Oteixon ( Desde el Señorío de Bertiz por Otalzu con regreso por Reparacea )

Sobre la vertiente septentrional del Valle de Bertizarana apenas destaca un modesto macizo que, extendiéndose de Oeste a Este, sirve de muga natural entre dicho valle, Sumbilla/Sunbilla, municipio perteneciente al Valle de Malerreka que aparece enclavado bajo su cara Norte, y el Señorío de Bertiz, extenso Parque Natural propiedad del Gobierno de Navarra.

Bertizarana es un pequeño valle de apenas 39 Km²  situado en la vertiente cantábrica de Navarra y enclavado entre el Valle de Malerreka ( W ) y el Valle de Baztán ( E ). Lo conforman los municipios de Legasa, Narvarte/Narbarte y Oyeregui/Oieregi, todos ellos bañados por el Bidasoa, río que cambia su nombre al entrar al valle dejando de llamarse río Baztán. Uno de los principales atractivos del valle es, sin duda, el Señorío de Bertiz, declarado Parque Natural en el año 1984 siguiendo los deseos de sus anteriores propietarios y cuya extensión es de aproximadamente 2040 ha.

De suaves formas y más que discreta altitud, en el macizo de Oteixon apena destacan la cima del monte que le da nombre, es decir, Oteixon ( 684 m ), la cumbre más occidental de esta pequeña “ cordillera “, y Meateko Kaskoa ( 649 m ), situada en el centro de la misma. Ambas “ cotas “ están separadas por el abierto collado de Meate ( 559 m ), estratégico cuello que sirve de “ paso “ entre las dos vertientes del citado macizo.

Desde esta última cumbre de Meateko Kaskoa ( 649 m ), el macizo pierde altura decididamente en dirección Sureste yendo a morir a orillas del río Baztán allá donde cambia su nombre por el de Bidasoa, en el mismo lugar en el que confluyen las localidades de Oronoz-Mugaire, perteneciente al Valle de Baztán, y Oyeregui/Oieregi, perteneciente al Valle de Bertizarana. Es en esta vertiente del macizo en la que destacaríamos la “ pequeña cota “ de Amaburu ( 439 m ), cuya “ piramidal “ silueta se eleva sobre el habitual punto de acceso al anteriormente citado Señorío de Bertiz.

Bajo la vertiente occidental del macizo de Oteixon, separándolo del macizo de Mendaur y encajonado bajo los rocosos paredones del monte Askín/Axkín ( 557 m ), “ corre “ el río Bidasoa camino del Mar Cantábrico discurriendo paralelo a la “ concurrida “ carretera N-121-A y “ bañando “ a su paso varias de las localidades de esta vertiente cantábrica de Navarra.  

Las laderas del macizo aparecen cubiertas de un frondoso arbolado en su parte baja así como en toda la zona “ lindante “ con el Señorío de Bertiz pero en la parte alta, la cada vez menor presencia de ganado ha hecho que las habituales zonas de pasto hayan sido paulatinamente “ colonizadas “ por vegetación de monte bajo, motivo por el que en muchas zonas, dependiendo de la época del año, nuestro caminar pudiera resultar “ no muy cómodo “.  

Desde el punto de vista montañero, el Valle de Bertizarana no cuenta con grandes y “ atrayentes “ cumbres, lo cual no supone excusa para dejar de acercarnos hasta este pequeño y bucólico “ vallecito “ y, aprovechando su “ amable  “ orografía, disfrutar de este “ discreto “ conjunto de cimas que “ conforman “ el macizo de Oteixon.

Son variados los puntos de partida habitualmente empleados para las “ incursiones “ a este macizo. Desde la vertiente septentrional, Sumbilla/Sunbilla ( 108 m ) sería el punto de partida más “ lógico “ mientras que Santesteban/Doneztebe ( 114 m ) o cualquiera de las localidades que conforman el Valle de Bertizarana lo serían desde la vertiente meridional.

En una anterior “ incursión “ por este macizo, la localidad de Oyeregui/Oieregi ( 145 m ) fue el punto de partida tomado para nuestra “ excursión “. Ver: “ Oteixon-Amaburu-MeatekoKaskoa ( Desde Oyeregui/Oieregi ) “.

En esta ocasión tomaremos como punto de inicio para esta cómoda “ mañanera “ el aparcamiento ( 145 m ) que da servicio al Parque Natural del Señorío de Bertiz, desde el que, utilizando una ruta poco habitual, buscaremos alcanzar la cima de Oteixon ( 684 m ), la que da nombre a este “ olvidado “ macizo que aparece enclavado en los límites de uno de los parques naturales más visitados de nuestra tierra. Esta es mi propuesta, espero que la disfrutéis.

 

Señorío de Bertiz

 

El Señorío de Bertiz está situado al noroeste de Navarra, concretamente en el Valle de Bertizarana y cuenta con una extensión de 2040 ha., lindando al norte con Echalar, al este con el Valle de Baztán, al oeste con el término de Cuatro Pueblos y Bertizarana y estando bañado al sur por las aguas del río Baztán, viendo mutar su nombre a río Bidasoa justo a la entrada del Parque. Las primeras noticias del Señorío de Bertiz datan del año 1392 cuando Pedro Miguel Bertiz fue nombrado Merino Mayor de las Montañas por el rey Carlos III, el noble ( 1361-1425 ). El Señorío permaneció en manos de la familia Bertiz hasta el año 1898 en el que fue adquirido por Dorotea Fernández a cuya muerte fue heredado por su marido don Pedro Ciga Mayo, último propietario particular del Señorío. Este a su muerte, allá por el año 1949, legó la finca al Gobierno de Navarra con la condición de conservarla sin variar sus características y siendo utilizada exclusivamente con fines recreativos, educativos y científicos. En 1984 es declarado Parque Natural, existiendo en su interior, hoy en día, un jardín botánico con 126 especies de árboles y plantas de todo el mundo y el cual está situado en la parte baja del Señorío, siendo el resto de la finca una extraordinaria muestra de bosque atlántico. El punto más elevado del Parque Natural está situado en la cumbre de Aizkolegi ( 841 m ), cima coronada por un palacio de estilo modernista que fue mandado construir por don Pedro Ciga y en el que residía los veranos. Cada año visitan el Parque Natural 70000 personas, siendo Oronoz-Mugaire ( 150 m ) el punto habitual de acceso al Parque.

 

Valle de Bertizarana

 

Legasa

 

La población se encuentra distribuida en los dos barrios que forman el pueblo, Santa Leocadia y Cebería. Cabe destacar su iglesia neoclásica erigida en honor a santa Catalina ( S.XIX ) que cuenta con una cruz procesional de plata atribuida al orfebre pamplonés Luis Suescun ( S.XVI ). En el camino de Santesteban/Doneztebe, al lado del barranco Amuna, se encuentra la ermita de Santa Leocadia.

 

  *Fuente: Agrupación Turística Baztán-Bidasoa

 

 

Narvarte/Narbarte

 

Capital de Bertizarana, se levanta en la orilla derecha del Bidasoa. La iglesia erigida en honor a San Andrés está construida en piedra rojiza arenisca del país, tiene planta de cruz latina y cubierta con bóveda de cañón. Un puentee de tres arcos de piedra rebajados se levanta sobre el Bidasoa. En Narvarte/Narbarte también destacan los escudos en numerosas edificaciones y la existencia de alguna casa palaciana del S.XVIII con interesantes ventanas en ángulo. Resalta la casa Lakoizketa, un edificio rural que posee un arco en la entrada.

 

  *Fuente: Agrupación Turística Baztán-Bidasoa

 

 

Oyeregui/Oieregi

 

Situado en la orilla izquierda del Bidasoa y desde el que se accede, una vez atravesado el puente que comunica con Oronoz, al señorío de Bertiz. Casi todas sus casas lucen en sus fachadas el escudo del Valle, que representa una sirena con cabellos colgantes y los brazos levantados en los cuales tiene un peine y un espejo. En esta localidad se puede visitar la iglesia erigida en honor a San Juan Bautista. De origen gótico, tiene un retablo mayor formado por esculturas y relieves romanistas. Se accede al interior a través de un gran atrio. Lo más sobresaliente de la población es el Palacio de Reparacea, de origen medieval y que fue rehabilitado en el S.XVIII. Su fachada, típica de la zona del Bidasoa, tiene balcones corridos y torres a los lados. El edificio consta de tres alturas y se accede por un enorme portal. Muy próximo se alza el Puente románico de Reparacea.

 

  *Fuente: Agrupación Turística Baztán-Bidasoa

 

Resumen del Itinerario

 

Esta ruta da comienzo en el aparcamiento situado a la entrada del Parque Natural del Señorío de Bertiz ( 137 m ), desde el que tomaremos un pequeño sendero que da acceso al carretil asfaltado que alcanza el portillo que nos permite entrar al interior del citado Parque.

Atravesado el mencionado portillo continuaremos por la derecha ( NE ) tomando una estrecha carreterita asfaltada que de inmediato deja, también por la derecha ( SE ), el acceso a un bello jardín botánico.

Continuamos de frente ( NE ) para, de inmediato y nada más dejar a nuestro paso un panel informativo, abandonar el asfalto por nuestra izquierda ( N ) tomando un marcado camino. Este a los pocos metros se bifurca, momento en el que obviaremos el sendero que nace por la derecha ( NE ) mientras remontamos de frente ( N ) en brutal ascenso por una “ empinada “ pista.

Paulatinamente la citada pista pierde inclinación para desembocar en un cruce, lugar en el que destaca un “ castañero “, construcción de piedra desde la que continuaremos hacia la izquierda ( NW ).

Nuestro camino serpentea, ya sin apenas inclinación, bajo un frondoso bosque de hayas mientras atraviesa a su paso varias regatas. En breve alcanzaremos un discreto cruce, lugar en el que haremos caso omiso del camino que desciende por la derecha ( E ) mientras seguimos al frente ( NE ).

Deberemos estar atentos al punto en el que nuestro camino traza una cerrada curva hacia la izquierda ( NW ), lugar en el que un hito colocado bajo un haya señaliza el sendero que nace por la izquierda ( W ).

Ganamos altura bajo un frondoso hayedo buscando desembocar en el collado de Otalzu ( 379 m ), “ cuello “  en el que abandonamos el Señorío de Bertiz. En época estival los helechos cubren lo que antaño fueron prados.

Buscamos alcanzar el antiguo camino, Bertizeko bidea, que da acceso a este bucólico paraje, lugar en el que destaca Otalzuko Borda, viejo caserío que actualmente aparece en ruinoso estado. Dejando este a nuestro paso, continuamos por Meateko bidea, marcado camino que nos permitirá desembocar en el collado del mismo nombre, Meateko lepoa ( 559 m ).

Un estrecho sendero, tras dejar a su paso un bunker, gana altura yendo a discurrir bajo la escabrosa vertiente oriental de Oteixon ( 684 m ) hasta alcanzar su tendida ladera SE., por la que, en “ cómodo “ ascenso, alcanzaremos su cima.

Iniciamos nuestro descenso por la vertiente opuesta a la de subida en busca de Arrondoko lepoa ( 615 m ), paraje en el que tomaremos el camino que paulatinamente irá perdiendo altura en dirección Sur.

Tras dejar a nuestro paso una borda ( 516 m ) el camino se bifurca nuevamente, punto en el que continuaremos por la izquierda ( N ) mientras buscamos discurrir bajo la vertiente meridional de la cima visitada, encaminándonos de nuevo hacia Meateko lepoa ( 559 m ). Sin llegar a alcanzar este, a la altura de una pequeña borda en ruinas ( 552 m ), descenderemos hacia la derecha ( SE ) por Etxarkiko bidea, notorio sendero que nos permitirá desembocar en una amplia pista.

Continuamos por la derecha ( S ) aunque la abandonaremos de inmediato por la izquierda ( E ) tomando Gorritiko bidea, camino que desciende hacia el valle. Alcanzaremos este a las afueras de Narvarte/Narbarte ( 148 m ).

Un camino cementado nos permitirá alcanzar por la izquierda ( E ) la Casa Albinea ( 146 m ) y desde esta el carretil asfaltado que, también por la izquierda ( NE ), da acceso al Señorío de Bertiz.

Antes de adentrarnos en el Señorío nos desviaremos momentáneamente hacia la derecha ( SE ) para atravesar el Puente de Reparacea y visitar el Palacio del mismo nombre ( S.XVIII ).

Tras corta visita retornamos al portillo que da acceso al Señorío de Bertiz, en el que se dibuja el marcado camino que nos devolverá al punto de partida.     

       

Datos del Itinerario

 

Desnivel: 584 m

Tiempo: De 3 h a 5 h

Distancia: 11´86 km

Inicio: Aparcamiento Señorío de Bertiz ( Navarra )

Fecha de realización: Track Agosto 2023. Fotos Septiembre 2023

Epoca recomendada: Todo el año 

Cimas: Oteixon ( 684 m )   

 

Descripción del Itinerario

 

Comenzamos a caminar en el amplio aparcamiento ( 137 m ) situado a la entrada del Parque Natural del Señorío de Bertiz. En el extremo opuesto al punto desde el que accedimos al citado parking nace un señalizado sendero cementado que alcanza el vial asfaltado que, por la izquierda ( NW ), alcanza en breve y tras dejar a su paso la caseta de información, el portillo que da acceso al interior del Parque.

Atravesamos el citado portillo para hacer caso omiso de Balangondoko Basabidea, camino que nace por la izquierda ( SW ) en dirección al paraje de Reparacea y por el que posteriormente regresaremos.

Continuamos por la carreterita asfaltada que, por la derecha ( NE ), discurre paralela a la verja que cierra el bello jardín botánico situado también a nuestra derecha ( S ), no tardando en dar alcance a una bifurcación. Un poste indicador señaliza el desvío que, por la derecha ( W ), da acceso al citado jardín botánico, opción que obviaremos para continuar al frente ( NW ).

Seguimos por el vial asfaltado que poco más adelante deja a su paso un panel informativo sobre las “ Flora exótica invasora en Bertiz “. Apenas habremos dejado atrás este panel cuando abandonaremos el asfalto por la izquierda ( N ) tomando un marcado sendero. Este se adentra en el hayedo para bifurcarse de inmediato, momento en el que obviaremos el sendero que nace por la derecha ( NE ) mientras remontamos de frente ( N ).

Ganamos altura en brutal ascenso por un “ empinado “ camino, el cual no tardará en perder inclinación mientras que da alcance a un claro abierto en el frondoso bosque.

Discurrimos sin apenas pendiente  y no tardamos en toparnos con un nuevo cruce, lugar en el que un camino nos atraviesa perpendicularmente y punto en el que destaca un “ castañero “, construcción circular de piedra junto a la que aparece un panel informativo y un poste indicador. Continuamos por la izquierda ( NW ).

Nuestro camino, ya sin apenas inclinación, atraviesa un pequeño riachuelo para penetrar bajo un frondoso bosque de hayas, donde pasa a convertirse en notorio sendero.

Salvamos algunas pequeñas regatas y no tardamos en “ tropezar “ con una discreta bifurcación, en la que haremos caso omiso del sendero que desciende por la derecha ( E ) mientras continuamos de frente ( N ). Nada más dejar atrás el cruce nos topamos con un poste indicador que señaliza el camino a seguir y los diferentes “ itinerarios “ que podemos realizar.

Caminamos en todo momento por un notorio sendero aunque deberemos estar atentos al punto en el que este traza una cerrada curva hacia la izquierda ( NW ), lugar en el que lo abandonaremos para tomar el camino que, señalizado con un visible hito, nace también por la izquierda ( W ).

Nos abrimos paso entre la frondosidad del hayedo mientras el camino tomado acentúa notablemente su inclinación. Esporádicos hitos señalizan el difuso sendero que amenaza con desaparecer en algunos tramos.

El camino gana notoriedad paulatinamente para girar hacia la izquierda ( S ) mientras pierde inclinación buscando desembocar en el collado de Otalzu u Otaltzuko Balangoa ( 379 m ). Un “ paso “ en la alambrada nos permitirá salvarla para posteriormente atravesar los restos de la antigua “ puerta “ de entrada, o salida, al Señorío de Bertiz. Lo abandonamos.

Salimos a terreno despejado, lugar en el que, en época estival deberemos atravesar entre los helechos que cubren lo que antaño fueron prados.

Tras un corto discurrir entre los citados helechos decido abandonar los antiguos prados por la derecha ( N ) para buscar el antiguo camino, Bertizeko bidea, que da acceso a este bucólico paraje, lugar en el que destaca Otalzuko Borda, viejo caserío que actualmente aparece en ruinoso estado.

El citado Bertizeko bidea, camino muy notorio que discurre entre muros de piedra, en la actualidad también ha sido “ engullido “ por la vegetación, por lo que, en lugar de tomarlo, “ recomiendo “ continuar por el interior de los antiguos prados.

En nuestro caso, al tomar el mencionado camino, buscaremos dejar a nuestro paso el citado caserío de Otalzuko Borda y posteriormente alguna borda de ganado que, al igual que la vieja casona, aparece en estado de ruina.

Bertizeko bidea paulatinamente se va “ limpiando “ para, de manera “ cómoda “, dar alcance a un cruce, lugar en el que recibimos por la izquierda ( S ) el camino proveniente de Narvarte/Narbarte ( 148 m ), concretamente desde la casa Albinea ( 146 m ), por la que pasaremos posteriormente a nuestro regreso.

Obviando este camino, continuaremos de frente ( W ) para, a escasos metros, toparnos con una discreta bifurcación, en la que haremos caso omiso de la senda que nace por la izquierda ( SW ) mientras volvemos a optar por continuar al frente ( W ).

Nuestro camino, Meateko bidea, gana notoriedad mientras aparece balizado con marcas de pintura amarillas y blancas de la “ vieja “ PR-NA 106, prácticamente “ borradas “ por el paso del tiempo.

En tendido ascenso el camino alcanza otra vieja y ruinosa borda, junto a la que volveremos a hacer caso omiso del sendero que nace por la izquierda ( W ) mientras continuamos remontando de frente ( NW ).

No tardamos en desembocar en una amplia pista que atraviesa perpendicularmente, lugar en el que destaca una gran balsa ( 489 m ) que almacena agua para la lucha contra incendios.

Tomamos la citada pista por la derecha ( E ) y por esta alcanzaremos en “ plácido “ ascenso el collado de Meate o Meateko lepoa ( 559 m ). Un poste indicador y un mugarri lo señalizan. En este lugar confluyen las tierras de Bertizarana con las de Sumbilla/Sunbilla. Encontramos varios restos megalíticos en el entorno.

Atravesamos el citado collado de Meate ( 559 m ) para continuar en la misma dirección ( SW ) por encima del pequeño grupo de árboles bajo los que asoma Xuxeneko Borda, en ruinas.

Si el helecho lo permite, deberemos encaminarnos, siguiendo una no muy apreciable senda, en dirección a un viejo bunker. Por encima de este, el sendero gana altura pareciendo encaminarse hacia los “ paredones “ que defienden la vertiente oriental de Oteixon ( 685 m ) aunque posteriormente cambia de dirección para discurrir “ paralelo “ a estos mientras gana notoriedad paulatinamente en busca de la zona en la que la rocosa cresta nos permite alcanzarla.

Una vez en esta, el sendero, balizado en algunos tramos con hitos de piedras, nos facilita un cómodo ascenso hacia la cima de Oteixon ( 684 m ), cumbre que alcanzaremos sin dificultad reseñable. Oteixon u Oteitzoiana ( 684 m ), un vértice geodésico y un buzón montañero la señalizan. Abierta y bella panorámica.

Por terreno herboso descendemos por la ladera opuesta a la de subida, en la que se dibuja una discreta senda que alcanza de inmediato otra ruinosa borda. La dejamos atrás para “ sortear “ un corto tramo de transitar entre rocas, yendo a descender hacia Arrondoko lepoa ( 616 m ), paraje en el que atraviesa un camino perpendicularmente.

Tomaremos este por nuestra izquierda ( S ) para perder altura paulatinamente paralelo a los restos de una vieja alambrada. A nuestra izquierda ( E ) queda un frondoso pinar y metros más abajo, a la derecha ( W ), un pequeño grupo de hayas bajo las que destaca una borda.

El camino continúa perdiendo altura y en breve alcanza una marcada bifurcación, lugar en el que haremos caso omiso del más herboso que desciende de frente ( E ) mientras continuamos por la pista que sigue por la izquierda ( NE ) penetrando en un pinar.

Dejando a nuestro paso una renovada borda enclavada a las “ afueras “ del citado pinar, no tardaremos en abandonar este para continuar caminando por la amplia y notoria pista. Apenas habremos dejado atrás la mencionada borda, y metros más adelante una pequeña muga enclavada a la orilla de la pista ( E ), cuando la abandonaremos para tomar la marcada senda que nace por la derecha ( NE ).

Dicha senda viene a ser un “ alcorce “ que, evitando la pista y tras dejar a su paso un abrevadero para el ganado, vuelve a desembocar en esta. La atravesamos para continuar al frente ( E ), topándonos de inmediato con un nuevo “ mugarri “.

Haciendo caso omiso del sendero que nace por nuestra derecha ( SE ), continuaremos de frente ( E ) por el amplio camino que da acceso a unas bordas enclavadas bajo un pequeño bosquete. A partir de estas el camino pasa a ser sendero, el cual atraviesa entre helechos mientras discurre bajo la vertiente SE. de Oteixon ( 684 m ) dando alcance a otra borda en estado ruinoso.

Paulatinamente la senda buscará encaminarse hacia el collado de Meate o Meateko lepoa ( 559 m ) aunque, sin llegar a alcanzarlo y teniendo como referencia otra pequeña borda en ruinas, será junto a esta donde la abandonaremos por la derecha ( SE ) tomando Etxarkiko bidea.

El estrecho pero notorio sendero desciende en acusada pendiente “ encerrado “ entre helechos y, a la altura de un redil para el ganado, desemboca rápidamente en la amplia pista que atraviesa perpendicularmente.

Continuamos por esta hacia la derecha ( S ) aunque de inmediato la abandonaremos nuevamente por la izquierda ( SE ) tomando Gorritiko bidea, amplio y notorio camino que discurre en principio por terreno despejado aunque no tarda en adentrarse bajo la frondosidad del bosque.

La pendiente se acentúa notablemente, lo que nos permitirá alcanzar en breve y tras acusado descenso, una granja enclavada a las afueras de Narvarte/Narbarte ( 148 m ). Un poste indicador señaliza la encrucijada de caminos con la que nos toparemos.

Continuamos hacia la izquierda ( E ) por Arribillaga bidea, vial cementado que da acceso a la casa Albinea ( 146 m ), cuidado caserío junto al que nuestro camino efectúa un giro de 90º para descender por la derecha ( SE ) por vial asfaltado.

De inmediato, y a la altura de una cuidada área de esparcimiento, desembocaremos en el Camino Real, carreterita asfaltada que atraviesa perpendicularmente. Una fuente además de mesas y bancos de piedra destacan en el lugar.

Continuamos por nuestra izquierda ( NE ) dejando a nuestro paso una bella y restaurada calera para, en plácido caminar, seguir por el estrecho carretil asfaltado que da acceso primeramente a la casa Aitzateberea y posteriormente a la casa Aitzategorea, en cuya fachada destaca un escudo de piedra en el que llama la atención la imagen de una sirena con un espejo y un peine en cada mano, típica en los escudos del Valle de Bertizarana. Frente a la mencionada casa y a la orilla del camino, destaca una cruz de piedra.

Tan solamente unos metros más adelante daremos alcance a una vivienda de reciente construcción, la que dejaremos a nuestro paso mientras continuamos de frente ( E ).

No tardamos en “ tropezar “ con el portillo que da acceso al Señorío de Bertiz aunque, antes de adentrarnos en este, nos desviaremos por la derecha ( SE ) para atravesar el Puente de Reparecea, bajo el que discurre el río Bidasoa y que da acceso al concejo de Oyeregui/Oieregi ( m ), entre cuyo casco urbano llamará nuestra atención el Palacio de Reparacea ( S. XVIII ).

Tras corta visita volveremos a cruzar el citado Puente de Reparecea para, ahora sí, entrar al Señorío de Bertiz por Balangondoko Basabidea, marcado camino que nos devolverá al punto de partida, el portillo que atravesamos al comienzo del itinerario y que da acceso al aparcamiento que da servicio al Parque Natural del Señorío de Bertiz.

Track del Itinerario

Fotos del Itinerario

Aparcamiento del Parque Natural Señorío de Bertiz, inicio de este itinerario y lugar donde podremos estacionar nuestro vehículo

Desde el aparcamiento del Parque Natural Señorío de Bertiz nace un estrecho sendero que, perfectamente señalizado, deberemos tomar

Un amplio prado se extiende junto al aparcamiento en el que hemos estacionado nuestro vehículo. La casa Etxeberria asoma al fondo

El sendero que nace en el aparcamiento alcanza el carretil asfaltado que, por la izquierda, da acceso al Parque Natural del Señorío de Bertiz

De inmediato dejaremos a nuestro paso la caseta de información situada a la entrada del Parque Natural del Señorío de Bertiz

A la entrada al Parque encontramos, junto a la casa Etxeberria, un " merendero "

Entrada al Parque Natural del Señorío de Bertiz. Pasado el portillo continuaremos por la derecha

Panel informativo enclavado a la entrada del Señorío de Bertiz

Pasado el portillo de entrada al Parque, por la izquierda nace Balangondoko Basabidea, camino que accede al paraje de Reparacea y por el que posteriormente regresaremos

Panel informativo enclavado a la entrada del Señorío de Bertiz

Desde el portillo de entrada al Parque Natural del Señorío de Bertiz tomaremos la carreterita asfaltada que nace por la derecha

De inmediato la carreterita se bifurca. Dejamos la que por la derecha accede al Jardín Botánico y continuamos de frente ( izda )

Poste indicador en la bifurcación

A los pocos metros damos alcance a un panel informativo situado a la orilla de nuestro camino

Detalle del panel informativo sobre la " Flora exótica invasora en Bertiz "

Nada más dejar atrás el panel informativo, tras este nace un notorio sendero por la izquierda. Abandonamos el asfalto y lo tomamos

El sendero tomado se adentra entre las hayas

De inmediato el sendero que acabamos de tomar se bifurca. Continuamos por la izquierda

La senda se transforma en un amplio camino, el cual inicia un acusado ascenso

No tardamos en alcanzar un " claro " en el bosque, momento en el que nuestro camino pierde inclinación

En breve alcanzaremos una " plantación ", lugar en el que, por la derecha , asciende otro camino 

Bifurcación, lugar en el que recibimos por la derecha el camino obviado en la bifurcación que hemos dejado atrás al tomar el sendero por el que hemos ascendido. Un poste indicador ( centro ) destaca en el lugar. Continuamos por la izquierda

Detalle del poste indicador que señaliza los tres caminos que se pueden recorrer en el Señorío de Bertiz 

Bifurcación en la que nuestro camino ( dcha ) recibe por la derecha ( izquierda en la foto ) otro que asciende desde la bifurcación dejada atrás al adentranos en el hayedo 

A la orilla del camino dejamos a nuestro paso un " castañero " ( dcha ) y poco más adelante un panel informativo ( izda )

Castañero

Castañero

Dejamos atrás el viejo castañero para continuar por el amplio y notorio camino que deja a su paso un panel informativo

Detalle del panel informativo enclavado a la orilla de nuestro camino

Continuaremos ascendiendo por un ya más amplio y notorio camino, bajo el que se extiende la " plantación "

El sendero se adentra en el hayedo de nuevo

La senda atraviesa un frondoso y sombrío tramo de bosque 

En breve atravesaremos un pequeño claro en el bosque

Una pequeña regata atraviesa nuestro camino

El sendero discurre notorio bajo el frondoso hayedo

Discurrimos en todo momento por un notorio camino

La senda " serpentea " entre las hayas

Un árbol aparece caído atravesando nuestro camino. Pasamos bajo este

Nuestro camino, convertido en sendero en algunos tramos, aparece muy embarrado. Bornalegiko Erreka desciende por nuestra derecha

Atravesamos Bornalegiko Erreka

Tras atravesar Bornalegiko Erreka nuestro camino se bifurca. Por la derecha desciende un camino, no muy notorio, al que haremos caso omiso. Un poste indicador nos invita a continuar por el camino de la izquierda

Detalle del poste indicador que dejaremos a nuestro paso junto al camino

Un viejo tronco queda a la orilla de nuestro camino

Otro viejo tronco queda a nuestro paso

El camino inicia un paulatino ascenso mientras discurre en todo momento bajo un frondoso hayedo

En el punto en el que nuestro camino traza una marcada curva hacia la izquierda, bajo un haya llamará nuestra atención un hito ( izda ). En este punto abandonaremos el marcado camino para tomar la senda que nace por la izquierda

El hito señaliza un notorio sendero 

La senda amenaza con perder notoriedad adentrándose bajo un frondoso y jóven hayedo

Conforme ganamos altura el sendero gana notoriedad

Paulatinamente el camino va ganando inclinación

En algunos tramos el camino se transforma en un difuso sendero

Esporádicos hitos balizan el camino

El camino se torna más ancho y traza una cerrada curva hacia la izquierda

Paulatinamente nuestro camino pierde inclinación

Caminamos en todo momento bajo un frondoso hayedo

Vuelven a aparecer más hitos ( izda )

El camino se abre paso entre las hayas

Algunos troncos caídos sobre el camino amenazan con " cerrarnos " el paso

En esporádicos tramos la vegetación amenaza con " engullir " el camino

El camino no tarda en volver a ganar notoriedad

A la derecha del camino queda a nuestro paso un pequeño manantial

Manantial

Ganamos altura " cómodamente " mientras que nos adentramos en un entorno más frondoso 

El camino atraviesa bajo un " túnel " de vegetación

Alcanzamos el collado de Otalzu, lugar en el que nuestro camino se difumina  

Algunos hitos señalizan la difusa senda

El sendero se adentra entre matorral

Alcanzamos la " puerta " de entrada o salida del Señorío de Bertiz. Una alambrada lo delimita y un " paso " nos permite salvarla con " comodidad "

Muro de piedra que delimita el Señorío de Bertiz

Grandes losas delimitan el Señorío de Bertiz

Una vez en el exterior del Señorío de Bertiz nos adentraremos entre los helechos que, en época estival, cubren lo que antaño fueron prados, en la actualidad practicamente desaparecidos  

Todavía se aprecian algunos tramos de prado mientras que al fondo asoma entre el arbolado Otalzuko Borda ( izda ). Por la derecha buscaremos alcanzar el viejo camino que da acceso al lugar y que actualmente está bastante " cerrado ", es por eso que " recomiendo " continuar por el interior del prado ( izda )

Otalzuko Borda asoma entre la frondosa vegetación que lo " envuelve "

Alcanzamos el viejo muro de piedra que delimitaba los prados aledaños a Otalzuko Borda

Algunos tramos del viejo muro de piedra aparecen " caídos ", eso nos permitirá alcanzar el camino que discurre por el exterior y continuar por este hacia la izquierda  

El viejo camino, Bertizeko bidea, es amplio y notorio 

Los viejos muros de piedra que delimitan Betizeko bidea aparecen " atravesados " por la vegetación " jóven " que se está " adueñando " del lugar

Alcanzamos Otalzuko Borda, actualmente en ruinoso estado

El camino deja a su paso Otalzuko Borda

Estancias aledañas a Otalzuko Borda, en ruinoso estado

Bertizeko bidea se " encajona " entre la fachada lateral de Otalzuko Borda ( izda ) y los muros que lo delimitan ( dcha )

En la actualidad resulta " incómodo " discurrir por Bertizeko bidea

Desde Bertizeko bidea, cuando la vegetación nos lo permite, damos vista a los tramos de prado por los que hubiera sido más " cómodo " discurrir, sobre los que despunta Amaburu ( centro ) 

A nuestro paso, junto a Bertizeko bidea, dejaremos una vieja borda, también en ruinoso estado

Borda en ruinas

Bertizeko bidea pierde notoriedad y se transforma en un marcado sendero

Dejamos atrás la ruinosa borda

El sendero busca alcanzar un camino más notorio que vemos asomar al fondo

En breve desembocamos en el marcado camino que asciende por nuestra izquierda. Continuaremos de frente

Un marcado camino asciende por nuestra izquierda ( centro en la foto ) " encajonado " entre los viejos muros de piedra que delimitan lo que antaño fueron prados

Nuestro camino, Meateko bidea, discurre paralelo a un viejo muro de piedra ( izda )

No tardamos en toparnos con un cruce, lugar en el que obviaremos el sendero que nace por la izquierda mientras continuamos de frente ( dcha )

Meateko bidea aparece balizado con las marcas amarillas y blancas de un viejo " PR ". Es el PR-NA 106 

Con Oteixon ( centro ) asomando al fondo, nuestro camino gana altura paulatinamente

Abartán ( izda ), Saioa, Gartzaga ( centro ) y Azkenatz asoman en el horizonte mientras que en el valle asoman alguno de los dispersos caseríos de Narvarte/Narbarte

El camino parece perder notoriedad paulatinamente  

Nuestro camino, Meateko bidea, se va tornando herboso

En época estival los helechos lo cubren todo y amenazan con " engullir " el camino

En esporádicos tramos el camino aparece " enpedrado "

Entre la frondosidad del entorno damos vista a Oteixon ( centro )

Meateko bidea remonta en plácido ascenso

Nuestro camino parece ganar notoriedad nuevamente

El camino, ya sin apenas pendiente, atraviesa esporádicos claros 

A la altura de una ruinosa borda nuestro camino se bifurca. Hacemos caso omiso del sendero que nace por la izquierda mientras continuamos de frente ( dcha )

Meateko bidea, amplio y herboso, deja a su paso la ruinosa borda

El camino inicia un tendido ascenso

Sobre nuestro camino vemos asomar Meateko lepoa, fácil de identificar por el pequeño grupo de hayas ( centro ) que en este destaca  

Desembocamos en una amplia pista que atraviesa perpendicularmente, lugar en el que destaca una balsa en la que se " almacena " agua para la extinción de incendios. Continuaremos por la derecha

La balsa en la que se " almacena " agua para la extinción de incendios cuenta con abrevadero aledaño. Un notorio sendero asciende por la izquierda hacia Meateko lepoa aunque en época estival aparece bastante " cerrado ", es por eso que lo obviaremos

Indicador que señaliza la balsa

Desde nuestro camino ( dcha ), y una vez alcanzada la pista, continuaremos por la derecha ( centro en la foto )

Nuestro camino traza una cerrada curva de 180º mientras remonta en dirección a Meateko lepoa ( centro ), sobre el que despunta Oteixon ( izda )

Con Oteixon ( izda ) despuntando cercano, nuestro camino gana altura en suave ascenso para alcanzar rápidamente Meateko lepoa

Alcanzamos Meateko Lepoa

Desde Meateko lepoa echamos una mirada atrás hacia Peña de Alba ( izda ), Abartán ( centro ) y Saioa ( dcha )

Borda en ruinas en Meateko lepoa

Meateko lepoa, cuello en el que nuestro camino se bifurca y punto en el que haremos caso omiso del que nace por la izquierda mientras seguimos de frente ( dcha )

El camino que hemos obviado da acceso al grupo de hayas que asoma cercano para, desde este, continuar por la izquierda hacia la loma que se desprende desde la cima de Oteixon ( dcha ) 

Sobre el camino por el que hemos accedido a Meateko lepoa despunta Meateko Kaskoa o Mallurketa ( centro ), cima que hoy obviaremos

A la orilla del camino por el que atravesamos Meateko lepoa destacan un poste indicador y una muga  

Detalle del poste indicador enclavado en Meateko lepoa

Una de las mugas que señaliza el " limite " entre Sumbilla/Sunbilla y el Valle de Bertizarana aparece enclavada a la orilla del camino que atraviesa Meateko lepoa, sobre el que despunta Oteixon

Muga que señaliza los " limites " entre Sumbilla/Sunbilla y el Valle de Bertizarana

El camino que atraviesa Meateko lepoa busca descender hacia la vertiente de Sunbilla/Sumbilla, momento en el que lo abandonaremos por la izquierda 

Una, en su inicio, difusa senda se dibuja entre los helechos mientras se encamina hacia Oteixon

Conforme avanzamos por el sendero, este va ganando notoriedad

A nuestro paso dejaremos un bunker

La senda, sobre la que asoma Oteixon, amenaza con ser " engullida " por los helechos 

El vértice geodésico " delata " la ubicación de la cima de Oteixon 

Conforme ascendemos hacia Oteixon echaremos una mirada atrás hacia Meateko lepoa, cuello sobre el que despunta Meateko Kaskoa ( centro ). Tras este asoman Aizkolegi ( izda ) y Auza ( dcha )

La senda se abre paso entre los helechos mientras busca encaminarse hacia la loma que se desprende bajo la vertiente SE. de Oteixon 

La senda discurre notoria y en suave ascenso camino de la loma que asoma al fondo

Caminamos bajo la escabrosa ladera oriental de Oteixon

Conforme nos acercamos a la loma nuestra senda acentúa ligeramente su inclinación

El sendero termina desembocando en la parte alta de la loma 

Al dar alcance a la parte alta de la loma vemos como una marcada senda atraviesa perpendicularmente. Continuamos por esta hacia la derecha

El sendero en el que hemos desembocado, en su inicio, remonta junto al borde de la loma

A nuestro paso dejaremos algunos hitos ( izda )

La senda, muy notoria en todo momento, acentúa paulatinamente su inclinación 

Conforme ascendemos hacia Oteixon, a nuestra espalda asoman Legate ( izda ), Larrazu, Auza ( centro ) y Peña de Alba ( dcha )

Los hitos balizan la senda a seguir, desde la que damos vista a Mendaur ( dcha )

Legasa asoma a nuestros pies

La senda remonta escrupulosamente balizada con hitos ( centro )

Conforme ganamos altura nuestro sendero se hace más notorio

Paulatinamente la senda se torna más herbosa mientras que al fondo asoma el vértice geodésico que señaliza la cima de Oteixon

Últimos metros hacia la cima de Oteixon

Salida a la cima de Oteixon

Vértice geodésico en la cima de Oteixon con vista a Mendaur ( izda ) y Peñas de Aia ( dcha )

Desde la cima de Oteixon damos vista a Meateko lepoa, collado desde el que hemos ascendido y sobre el que destaca Meateko Kaskoa o Mallurketa ( izda ). Oronoz-Mugaire ( dcha ) asoma en el valle

Desde la cima de Oteixon, bajo Mendaur ( izda ), asoma Sumbilla/Sunbilla en el valle

Buzón montañero enclavado en la cima de Oteixon

Sumbilla/Sunbilla

Desde la cima de Oteixon divisamos Oronoz-Mugaire ( centro ), localidad sobre la que despuntan Auza ( izda ), Peña de Alba ( centro ) y Abartán ( dcha )

Oronoz-Mugaire

Abandonamos la cima de Oteixon, desde la que divisamos Aizkolegi ( izda ), Alkurrunz, Legate ( centro ), Larrazu y Auza ( dcha )

Desde la cima de Oteixon descenderemos en dirección opuesta a la de ascenso dando vista a Ituren ( centro ), localidad sobre la que despunta Mendaur ( dcha )

Ituren

Dejamos rápidamente atrás la cima de Oteixon

Perdemos altura por una herbosa y notoria senda mientras que Mendaur ( centro ) despunta al frente

Conforme vamos descendiendo el sendero va ganando notoriedad

La senda se dibuja en la parte alta de la loma que se desprende bajo la vertiente SW. de Oteixon

A nuestro paso, junto al camino, dejaremos una ruinosa borda enclavada en el paraje de Arrondoko Harmalak

Borda en ruinas que aparece enclavada a la orilla de nuestro camino

El sendero amenaza con difuminarse entre los helechos mientras discurre junto a los restos de una vieja alambrada

La senda se torna pedregosa mientras atraviesa entre rocas

El sendero, una vez salvado el tramo rocoso, vuelve a ganar notoriedad mientras continúa descendiendo hacia el herboso " colladito " ( centro ) que se abre en primer término. Es Arrondoko lepoa

Alcanzamos de inmediato Arrondoko lepoa 

Por Arrondoko lepoa atraviesa perpendicularmente un camino más notorio. Continuamos por la izquierda

El camino tomado en Arrondoko lepoa pierde altura en acusada pendiente mientras se abre paso entre los helechos. Al fondo asoma Gaztelu ( dcha )  

Gaztelu

El notorio camino alcanza un pinar y continúa perdiendo altura junto a este

El marcado camino atraviesa entre un pinar ( izda ) y un grupo de hayas bajo el que aparece enclavada una borda. Estamos en el paraje de Larrezabal

Los caballos pastan plácidamente

Borda en el paraje de Larrezabal

El amplio camino continúa su descenso mientras deja a su paso algunas mugas 

Muga enclavada a la orilla de nuestro camino

El amplio y herboso camino busca transformarse en pista

Cruce, lugar en el que obviaremos el camino que continúa al frente mientras tomamos la pista que tuerce hacia la izquierda

La pista se adentra en el pinar

Dando vista a una borda enclavada en un claro del bosque de pinos, buscaremos abandonar este

Renovada borda que queda a nuestro paso junto al camino

La pista abandona el pinar

Metros antes de dar alcance a una bifurcación, dejaremos a nuestro paso una nueva muga ( dcha )

Detalle de la muga enclavada junto a nuestro camino

Alcanzada la bifurcación, abandonamos la pista para tomar el sendero que nace por la derecha

El sendero tomado viene a ser un " alcorce " que busca alcanzar nuevamente la pista que vemos atravesar al fondo 

El sendero discurre muy notorio

Alcanzamos un abrevadero para el ganado, lugar en el que destaca una " nueva " muga 

Detalle de la " nueva " muga que dejaremos a nuestro paso junto al sendero

Abrevadero

No tardamos en alcanzar la pista que atraviesa perpendicularmente, la que cruzaremos para continuar al frente

A la orilla de la pista tomada destaca otra " nueva " muga, junto a la que nace un sendero ( dcha ) que obviaremos. Seguimos al frente 

Desde nuestro camino damos vista a Gaztelu ( izda ), Igurin y Arce, barrios de Donamaria ( centro ), y Oiz ( dcha )

Gaztelu

Arce, barrio de Donamaría ( izda ),  y Oiz ( dcha )

El camino tomado da acceso a unas bordas, además de continuar por la izquierda

En suave descenso nuestro camino atraviesa entre el arbolado

El camino pasa a convertirse en senda mientras busca alcanzar el pequeño bosquete que vemos asomar al fondo

El sendero se dibuja muy notorio en la ladera

Narvarte/Narbarte asoma en el valle bajo Abartán ( izda ), Saioa ( centro ) y Gartzaga ( dcha )

Narvarte/Narbarte

El sendero busca dar acceso a una borda enclavada bajo un pequeño grupo de árboles

Narvarte/Narbarte vuelve a aparecer en el fondo del Valle de Bertizarana

Narvarte/Narbarte

Narvarte/Narbarte

La senda busca abandonar el pequeño bosquete

Al salir del bosque nuestro sendero se " encajona " entre helechos nuevamente

La senda gana notoriedad mientras en el horizonte despunta Auza ( dcha ) 

A nuestros pies se extiende Narvarte/Narbarte ( dcha ), Oyeregui/Oieregi ( centro ) y Oronoz-Mugaire ( izda )

Oyeregui/Oieregi ( dcha ) y Oronoz-Mugaire ( izda )

Sobre la marcada senda por la que caminamos asoma Meateko Kaskoa o Mallurketa ( centro )

Desde nuestro camino damos vista a la pista que pretendemos alcanzar, junto a la que destaca un redil para el ganado. En breve descenderemos hacia este. En el valle asoman Oyeregui/Oieregi ( dcha ) y Oronoz-Mugaire bajo la arbolada cumbre de Amaburu ( centro ), tras la que despuntan Legate ( izda ) y Auza ( centro )

Redil para el ganado hacia el que descenderemos en breve

La notoria senda discurre en tendido ascenso por la herbosa ladera camino de Meateko lepoa ( centro ), cuello que asoma al fondo

El sendero atraviesa entre helechos

La senda alcanza una ruinosa borda enclavada a su vera. En este punto será donde abandonaremos el notorio sendero para tomar el que nace por la derecha

Sobre la ruinosa borda asoma Oteixon ( centro )

Descendemos por el sendero que nace por nuestra derecha ( izquierda en la foto ). Es Etxarkiko bidea

La senda, Etxarkiko bidea, se dibuja notoria entre los helechos mientras que en el valle asoma Oronoz-Mugaire

Rápidamente alcanzaremos el redil para el ganado que veíamos anteriormente, tras el que asoma la amplia pista

Desembocamos en la amplia pista, junto a la que aparece enclavado el redil para el ganado, y continuamos por esta hacia la derecha ( izquierda en al foto )

Apenas caminaremos unos pocos metros por la pista ya que de inmediato la abandonaremos por la izquierda

Abandonamos la pista para tomar el amplio camino, Gorritiko bidea, que nace por la izquierda ( centro en la foto ), el cual se abre paso entre helechos. Al fondo asoma el collado de Otalzu ( izda )

Un pequeño y herboso prado " delata el collado de Otalzu, enclavado bajo Amaburu ( dcha ) mientras que Auza despunta en el horizonte 

Gorritiko bidea alcanza el borde del arbolado, junto al que continuaremos

El camino se torna herboso mientras acentúa su pendiente adentrándose entre helechos

A la altura de un " solitario " árbol nuestro camino tuerce hacia la izquierda

Gorritiko bidea " amenaza " con perder notoriedad

El camino se torna pedregoso mientras continúa su acusado descenso

A la altura de una cerrada curva dejamos al paso una vieja borda ( dcha )

Gorritiko bidea continúa su descenso encerrado entre helechos

El camino gana notoriedad y pasa a convertirse en pedregosa pista

 Gorritiko bidea, alcanza un cruce, lugar en el que recibimos otro camino por la izquierda, el cual obviaremos. Seguimos de frente

Mirada atrás en el cruce, punto en el que haremos caso omiso al camino que recibimos por nuestra izquierda ( derecha en la foto ), el cual da acceso a una borda que asoma más arriba

Gorritiko bidea acentúa notablemente su inclinación

En breve daremos alcance a una nueva bifurcación, lugar en el que un camino cruza perpendicularmente. Lo atravesaremos mientras seguimos descendiendo de frente ( centro )

Gorritiko bidea se adentra bajo un frondoso hayedo

Con Narvarte/Narbarte asomando en el fondo del valle, nuestro camino alcanza un nuevo cruce, lugar en el que deberemos continuar descendiendo por la derecha 

Narvarte/Narbarte

Atravesamos un tramo " despejado " aunque el camino busca alcanzar el cercano hayedo

Alcanzamos nuevamente el borde del hayedo, lugar en el que nuestro camino vuelve a toparse con un cruce. Hacemos caso omiso del que asciende por la derecha mientras continuamos de frente ( izda )

El camino que hemos obviado da acceso a una visible borda

Nos adentramos en el bosque y volvemos a " tropezar " con una bifurcación. Continuamos por la derecha 

Continuamos descendiendo en fuerte pendiente

Atravesamos bajo un frondoso bosque de hayas

A la altura de una cerrada curva alcanzaremos una pista cementada que cruza perpendicularmente, por la que continuaremos descendiendo hacia la derecha

Una vez alcanzada la pista cementada echaremos una mirada atrás hacia el lugar en el que nuestro camino ( izda ) ha desembocado en ella

El vial cementado continúa su acusado descenso

A la derecha del camino dejaremos a nuestro paso una perrera

A la altura de una granja nuestro camino alcanza un portillo que nos cierra el paso 

Atravesamos el portillo que nos va a permitir alcanzar la parte baja del valle

Desembocamos en una estratégica bifurcación, lugar en el que deberemos tomar el camino que nace por la izquierda

Un poste indicador destaca en la estratégica bifurcación

Nuestro camino, Arribillaga bidea, se " encajona " entre prados

Narvarte/Narbarte asoma cercano

Alcanzamos la casa Albinea. El camino continúa de frente 

A la altura de la casa Albinea alcanzaremos un camino que cruza perpendicularmente. Continuamos por la derecha     

Desde la casa Albinea iniciaremos un tendido descenso

Nuestro camino, a la altura de una pequeña zona de esparcimiento ( izda ), desemboca en un carretil asfaltado que cruza perpendicularmente. Es el camino Real y por este continuaremos hacia la izquierda

Pequeña zona de esparcimiento que dejaremos a nuestro paso. Una fuente ( izda ) y una calera ( dcha ) destacan en el lugar

Calera que dejaremos a nuestro paso

Detalle en la calera

El Camino Real se " encajona " entre los muros de piedra que delimitan los verdes prados que dejaremos a nuestro paso

Alcanzamos la renovada casa Aizateberea

Banco de piedra enclavado a la orilla del vial asfaltado frente a la casa Aizateberea

Escudo en la fachada de la casa Aizateberea

En breve alcanzaremos la casa Aizategorea

Entrada a la casa Aizategorea

Escudo en la fachada de la casa Aizategorea

Atrás queda la casa Aizategorea

A la orilla de nuestro camino aparece una gran cruz de piedra ( izda )

No tardamos en dar alcance a una vivienda de reciente construcción. Es la casa Zubiondo

Fachada de la casa Zubiondo

El Camino Real atraviesa un frondoso paraje

Nuestro camino, el Camino Real, alcanza la entrada al Señorío de Bertiz, punto en el que destaca un panel informativo ( izda ) y el Puente de Reparacea ( derecha fuera de foto ) 

Detalle del panel informativo enclavado a la orilla de nuestro camino

Puente de Reparacea, nos desviamos " momentáneamente " hacia este

Atravesando el Puente de Reparacea daremos vista al Palacio del mismo nombre

El río Bidasoa atraviesa bajo el Puente de Reparacea

Salvado el Puente de Reparacea descenderemos a visitar el Palacio de Reparacea

Palacio de Reparacea

Un gran escudo destaca en la fachada del Palacio de Reparacea

Una vez visitado el Palacio de Reparacea retornamos nuevamente hacia el Puente de Reparacea aunque antes descenderemos por la izquierda hacia las orillas del río Bidasoa

Un marcado sendero nos permitirá descender hacia el río Bidasoa

Desde la orilla del río Bidasoa damos vista al Puente de Reparacea

Ahora sí, atravesamos el Puente de Reparacea

El río Bidasoa se abre paso entre la frondosidad del entorno

Salvado el Puente de Reparacea retomaremos nuestro camino a la altura de la entrada al Señorío de Bertiz ( dcha )

Un poste indicador aparece enclavado junto al portillo que da acceso al Señorío de Bertiz

Detalle del poste indicador enclavado a la entrada del Señorío de Bertiz

Portillo de acceso al Señorío de Bertiz, lo atravesaremos

A la entrada al Señorío de Bertiz nos reciben unos paneles informativos

Detalle de uno de los paneles informativos enclavados a la entrada del Señorío de Bertiz

Detalle de otro de los paneles informativos enclavados a la entrada del Señorío de Bertiz

Caminamos por Erreparatzea Basabidea

El camino se abre paso entre la frondosidad del bosque del Señorío de Bertiz

El camino parece perder notoriedad y pasa a convertirse en sendero mientras deja a su paso alguno de los edificios enclavados en el Señorío de Bertiz

Nuestro camino vuelve a ganar notoriedad

El camino deja a su paso un cruce, lugar en el que obviaremos el sendero que asciende por la izquierda mientras continuamos al frente ( dcha )

El " sobradero " de una pequeña fuente enclavada a la orilla de nuestro camino lo " encharca "

Fuente a la orilla de nuestro camino

La casa Etxeberria queda a nuestro paso junto al camino

Alcanzamos el portillo ( dcha ) por el que ya pasamos al comienzo de este itinerario, el cual da acceso al Señorío de Bertiz y que ahora va a servir para que lo abandonemos 

Atravesamos el portillo para abandonar el Señorío de Bertiz

Volvemos a dejar a nuestro paso la caseta de información situada a la entrada del Parque Natural del Señorío de Bertiz

Caminamos por el carretil asfaltado que da acceso al Parque Natural del Señorío de Bertiz

Abandonamos el carretil asfaltado que da acceso al Parque Natural del Señorío de Bertiz para tomar por la derecha el camino cementado que nos permite alcanzar el aparcamiento que le da servicio

Accedemos al aparcamiento que da servicio al Parque Natural del Señorío de Bertiz

Aparcamiento del Parque Natural Señorío de Bertiz, inicio y final de este itinerario sobre el que destaca el arbolado Amaburu