
como SL NA-13 señaliza un corto itinerario que nace desde Irigoiengo Borda (
512 m ), caserío enclavado en las inmediaciones del kilómetro 15 de la citada
carreterita.
Aunque, sin lugar a
dudas, la ruta más “ cómoda “ y por lo tanto la más utilizada por los que
buscan acercarse a este bucólico enclave, es la que parte desde Etxebertzeko
Borda ( 369 m ), caserío situado en las inmediaciones del molino y a su vez uno
de los restaurantes más “ reconocidos “ del Valle de Baztán. Lo alcanzaremos
desde un señalizado desvío situado en las inmediaciones del kilómetro 16 de la
carretera anteriormente mencionada.
El itinerario que nace
desde Etxebertzeko Borda ( 369 m ) no pasa de ser un corto y agradable “ paseo
“ que resulta apto todos los públicos. Eso sí, resulta aconsejable utilizar
calzado adecuado para actividades de montaña debido a lo “ húmedo “ de este
paraje, sobre todo en el entorno de Infernuko Errota. ¡¡¡ Ojo !!! con lo
resbaladizo del lugar.
Este último itinerario
que parte desde Etxebertzeko Borda ( 369 m ) es el que me dispongo a reseñar
aunque debido a lo “ excesivamente “ corto que supone realizarlo “ ida y vuelta
“ por el mismo lugar ( 3 kilómetros y aproximadamente una hora ), lo he “
alargado “ ligeramente buscando efectuar una ruta “ circular “ tan solamente un
poquito más extensa. Esta es mi propuesta, espero que la disfrutéis.
Resumen
del Itinerario
Una de las rutas más “
cómodas “, por no decir la más cómoda, para visitar Infernuko Errota, “ el Molino
del Infierno “, parte desde Etxebertzeko Borda ( 369 m ), caserío y a su vez uno
de los restaurantes más “ reconocidos “ del Valle de Baztán.
Enclavado en uno de los
parajes más recónditos del citado Valle, la carreterita NA-4453
Mugaire-Orabidea-Otsondo le da acceso. A las afueras de Oronoz-Mugaire ( 150 m
), en dirección a Elizondo ( 202 m ), junto a una pequeña cantera, tomaremos el
mencionado vial asfaltado, el cual terminará alcanzando Etxebertzeko Borda (
369 m ) tras algo más de 16 kilómetros de sinuoso discurrir.
En las inmediaciones de
este cuidado caserío ( 369 m ) destaca un bonito frontón y junto a este una
zona para estacionar nuestro vehículo.
Desde el citado
aparcamiento ( 369 m ) descenderemos por el camino cementado que deja
Etxebertzeko Borda a nuestra derecha ( W ) para alcanzar de inmediato la
balizada senda SL NA-13 que, por la izquierda ( SE ), proviene de Irigoiengo
Borda ( 512 m ).
Tomaremos por la
derecha ( W ) el citado sendero y no tardaremos en alcanzar el cauce de
Infernuko Erreka para discurrir junto a su margen derecha. El camino discurre en
todo momento perfectamente señalizado para atravesar varios de los rústicos puentes
que salvan las pequeñas regatas que discurren saltarinas buscando verter sus
aguas en el citado riachuelo. A nuestro paso dejaremos también varios cruces
perfectamente señalizados.
Caminaremos a la sombra
de un frondoso bosque para de manera plácida terminar dando alcanzando a
Infernuko Errota, el conocido “ Molino del Infierno “.
Tras visitarlo
retornaremos hasta la última bifurcación dejada atrás, lugar en el que
anteriormente nos desviamos hacia el citado molino y en el que ahora “
retomaremos “ las balizas “ verdiblancas “ de la Senda SL NA-13.
Siguiendo el notorio y
balizado camino ascenderemos hasta “ tropezar “, en las inmediaciones de
Baztanen Borda ( 374 m ), con un nuevo cruce, lugar en el que destaca un
indicador.
Abandonamos las balizas
de la Senda SL NA-13 que continúa hacia la izquierda ( N ) para tomar el amplio
camino que asciende cómodamente por la derecha ( SE ). En agradable discurrir alternaremos
tramos de caminar bajo el frondoso arbolado con otros en los que dejaremos a
nuestro paso algunos de los extensos y verdes prados que tapizan este bello y
recóndito paraje.
Haciendo caso omiso a
los posibles caminos que nacen desde el nuestro, dejaremos a nuestro paso
dispersos caseríos como Lekunberriko Harateko Borda, Lekunberriko Honateko
Borda o Burrarteko Borda.
Tras este último,
deberemos estar atentos al cercano cruce en el que deberemos abandonar la
amplia y marcada pista por la que caminamos para tomar un notorio sendero que nace
por la derecha ( SW ).
Encajonados entre
helechos y posteriormente bajo un tupido arbolado terminaremos desembocando en las
inmediaciones de Lizardiko Borda, caserío que dejaremos cercano a nuestra
derecha ( W ) mientras continuaremos por la izquierda ( S ).
No tardaremos en
abandonar el notorio camino que le da acceso, nuevamente por la derecha ( SW ),
para continuar nuestro descenso junto a la alambrada que delimita el prado
aledaño al citado caserío.
El camino irá perdiendo
notoriedad para terminar convirtiéndose en un marcado sendero, el cual
rápidamente dará alcance al que, desde Etxebertzeko Borda ( 369 m ), da acceso
a Infernuko Errota, camino por el que discurrimos al comienzo de este
itinerario y que nos devolverá en breve al punto de partida.
Datos
del Itinerario
Desnivel:
252 m.
Tiempo:
De 2 h a 3 h
Distancia:
7´92 km
Inicio:
Etxebertzeko Borda ( Km 16´5 de la carretera NA 4453 )
Fecha
de realización: Octubre 2021
Epoca
recomendada: Todo el año
Cimas:
No se ascienden cimas
Descripción del
Itinerario
Iniciamos este corto “
paseo “ desde el caserío y conocido restaurante Etxebertzeko Borda ( 369 m ),
enclavado en uno de los parajes más recónditos del Valle de Baztán.
Junto al citado caserío
destaca un coqueto frontón y a su lado un pequeño aparcamiento en el que
estacionaremos nuestro vehículo. Será desde aquí desde donde comenzaremos a
caminar tomando el vial cementado que, dejando el citado caserío a nuestra
derecha ( W ), desciende para dar acceso a un prado.
Perpendicularmente nos
atraviesa un amplio y balizado camino, es el sendero local SL NA-13 que, por la
izquierda ( SE ), proviene de Irigoiengo Borda ( 512 m ). Un indicador
enclavado junto al portillo que da acceso al citado prado nos “ invita “ a
continuar por la derecha ( W ).
El camino se “ encajona
“ entre la alambrada que cierra el prado que tenemos a nuestra izquierda ( S )
y el caserío Etxebertzeko Borda que lo dejamos en todo momento a nuestra
derecha ( N ). A nuestro paso iremos dejando los diferentes edificios que dan
servicio al citado caserío.
El notorio camino se
transforma paulatinamente en un herboso sendero que de inmediato alcanza la
entrada a otro parado. Un poste indicador situado junto al portillo que le da
acceso señaliza la senda por la que debemos continuar.
No tardaremos en
penetrar bajo el frondoso arbolado para caminar junto a la margen derecha de
Infernuko Erreka, la “ regata del Infierno “. En breve la senda por la que
caminamos deja a nuestra izquierda ( W ) un rústico puente construido con
troncos que salva su cauce.
Hacemos caso omiso del
citado puente para continuar caminando junto a la mencionada regata, de la que
nos iremos alejando paulatinamente. La senda no tarda en atravesar otro pequeño
puente, el que salva Beltxeneko Erreka.
Atravesado este, un
nuevo indicador señaliza nuestro sendero, el cual a partir de este punto inicia
un tendido ascenso.
En breve damos alcance
a una marcada bifurcación, lugar en el que haremos caso omiso del camino que
asciende por la derecha ( NW ), por el cual regresaremos, mientras iniciamos un
agradable descenso por el de la izquierda ( W ), señalizado con un indicador.
Caminamos en todo
momento a la sobra de un frondoso bosque mientras bajo la notoria senda
discurre algo alejada Infernuko Erreka. Paulatinamente iniciaremos un agradable
descenso que nos hará volver a alcanzar nuevamente su cauce, junto al que
continuaremos caminando.
Atravesaremos
nuevamente un puente, el cual vuelve a salvar el cauce de otra pequeña regata
en el lugar en el que esta desagua en Infernuko Erreka.
Poco más adelante
volvemos a “ tropezar “ con una balizada bifurcación, punto en el que momentáneamente
abandonaremos el sendero que asciende por la derecha ( NW ), al cual
retomaremos posteriormente, mientras seguimos en suave descenso por la
izquierda ( W ).
Varios indicadores
señalizan el camino que, de inmediato, deja a la izquierda ( S ) otro rústico
puente de madera que también salva el cauce de Infernuko Erreka.
La senda se separa por
un momento de la regata para iniciar un corto ascenso y, “ protegida “ por una
“ barandilla “ de madera, bajo la que aparece el tejado de Infernuko Errota,
descender para desembocar junto a este. Bello enclave en el que deberemos tener
cuidado con la humedad, ya que hace que el piso sea extremadamente resbaladizo.
Tras visitar el molino
retornaremos hasta la última bifurcación que hemos dejado atrás, punto en el
que, hora sí, retomaremos el sendero al que antes hicimos caso omiso. Las
balizas de la senda SL NA-13 lo señalizan.
La senda gana altura en
acusado ascenso mientras que paulatinamente se transforma en un amplio y
notorio camino, el cual discurre entre pinos, hayas y numerosos castaños. Las
balizas “ verdiblancas “ lo señalizan escrupulosamente.
Plácidamente
terminaremos desembocando en un notorio cruce, lugar en el que, en las
inmediaciones de Baztanen Borda, destaca un poste indicador y en el que un
camino más notorio nos atraviesa perpendicularmente.
Abandonamos
definitivamente las balizas que continúan señalizando el camino que sigue por
la izquierda ( N ) mientras tomamos el que asciende plácidamente por la derecha
( SE ).
Apenas habremos
caminado unos pocos metros cuando haremos caso omiso del camino que nace por la
izquierda ( NW ) encerrado entre helechos y en acusado ascenso.
Seguimos de frente ( SE
) y, de inmediato, nos topamos con una nueva bifurcación, punto en el que
volveremos a hacer caso omiso del camino que nace por nuestra izquierda ( N )
mientras continuamos de frente ( SE ).
La pista parece perder
notoriedad mientras se “ encierra “ entre pinos para posteriormente continuar
discurriendo entre el bosque que se extiende a su izquierda ( W ) y los verdes
prados que lo hacen a la derecha ( E ).
Bajo nuestro camino
dejaremos a nuestro paso caseríos como Lekunberriko Harateko Borda o
Lekunberriko Honateko Borda, hacia los que descienden sendos accesos por
nuestra derecha ( S ), a los que haremos caso omiso. Continuamos de frente ( NE
) en todo momento obviando también posibles caminos que nazcan por nuestra
izquierda ( N ).
Paulatinamente la pista
vuelve a ganar notoriedad mientras acentúa su inclinación dejando a su paso una
renovada borda que antaño, según me comenta su actual moradora, perteneció al
cercano caserío Burrarteko Borda y que actualmente ha sido reconvertida en una
“ coqueta “ casita.
La dejamos atrás para
de inmediato volver a toparnos con un marcado cruce, lugar en el que hacemos
caso omiso del camino que nace por la izquierda ( NE ) mientras continuamos de
frente ( SE ).
No tardamos en dejar a
nuestro paso, a la derecha ( N ) del camino, la anteriormente citada Burrarteko
Borda y poco más adelante, esta vez a la izquierda ( S ), un pequeño “ barracón
“.
La pista asciende
plácidamente buscando salir a terreno abierto, momento en el que esta traza una
cerrada curva hacia la izquierda ( SE ) y lugar en el que deberemos prestar
atención para tomar el notorio sendero que nace por la derecha ( SW ).
La senda pierde altura
en acusado descenso y no tarda en desembocar en la pista que da acceso a Lizardiko
Borda, caserío que asoma cercano a nuestra derecha ( W ).
Tomamos la citada pista
por la izquierda ( S ) aunque no tardaremos en abandonarla para tomar el
notorio camino que desciende por la derecha ( SW ) junto a la alambrada que
cierra el prado aledaño al caserío citado anteriormente.
En breve nos topamos
con una nueva bifurcación, lugar en el que volveremos a optar por continuar
descendiendo por el camino de la derecha ( SW ) que sigue discurriendo junto a
la alambrada anteriormente mencionada.
El camino tomado pierde
notoriedad para convertirse en un marcado sendero, el cual desciende bajo el
frondoso bosque para terminar desembocando en la bifurcación por la que ya
pasamos al comienzo del itinerario. Alcanzamos el camino procedente de
Etxebertzeko Borda ( 369 m ), lugar en el que dio comienzo esta ruta y al que
retornaremos “ desandando “ el corto que ya conocemos.
Track del Itinerario
Fotos del Itinerario
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Etxebertzeko Borda, restaurante desde el que da comienzo este itinerario |
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Un cartel indica el nombre de la casa desde la que da comienzo esta ruta y el " comedor " del restaurante |
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Etxebertzeko Borda cuenta con un frontón, junto al que hay espacio para estacionar unos cuantos vehículos |
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Comedor al aire libre en Etxebertzeko Borda |
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Un indicador situado junto al aparcamiento aledaño a Etxebertzeko Borda señaliza el lugar por el que da comienzo este itinerario |
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Detalle del poste indicador situado junto al aparcamiento aledaño a Etxebertzeko Borda
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Desde el aparcamiento tomaremos el carretil cementado que desciende dejando a su derecha Etxebertzeko Borda |
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El carretil cementado da acceso a las propiedades de Etxebertzeko Borda. Recibimos por la izquierda el sendero SL NA-13 procedente de Irigoiengo Borda. Continuamos por la derecha como señaliza el indicador |
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Un amplio y notorio camino nace desde la parte trasera de Etxebertzeko Borda |
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El camino de inmediato se torna herboso |
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Discurrimos junto a la alambrada que delimita los verdes y extensos prados aledaños a nuestro camino |
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El notorio camino discurre dejando a su paso los terrenos y pequeños edificios aledaños a Etxebertzeko Borda |
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Poste indicador del sendero SL NA-13 señalizando el camino a seguir |
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Detalle del poste indicador que señaliza nuestro camino |
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El camino se adentra en el frondoso bosque |
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A la sombra del bosque el camino continúa siendo muy notorio |
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Discurrimos paralelos al cauce de Infernuko Erreka |
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El camino en algunos tramos pierde notoriedad pasando a convertirse en sendero |
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Algunos de los árboles que dejamos a nuestro paso junto al camino nos muestran sus enormes raices |
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Nuestro camino no tarda en dejar a su paso un pequeño puente que, por la izquierda, salva el cauce de Infernuko Erreka. Lo obviamos |
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Puente sobre Infernuko Erreka, al cual haremos caso omiso |
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Detalle del rústico puente construido con troncos que salva el cauce de Infernuko Erreka |
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Nuestro camino gana notoriedad mientras continúa discurriendo junto al cauce de Infernuko Erreka |
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En algunos tramos nuestro camino aparece ligeramente anegado |
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Rápidamente daremos alcance a un segundo puente, el cual salva el cauce de Beltxeneko Erreka |
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Salvado el cauce de Beltxeneko Erreka nuestro camino inicia un acusado ascenso. Un indicador señaliza el marcado sendero |
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Detalle del indicador que señaliza nuestro camino |
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El sendero se torna pedregoso mientras inicia un corto aunque acusado ascenso |
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La senda pierde inclinación aunque continúa en tendido ascenso |
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La senda discurre muy marcada en la inclinada ladera |
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El sendero se bifurca. Hacemos caso omiso del camino que asciende por la derecha, por el cual posteriormente regresaremos, mientras descendemos por la izquierda como señaliza el indicador |
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El señalizado sendero que hemos tomado inicia un tendido descenso |
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Las balizas " verdiblancas " ( izda ) del sendero SL NA-13 señalizan la notoria senda |
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Infernuko Erreka discurre bajo nuestro camino |
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La senda por la que caminamos discurre muy notoria en todo momento |
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Las enormes raices de algunos de los árboles que dejamos a nuestro paso atraviesan nuestro camino |
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El notorio sendero pierde altura en agradable descenso buscando alcanzar nuevamente el cauce de Infernuko Erreka |
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Caminamos bajo un frondoso hayedo, en el que llamarán nuestra tención los viejos ejemplares |
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Viejos ejemplares de hayas flanquean nuestro camino |
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El cauce de Infernuko Erreka nuevamente aparece cercano |
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Volvemos a caminar junto al cauce de Infernuko Erreka |
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Nuestro camino atraviesa un nuevo puente en el punto en el que este salva el cauce de una pequeña regata que desciende desde la derecha para verter sus aguas en Infernuko Erreka ( izda ) |
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Regata que atravesamos |
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La regata que atravesamos forma pequeños saltos de agua |
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Nuestro camino continúa discurriendo paralelo al cauce de Infernuko Erreka |
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Nuestro camino vuelve a bifurcarse ya muy cerca de Infernuko Errota. Descendemos por el sendero de la izquierda aunque posteriormente regresaremos a este punto para tomar el que asciende por la derecha |
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Un panel indicador enclavado en la bifurcación señaliza el camino a seguir
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El sendero tomado continúa descendiendo para nuevamente alcanzar el cauce de Infernuko Erreka |
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A nuestro paso, junto al camino, haremos caso omiso del rústico puente que salva el cauce de Infernuko Erreka |
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Tras el corto descenso nuestro camino inicia un agradable ascenso. Un nuevo indicador ( dcha ) señaliza el ya cercano Infernuko Errota |
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Bajo nuestro camino, protegido con una rústica " barandilla " construida con troncos, asoma el tejado de Infernuko Errota |
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Tejado de Infernuko Errota |
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Nuestro camino ( izda ) da acceso a Infernuko Errota
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Infernuko Errota. Infernuko Erreka discurre bajo el molino |
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Infernuko Erreka |
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Varias compuertas regulan el caudal de Infernuko Erreka |
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Infernuko Errota, accedemos al molino
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Entrada a Infernuko Errota |
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Interior de Infernuko Errota |
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Interior de Infernuko Errota
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Infernuko Errota |
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Abandonamos Infernuko Errota para retomar el camino ( izda ) que le da acceso
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Dejamos atrás Infernuko Errota para, discurriendo nuevamente junto al cauce de Infernuko Erreka, encaminarnos hacia la última bifurcación en la que nos desviamos hacia el molino |
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Junto al rústico puente de madera que salva Infernuko Erreka, haciendo caso omiso del sendero que le da acceso, ascendemos por la izquierda |
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Nuestro camino ( izda ) nuevamente nos hace desembocar en la bifurcación en la que anteriormente nos desviamos hacia el molino. Ascendemos por la derecha " retomando " las balizas del sendero SL NA-13 |
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Las balizas del sendero SL NA-13 señalizan el camino tomado |
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El notorio sendero gana altura buscando abandonar la frondosidad del bosque |
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El sendero abandona definitivamente el frondoso bosque para transformarse en un amplio y herboso camino |
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Nuestro camino pierde inclinación para continuar en plácido discurrir |
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El camino amenaza con perder notoriedad entre la frondosa vegetación |
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Las balizas " verdiblancas " continuan señalizando el camino a seguir |
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Nuestro camino recibe uno menos notorio por la izquierda, al cual haremos caso omiso mientras continuamos de frente |
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El herboso camino inicia un cómodo ascenso |
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Nuestro camino alcanza una señalizada bifurcación, lugar en el que una pista atraviesa perpendicularmente. A pesar de que las balizas " verdiblancas " nos " invitan " a continuar por la izquierda nosotros tomaremos hacia la derecha |
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Detalle del indicador enclavado en la bifurcación |
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Bifurcación en la que hemos desembocado por el camino de la derecha. Efectuamos un giro de 180º para continuar por el de la izquierda |
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El camino tomado alcanza de inmediato un nuevo cruce, lugar en el que obviaremos el que nace por la izquierda mientras continuamos al frente |
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No tardamos en alcanzar una nueva bifurcación. Hacemos caso omiso del camino que nace por la izquierda mientras continuamos de frente |
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Bifurcación que hemos alcanzado por el camino de la izquierda y punto en el que abandonamos el que continúa por nuestra izquierda ( derecha en la foto ) |
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Varios caballos " ocupan " mi camino |
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Nuestro camino acentúa paulatinamente su inclinación |
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El camino se torna herboso mientras continúa discurriendo entre pinos |
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Nuestro se adentra bajo un " túnel " de vegetación |
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Entre el frondoso arbolado asoma Lizardiko Borda, caserío deshabitado junto al que pasaremos posteriormente |
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El camino continúa en plácido discurrir |
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A nuestro paso, junto al camino, dejamos una borda sobre cuyo tejado asoma la herbosa cumbre de Altsu |
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El camino continúa discurriendo plácidamente entre castaños y prados mientras que al fondo aparece Lekunberriko Honateko Borda, caserío sobre el que pasaremos en breve. En primer término asoma el tejado de Lekunberriko Harateko Borda |
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Lekunberriko Harateko Borda aparece bajo nuestro camino |
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Nuestro camino gana notoriedad mientras alcanza el cruce desde el que desciende por la derecha el camino que da acceso a Lekunberriko Harateko Borda. Continuamos al frente |
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Desde nuestro camino ( dcha ) nace por la derecha ( izquierda en la foto ) el acceso a Lekunberriko Harateko Borda, el cual obviaremos |
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Nuestro camino es atravesado por una pequeña regata en el punto en el que este inicia un corto ascenso |
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Bajo nuestro camino ya aparece Lekunberriko Honateko Borda |
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Lekunberriko Honateko Borda |
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Verdes y extensos prados rodean Lekunberriko Honateko Borda mientras que al fondo despunta Peña Plata ( centro )
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El camino discurre entre las alambradas que delimitan los prados que vamos dejando a nuestro paso |
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Cruce de caminos. Obviamos el que nace por la izquierda mientras seguimos de frente ( dcha ) |
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Nuevamente el camino se adentra bajo el frondoso arbolado |
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El camino no tarda en dejar a su paso el que, por la derecha, da acceso a Lekunberriko Honateko Borda. Seguimos de frente |
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Nuestro camino ( dcha ) deja a su paso el cruce desde el que nace el que da acceso a Lekunberriko Honateko Borda |
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El camino se ha transformado en una amplia y notoria pista, bajo la que atraviesa una pequeña regata. A la izquierda de la pista la citada regata cae en forma de pequeña " cascada " |
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Pequeña y escondida " cascada " |
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Nuestro camino discurre plácidamente sin apenas inclinación |
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Sobre nuestras cabezas aparece una antigua borda rehabilitada como vivienda |
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El camino rápidamente nos permite dar alcance a la rehabilitada borda, actualmente " coqueta " casita |
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Nuevamente nuestro camino gana notoriedad y da alcance a un cruce, lugar en el que obviaremos el que nace por la izquierda mientras continuamos de frente |
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Mirada atrás hacia el cruce en el que nuestro camino ( izda ) hace caso omiso al que nace por la izquierda ( derecha en la foto ) |
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El camino, Etxalarko bidea, muy notorio en todo momento, continúa en cómodo ascenso |
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Entre el frondoso arbolado asoma tímidamente Burrarteko Borda |
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Burrarteko Borda |
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Nuestro camino no tarda en dejar por la derecha el que da acceso a Burrarteko Borda |
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Atrás queda Burrarteko Borda, caserío que asoma a escasos metros de nuestro camino |
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El camino acentúa tímidamente su pendiente para dejar a su paso otra pequeña borda ( izda ) |
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Desde nuestro camino, Etxalarko bidea, damos vista a Legate ( izda ) y Aizkolegi ( dcha ) |
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Deberemos estar atentos al lugar en el que nuestro camino, Etxalarko bidea, traza una cerrada curva hacia la izquierda, momento en el que lo abandonaremos por la derecha tomando una notoria senda |
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El notorio sendero inicia un tendido descenso
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Lekunberriko Harateko Borda, caserío sobre el que hemos pasado, asoma cercano al frente |
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El sendero se encierra entre los helechos que amenazan con " engullirlo " |
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La senda atraviesa el cauce de una pequeña regata |
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El sendero gana notoriedad al alcanzar el borde de un prado, en cuyo extremo opuesto asoma Lizardiko Borda |
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La senda se transforma en un marcado camino, por el que continuaremos perdiendo altura plácidamente |
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Lizardiko Borda asoma cercano |
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Desembocamos en la pista que da acceso a Lizardiko Borda. Continuaremos por la izquierda |
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En el lugar en el que hemos desembocado, a nuestra derecha un portillo cierra el acceso al cercano y visible Lizardiko Borda |
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Caminamos por la marcada pista en cómodo discurrir |
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No tardaremos en toparnos con un notorio cruce, momento en el que abandonamos la pista para tomar el notorio camino que nace por la derecha |
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El marcado camino pierde altura junto a la alambrada que delimita los extensos y verdes prados que rodean Lizardiko Borda |
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Volvemos a toparnos con un nuevo cruce. Continuamos en descenso por la derecha junto a la alambrada |
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Lizardiko Borda asoma entre el arbolado |
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Descendemos junto a la alambrada " encerrados " bajo un frondoso bosque |
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El camino paulatinamente pierde notoriedad para convertirse en sendero |
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La senda discurre en todo momento muy notoria |
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Caminamos en todo momento bajo la frondosidad del bosque |
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Terminamos desembocando en el camino proveniente de Etxebertzeko Borda, por el que ya discurrimos al comienzo de este itinerario. Continuamos por la izquierda |
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Bifurcación en la que nuestro camino ( dcha ) desemboca en el que, proveniente de Etxebertzeko Borda, da acceso a Infernuko Errota ( izda ) |
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El camino tomado continúa en plácido descenso |
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Al igual que al comienzo de este itinerario volveremos a atravesar el puente que salva el cauce de Beltxeneko Erreka
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El camino ( izda ) discurre junto al cauce de Infernuko Erreka |
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El camino paulatinamente va ganando notoriedad |
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Volvemos a dejar a nuestro paso el puente que salva el cauce de Infernuko Erreka, junto al que ya pasamos al comienzo del itinerario |
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El bosque va tomando colorido otoñal |
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Etxebertzeko Borda asoma cercano |
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Alcanzamos Etxebertzeko Borda |
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Panel informativo en las inmediaciones de Etxebertzeko Borda
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Desde Etxebertzeko Borda, antes de regresar al aparcamiento, nos desviamos unos pocos metros por el camino que continúa hacia Irigoiengo Borda
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Apenas a unos pocos metros de Etxebertzeko Borda, junto al camino que continúa hacia Irigoiengo Borda, podemos visitar los estanques en los que se crían truchas
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Estanques en las inmediaciones de Etxebertzeko Borda |
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De nuevo junto a Etxebertzeko Borda, ahora sí, ascendemos hacia el aparcamiento |
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Frontón y aparcamiento aledaños a Etxebertzeko Borda |
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Etxebertzeko Borda, caserío y uno de los restaurantes más conocidos del Valle de Baztán junto al que ha dado comienzo, y por lo tanto también finaliza, este itinerario |
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