Monteadicción: Anayet-Vértice de Anayet-Punta de las Negras ( Desde el Corral de las Mulas )

Desprendido ligeramente bajo la vertiente meridional del cordal fronterizo, a mitad de camino entre Somport ( 1631 m ), estratégico paso de montaña que se abre al NW., y Portalet ( 1795 m ), el cual lo hace al NE., se eleva el bello macizo de Anayet, uno de los más “ asequibles “ y visitados de la cordillera Pirenaica.

Son numerosas las cumbres que conforman el macizo de Anayet, varias de ellas superando los 2500 metros de altura. Pero si hay algunas cimas que destacan entre estas, se puede decir que el Pico de Anayet ( 2574 m ) y el Vértice de Anayet o Punta o Garmo ( 2555 m ) son las más “ representativas “.

La emblemática cumbre del Vértice de Anayet ( 2555 m ) se eleva junto a “ su hermano “, el Pico de Anayet ( 2574 m ), conocido también habitualmente como Anayet “ a secas “, convirtiéndose ambas en las cumbres “ señeras “ del macizo al que dan nombre, es decir, el macizo de Anayet.

Con una altura muy “ atrayente “ y con una silueta, sobre todo el Pico de Anayet ( 2574 m ), extremadamente “ atractiva “, estas emblemáticas cumbres del Pirineo aragonés son el objetivo habitual de numerosos montañeros.

En el macizo del Anayet si hay una montaña que destaca sobre todas las demás esta es, sin lugar a dudas, el espectacular pico del mismo nombre, es decir, el Pico de Anayet ( 2574 m ). Siendo además el punto más alto del macizo, reúne todos los “ alicientes “ para ser la más visitada.

Sin ser una montaña muy complicada, siempre me refiero para gente acostumbrada a la montaña y en condiciones “ normales “, puede producir un poco de " respeto " su ascensión. En su vía habitual merece una pequeña mención el “ paso “ equipado con una cadena ( I ), el cual no ofrece mayor dificultad, y la chimenea ( I ) final de acceso a la cima, ambos sencillos y en los que prestando un mínimo “ de atención “, nos harán disfrutar de una de las cimas más bellas y visitadas del macizo pirenaico.

El macizo de Anayet se eleva al NE. del Valle de Canfranc mientras que bajo su vertiente oriental se extiende el extremo más septentrional del Valle de Tena, es por eso que cualquiera de estos valles son los puntos de partida habituales para las incursiones por la zona.

Una de las rutas “ clásicas “ para los que parten desde el Valle de Canfranc es la que asciende por la Canal Roya para descender por la Canal de Izás, bello itinerario que ya hemos empleado en alguna de nuestras anteriores incursiones por la zona: “ Vértice de Anayet y Garmo de Izás “.

Pero, desde mi humilde punto de vista, si hay una ruta “ clásica “ de entre las que buscan alcanzar las dos cumbres “ señeras “ del macizo de Anayet, esta es la que parte desde el Valle de Tena, más concretamente desde el conocido como Corral de las Mulas ( 1624 m ). Eso sí, lamentablemente he de reconocer que esta ruta, de un tiempo a esta parte y sobre todo en época estival, aparece excesivamente concurrida.

Tiempo atrás también hemos tomado el Corral de las Mulas ( 1624 m ) como punto de partida para ascensiones a esas otras cumbres menos conocidas y por lo tanto menos visitadas de entre las que también conforman el macizo de Anayet: “ Punta de la Garganta-Espelunciecha-Corona de los Farallones “ y también “ Pico Royo-Culivillas-Arroyetas “.

En esta ocasión, acompañado de mi hijo Oscar que no conoce la zona, nos disponemos a visitar las dos cumbres más emblemáticas del macizo, el Vértice de Anayet ( 2555 m ) y el Pico de Anayet ( 2574 m ) y para ello tomaremos el Corral de las Mulas como punto de partida. Esta es mi propuesta, espero que la disfrutéis.

Resumen del Itinerario

Estacionamos nuestro vehículo en el pequeño aparcamiento del Corral de las Mulas ( 1624 m ), enclavado a orillas de la carretera A-136 que asciende al Puerto del Portalet ( 1795 m ).

Desde aquí tomaremos la carreterita, cerrada fuera de temporada de esquí, por la que alcanzaremos, tras plácido caminar, la Estación de Anayet ( 1735 m ).

Siguiendo las balizas rojiblancas del sendero GR-11 ascenderemos por el bello Barranco de Culivillas sin más dificultad que salvar el considerable desnivel que nos hará desembocar en los Llanos de Anayet ( 2230 m ), bucólico paraje en el que destacan los ibones de Anayet.

El notorio sendero continúa muy marcado en el terreno en dirección al collado Rojo o collado de Anayet ( 2414 m ), pequeño cuello desde el que primeramente nos desviaremos hacia la izquierda ( SW ) para, en acusado ascenso y en todo momento siguiendo la nítida senda, alcanzar la cima del Vértice de Anayet ( 2555 m ).

El camino utilizado en el ascenso nos devuelve al collado de Anayet ( 2414 m ) aunque sin llegar a alcanzarlo nos desviaremos por la izquierda ( NW ), sin camino definido, hacia el pequeño colladito ( 2405 m ) abierto bajo la vertiente sudoriental de la Punta de las Negras ( 2461 m ), nuestro próximo objetivo.

Desde el citado “ cuello “ ( 2405 m ) remontamos su pedregosa ladera para alcanzar de inmediato la cota SE. de la Punta de las Negras ( 2460 m ), desde la que un corto descenso nos deja en el “ colladito “ ( 2445 m ) que nos separa de la cima “ principal “ ( 2461 m ), en la que desembocaremos de inmediato.

Nuevamente retornamos al collado de Anayet ( 2414 m ), lugar desde el que tomaremos el notorio sendero que, también en acusado ascenso, nos encamina hacia el Pico de Anayet ( 2574 m ).

El marcado sendero alcanza el “ paso de la cadena “ ( I ) para posteriormente situarse en la base de la sencilla “ chimenea “ ( I ) por la que, en brutal ascenso, desembocaremos en la cima del Pico Anayet ( 2574 m ).

El camino utilizado en el ascenso nos devuelve al collado de Anayet ( 2414 m ), desde donde continuaremos el descenso hacia los ibones de Anayet ( 2230 m ) aunque ahora procuramos tomar un camino menos transitado.

Una vez alcanzados los citados ibones ( 2230 m ) atravesaremos los Llanos de Anayet para retomar el balizado sendero de ascenso aunque, de inmediato, lo abandonaremos por la izquierda ( W ) para continuar perdiendo altura hacia la Glera de Anayet, mucho menos frecuentada.

Por marcada senda terminamos desembocando, sin dificultad reseñable, en la carretera por la que, al comienzo del itinerario, accedimos a la Estación de Anayet ( 1735 m ) y que ahora nos devolverá al punto de partida, el Corral de las Mulas ( 1624 m ).

Datos del Itinerario

Desnivel: 1215 m

Tiempo: De 6 h a 8 h

Distancia: 17´0 km aprox.

Fecha de realización: Julio 2021

Inicio: Corral de las Mulas ( Formigal )

Época recomendada: Verano y Otoño

Cimas: Vértice de Anayet ( 2555 m ); Punta de las Negras ( 2461 m ); Pico de Anayet ( 2574 m )

Descripción del Itinerario

Desde las inmediaciones de Formigal ( 1550 m ), sin entrar a esta localidad del Valle de Tena, ascendemos por la carretera A-136 que da acceso al puerto del Portalet ( 1795 m ) para, aproximadamente unos tres kilómetros antes de alcanzar dicho paso de montaña, estacionar el vehículo en el conocido como Corral de las Mulas ( 1624 m ), punto de inicio de este itinerario. Este lugar es facilmente reconocible por ser el acceso a las pistas de la Estación de Anayet ( 1735 m ).

Cruzamos el portillo que cierra, fuera de temporada de esquí, la carretera de acceso a la mencionada estación ( 1735 m ) para comenzar a caminar por asfalto.

Iniciamos un plácido descenso que nos hará atravesar el puente que salva el cauce del río Gállego, punto a partir del cual la carretera gana altura hasta desembocar en la anteriormente citada Estación de Anayet ( 1735 m ).

Desde la Estación de Anayet ( 1735 m ) continuamos de frente ( SE ) tomando el marcado sendero que aparece señalizado con las balizas rojiblancas de la Senda GR-11, el cual discurre paralelo al Arroyo de Culivillas.

Ganamos altura paulatinamente caminando junto al caudaloso arroyo mientras seguimos acompañados en todo momento de las balizas de la senda GR-11.

El sendero penetra en el Barranco de Culivillas para posteriormente girar a la derecha ( W ) encajonándose bajo la vertiente meridional de la Punta de la Garganta ( 2145 m ) y la cara Norte del Pico Culivillas ( 2509 m ) y el Pico Arroyetas ( 2556 m ).

La senda acentúa paulatinamente su inclinación para, en brutal pendiente, terminar desembocando en los Llanos de Anayet ( 2330 m ), extensa planicie en la que llamarán nuestra atención los ibones de Anayet.

El marcado sendero atraviesa entre los citados ibones para continuar ascendiendo “ plácidamente “ en la misma dirección ( E ) con la vista puesta en el collado de Anayet o collado Rojo ( 2414 m ), abierto entre las cimas del Vértice de Anayet ( 2555 m ), cumbre que se alza a la izquierda ( SW ), y el Pico de Anayet ( 2574 m ), cuya “ elegante “ silueta se alza a la derecha ( NW ).

Ganamos altura cómodamente hasta situarnos bajo el citado collado de Anayet ( 2414 m ), lugar en el que la marcada senda inicia un brutal ascenso para terminar desembocando en el pequeño “ cuello “ ( 2414 m ). A la derecha ( NE ) asoma el Pico Anayet ( 2574 m ), al frente ( W ) lo hace la Punta de las Negras ( 2461 m ) y la izquierda ( SW ) despunta cercano el Vértice de Anayet ( 2555 m ).

Este último, el Vértice de Anayet ( 2555 m ), será nuestro primer objetivo y para alcanzarlo tomaremos el notorio sendero que nace por la izquierda ( S ) y que paulatinamente irá acentuando su inclinación para, sin dificultad reseñable, desembocar en la citada cumbre. Vértice de Anayet o Punta o Garmo ( 2555 m ), pequeña y rocosa cima que aparece señalizada por un vértice geodésico. Abierta y espectacular panorámica hacia todas las vertientes.

La senda utilizada en el ascenso nos devuelve al collado de Anayet ( 2414 m ) aunque unos metros antes de alcanzarlo nos desviaremos por la izquierda ( NW ), sin camino definido, para descender hacia el pequeño, a la vez que discreto, “ colladito “ ( 2405 m ) abierto bajo la vertiente sudoriental de la Punta de las Negras ( 2461 m ), nuestro próximo objetivo.

Desembocamos en el citado “ cuello “ ( 2405 m ) y desde este iniciamos el corto ascenso por la pedregosa ladera sudoriental de la Punta de las Negras ( 2460 m ), “ bicéfala “ cumbre que nos disponemos a “ coronar “.

En fuerte pendiente alcanzaremos rápidamente su cima SE. ( 2460 m ), cota ligeramente más baja que la “ principal “ ( 2461 m ) que asoma cercana al NW. Sin señal alguna que la identifique nos brinda una bella panorámica.

Un corto descenso, en dirección opuesta a la de ascenso, nos hace alcanzar rápidamente el pequeño “ colladito “ ( 2445 m ) que nos separa de la cima “ principal “ ( 2461 m ).

Desde este “ colladito “ ( 2445 m ), un corto y acusado ascenso por la herbosa ladera “ salpicada “ de rocas hace que desembocamos de inmediato en la cima “ principal “ de la Punta de las Negras ( 2461 m ). Un hito de piedras la señaliza. Panorámica similar a la disfrutada en la cima “ gemela “.

El camino utilizado en el ascenso nos devuelve al “ colladito “ ( 2445 m ) que nos separa de la cota SE. ( 2460 m ), “ cimita “ que ahora evitaremos discurriendo bajo su herbosa ladera meridional. No tardamos en desembocar nuevamente en el “ cuello “ ( 2405 m ) abierto bajo la vertiente sudoriental de la Punta de las Negras ( 2461 m ) para desde este iniciar el corto ascenso que nos volverá a dejar en el collado de Anayet ( 2414 m ).

Ahora tomaremos el marcado sendero que se encamina hacia el Pico de Anayet ( 2574 m ), senda que inicia un tendido ascenso para paulatinamente ir acentuándose la inclinación. No tardamos en desembocar en una pequeña “ terraza “, lugar que nos permitirá un pequeño “ descanso “ mientras disfrutamos de la bella panorámica.

La senda deja atrás el terreno herboso para adentrarse bajo la rocosa vertiente SE. del Pico de Anayet ( 2574 m ), por la que ascenderemos sin excesivas dificultades mientras caminamos en todo momento por notorio sendero.

La pendiente se acentúa para dar alcance al “ paso de la cadena “ ( I ), un sencillo tramo de roca que en condiciones “ normales “ no reviste dificultad reseñable atravesarlo pero que en días de mucha afluencia de gente se convierte en un “ cuello de botella “ en el que deberemos esperar nuestro turno. Hoy prácticamente una hora.

Salvado este “ pequeño escollo “ la senda alcanza rápidamente la base de la herbosa y sencilla “ chimenea “ ( I ) que deberemos superar para alcanzar nuestro objetivo.

Sin dificultad reseñable, tan “ solamente “ superar la brutal pendiente que aparece ante nosotros y teniendo cuidado además con las piedras que pueda desprender la gente que va por encima y las que podemos hacer caer nosotros, terminamos desembocando en la pequeña cima del Pico de Anayet ( 2574 m ). Espectacular panorámica.

Descendemos con sumo cuidado por la “ chimenea “ ( I ) de acceso a la cima que utilizamos en nuestro ascenso y por la que rápidamente volvemos a alcanzar el “ paso de la cadena “ ( I ). Por suerte, esta vez, el tiempo de espera es “ mínimo “ y descendemos rápidamente.

Salvado este “ escollo “ la senda nos hace alcanzar, una vez más y sin dificultad reseñable, el collado de Anayet ( 2414 m ), lugar desde el que continuaremos descendiendo por el sendero utilizado en el ascenso.

Un brutal descenso nos hace alcanzar la bifurcación en la que, a la altura de un hito, ahora obviaremos el balizado sendero que, por la derecha ( S ), utilizamos en nuestro ascenso desde los Llanos de Anayet ( 2330 m ) para tomar el menos frecuentado que continúa por la izquierda ( E ). Este, muy notorio, también nos devuelve rápidamente a los ibones de Anayet ( 2330 m ).

Volvemos a atravesar los Llanos de Anayet ( 2330 m ) para retomar la balizada Senda GR-11 por la que, al comienzo del itinerario, accedimos a este bucólico paraje.

Apenas caminaremos unos pocos metros por la “ concurrida “ senda GR ya que de inmediato la abandonaremos tomando una más herbosa y mucho menos transitada que nace por la izquierda ( E ).

Dicho sendero aparece balizado con puntos de pintura de color rojo y posteriormente con marcas de pintura azules y blancas, además de por esporádicos hitos.

La senda, muy notoria en todo momento, desciende hacia la Glera de Anayet para dejar a su paso la Cabaña del mismo nombre, Cabaña de La Glera.

Una vez que dejamos atrás la Cabaña de La Glera abandonamos el sendero balizado con las marcas azules y blancas para continuar por uno más herboso que, por la derecha ( E ), continúa descendiendo en dirección al visible aparcamiento de la Estación de Anayet ( 1735 m ).

La herbosa senda pierde altura en brutal pendiente para terminar desembocando en la “ carreterita “ que da acceso a un pabellón situado en las inmediaciones de la Estación de Anayet ( 1735 m ).

Una vez alcanzamos la citada “ carreterita “ continuamos por esta hasta desembocar en la “ principal “, la que utilizamos al comienzo del itinerario y que ahora nos devolverá al punto de partida, el Corral de las Mulas ( 1624 m ).

Track del Itinerario

Fotos del Itinerario

Estacionaremos nuestro vehículo en el Corral de las Mulas, pequeño aparcamiento situado a orillas de la carretera A-136 que da acceso al Puerto del Portalet

En el Corral de las Mulas un gran " portón " cierra el acceso para vehículos al carretil asfaltado que da acceso a la Estación de Anayet. Una pequeña " puerta " ( dcha ) permite acceder a peatones. Hemos llegado en " hora punta "

Poste indicador y " puerta " que permite el acceso a peatones

Detalle del poste indicador situado en el aparcamiento del Corral de las Mulas

Desde el Corral de las Mulas divisamos la Estación de Anayet, sobre la que destacan el Pico Royo ( izda ), Culivillas, Arroyetas y la Punta de la Garganta ( centro ). El Arroyo de Culivillas discurre en primer término

Caminamos por la carreterita que da acceso a la Estación de Anayet. Ante nosotros despuntan de izquierda a derecha: Pico Royo, Culivillas, Arroyetas, Punta de la Garganta, Espelunciecha, Espelunciecha Oriental y la Corona de los Farallones

Numerosas cabezas de ganado pacen plácidamente en los verdes pastos que vamos dejando a la orilla de la carreterita

Sobre la carretera por la que caminamos asoma el Telesilla Garmet

Nos encaminamos hacia el puente que salva el Arroyo de Culivillas mientras que al fondo asoma el " paso " que atraviesa la carretera, sobre el que despunta la Punta de la Garganta

La carretera atraviesa el puente que salva el Arroyo de Culivillas

Atravesamos el " paso "

La carreterita que da acceso a la Estación de Anayet aparece muy concurrida

El Pico Campo de Troya despunta sobre la Estación de Anayet

No tardamos en alcanzar la Estación de Anayet. Continuaremos por la derecha

Desde la Estación de Anayet nos encaminamos hacia el telesilla que asoma cercana al fondo, sobre el que despunta la Punta de la Garganta

Desde las inmediaciones del telesilla tomaremos la balizada senda que aparece " flanqueada " en su comienzo por cañones de nieve

La senda no tarda en convertirse en un amplio y notorio camino

El camino paulatinamente irá perdiendo notoriedad

Nuestro camino discurre bajo la vertiente septentrional de Lapazuso

Un caudaloso riachuelo discurre por el Barranco de Culivillas

Convertido en un marcado y herboso sendero ascendemos por el Barranco de Culivillas

Atravesamos uno de los numerosos riachuelos que vierten sus aguas en el Arroyo de Culivillas

La marcada senda acentúa su inclinación mientras asciende paralela al Arroyo de Culivillas

La senda por la que ascendemos discurre por herbosas laderas

Atravesamos el cauce del Arroyo de Culivillas

El sendero aparece muy concurrido mientras vuelve a acentuar su pendiente

Las balizas señalizan escrupulosamente el notorio sendero que ahora discurre junto a la margen izquierda del Arroyo de Culivillas

Arroyo de Culivillas

La senda asciende en brutal pendiente

La inclinación del sendero nos da una pequeña " tregua " mientras volvemos a atravesar el cauce del Arroyo de Culivillas

Sobre nuestras cabezas despunta la Punta de la Garganta

Echamos una mirada atrás hacia el Barranco de Culivillas, por el que venimos ascendiendo y sobre el que despunta la Punta de la Garganta ( izda )

Volvemos a atravesar una vez más el Arroyo de Culivillas dando vista al punto en el que la senda vuelve a acentuar su inclinación

Nueva mirada atrás hacia el Barranco de Culivillas, por el que venimos ascendiendo. La Punta de la Garganta ( centro ) despunta en primer término

La balizada senda asciende por herbosas laderas

El inclinado y marcado sendero gana altura junto a la margen izquierda del Barranco de Culivillas

Paulatinamente la senda nos irá alejando del cauce del Arroyo de Culivillas ( dcha )

La senda serpentea mientras la pendiente nos vuelve a dar una pequeña tregua

La balizada senda termina por alcanzar la parte alta del Barranco de Culivillas, momento en el que ya damos vista a la cima del Vértice de Anayet ( dcha )

Mirada atrás desde la parte alta del Barranco de Culivillas. El macizo Infiernos-Argualas ( centro ) despunta en el horizonte

A punto de alcanzar los ibones de Anayet despunta ante nosotros la rocosa cumbre del Anayet

A nuestro paso dejamos una baliza de GR con el Pico Anayet ( dcha ) y el Vértice de Anayet ( izda ) asomando al fondo

Esporádicos hitos balizan el camino a seguir

Desde nuestro camino divisamos cercanos los ibones de Anayet, sobre los que asoma el Midi d´Ossau

La espectacular silueta del Midi d´Ossau destaca sobre los ibones de Anayet

Midi d´Ossau

Nuestro camino discurre por los Llanos de Anayet en dirección al collado de Anayet o collado Rojo ( centro ), cuello que se abre al fondo entre las cimas del Vértice de Anayet ( izda ) y el Anayet ( dcha )

Dejamos atrás los ibones de Anayet, sobre los que despunta Espelunciecha ( dcha ) mientras que en el horizonte llama nuestra atención el Midi d´Ossau ( izda )

La marcada senda por la que caminamos discurre junto a uno de los numerosos riachuelos que vierten sus aguas en los ibones de Anayet. Ante nosotros aparece en todo momento Anayet

Mientras que nuestro notorio sendero discurre entre las verdes praderas que tapizan los Llanos de Anayet al fondo asoma el rojizo Vértice de Anayet ( centro )

Ahora discurrimos junto a la margen izquierda de uno de los riachuelos que " riegan " los Llanos de Anayet, encaminándonos hacia el collado de Anayet ( centro ) que vemos asomar al fondo

Atrás quedan los Llanos de Anayet

Anayet despunta espectacular sobre nuestras cabezas

La marcada senda parece encaminarse hacia la base del " rocoso " Anayet

El Vértice de Anayet despunta al fondo

La senda discurre en todo momento muy notoria mientras se encamina hacia el collado de Anayet ( centro )

Nuevamente la senda parece buscar la base del Anayet

En las inmediaciones del collado de Anayet comienza a " aflorar " la " típica " tierra roja

La cima del Vértice de Anayet aparece más cerca

Anayet parece ir perdiendo " fiereza " y su ascensión ya parece más " asequible "

El marcado sendero se encamina hacia el ya cercano collado de Anayet o collado Rojo

Conforme nos acercamos hacia el collado de Anayet la senda gana inclinación paulatinamente

Conforme ascendemos hacia el collado de Anayet la panorámica hacia los ibones de Anayet mejora. En el horizonte ya asoman los " colosos " del Pirineo, Balaitous ( izda ) y el macizo Infiernos-Argualas ( centro )

Empinado tramo final hacia el collado de Anayet

La senda que asciende hacia el collado de Anayet gana altura entre grandes rocas

Acusado tramo final en el ascenso al collado de Anayet

La senda termina desembocando en el collado de Anayet

Alcanzado el collado de Anayet vemos aparecer al frente la Punta de las Negras, uno de nuestros objetivos

Desde el collado de Anayet resulta imposible no echar una mirada hacia el " omnipresente " Midi d´Ossau

Abandonamos el collado de Anayet para tomar el notorio sendero que, por la izquierda, asciende hacia el Vértice de Anayet

Dejamos atrás el collado de Anayet, sobre el que despunta Anayet

Una marcada senda nos encamina hacia el Vértice de Anayet

La senda que asciende hacia el Vértice de Anayet no tarda en acentuar su inclinación

Conforme ascendemos hacia el Vértice de Anayet no podemos evitar echar una mirada atrás hacia el Anayet, rocosa " mole " que aparece en primer término tras el que asoma el Midi d´Ossau

La doble cumbre de la Punta de las Negras queda rápidamente por debajo

La notoria senda aparece muy marcada en el terreno

Mientras ascendemos hacia el Vértice de Anayet disfrutaremos de una bella panorámica hacia el macizo de Aspe ( izda ), Bisaurín ( centro), Castillo d´Achert, Acherito y Petrechema ( dcha ), conjunto de cumbres que asoman en el horizonte

La cima del Vértice de Anayet asoma cercana

Mi hijo Oscar camina por la loma camino de la cima del Vértice de Anayet

Los hitos balizan la marcada senda que busca alcanzar la cima del Vértice de Anayet

Últimos metros hacia la cima del Vértice de Anayet

Desde las inmediaciones de la cima del Vértice de Anayet echamos una mirada atrás hacia el Anayet, rocosa cumbre tras la que asoma el Midi d´Ossau ( izda ) mientras que en el horizonte llama nuestra atención el Balaitous ( dcha )

Con el vértice geodésico que corona la cima del Vértice de Anayet ya a la vista, la pedregosa senda busca alcanzarlo

Mi hijo Oscar en la cima del Vértice de Anayet con Anayet asomando en primer término

Mirada desde la cima del Vértice de Anayet hacia Formigal, localidad que asoma en el fondo del valle bajo el macizo Infiernos-Argualas ( centro )

En la cima del Vértice de Anayet con vista a Anayet, en primer término, y al Midi d´Ossau, al fondo

En la cima del Vértice de Anayet junto a mi hijo Oscar antes de iniciar el descenso

Dejamos atrás la cima del Vértice de Anayet

Perdemos altura rápidamente hacia el collado de Anayet mientras disfrutamos de una bella panorámica hacia el Anayet, en primer término, Midi d´Ossau ( izda ) y Balaitous ( dcha )

Retomamos el marcado sendero que utilizamos en el ascenso para descender hacia el collado de Anayet, sobre el que despunta Anayet y la Punta de las Negras ( izda ), nuestro próximo objetivo

Anayet despunta en primer término con el Midi d´Ossau ( izda ) detrás y Balaitous ( dcha ) asomando en el horizonte

Mirada atrás hacia el Vértice de Anayet, cumbre recién " conquistada " hacia la que asciende un nutrido grupo

Un numeroso grupo de montañeros asciende hacia el Vértice de Anayet

La marcada senda no tarda en alcanzar el collado de Anayet

La " bicéfala " cumbre de la Punta de las Negras asoma a nuestra izquierda, hacia esta nos encaminamos

Antes de alcanzar el collado de Anayet nos desviamos por la izquierda, sin camino definido, hacia la Punta de las Negras, cumbre que asoma ante nosotros

No tardamos en alcanzar el collado abierto bajo la loma cimera de la Punta de las Negras

Ascendemos por la pedregosa ladera SE. de la Punta de las Negras

Mi hijo Oscar en la cima SE. de la Punta de las Negras con vista al Midi d´Ossau

Mirada hacia el vértice de Anayet desde la cima de la Punta de las Negras

Cima SE. de la Punta de las Negras con vista a Anayet

Con la vista puesta en la cercana cima " principal " de la Punta de las Negras descenderemos hacia el colladito ( izda ) que nos separa de esta

No tardamos en alcanzar el " colladito " que separa las dos cimas de la Punta de las Negras. La cima " principal " despunta sobre este

Mirada hacia el Midi d´Ossau desde el collado abierto entre las dos cimas de la Punta de las Negras

Por herboso terreno, " salpicado " de grandes rocas, ganamos altura en acusado ascenso hacia la cima " principal " de la Punta de las Negras

Mi hijo Oscar en la cima " principal " de la Punta de las Negras con vista a la cima SE. ( dcha ) y hacia Anayet ( centro )

Un servidor en la cima de la Punta de las Negras con Anayet asomando detrás

Mi hijo Oscar en la cima " principal " de la Punta de las Negras con el macizo de Aspe, Bisaurin y Castillo d´Achert ( dcha ) asomando en el horizonte

Abandonamos la cima " principal " de la Punta de las Negras e iniciamos el descenso por el camino utilizado en el ascenso

Bordeamos la cima SE. de la Punta de las Negras aprovechando sendas de ganado no muy notorias

Mientras descendemos de la Punta de las Negras disfrutamos de una bonita panorámica hacia el Vértice de Anayet

El collado de Anayet se abre cercano ante nosotros. Hacia este nos dirigimos

Alcanzamos el collado de Anayet mientras miramos hacia nuestro próximo objetivo, Anayet ( izda )

Dejamos atrás el collado de Anayet, sobre el que despunta el Vértice de Anayet

En el collado de Anayet tomaremos el marcado sendero que, dando vista al Midi d´Ossau, nos encamina hacia el Anayet

El marcado sendero de inmediato acentúa su inclinación

Unos subimos mientras que otros ya vienen descendiendo

La rocosa mole del Anayet despunta sobre nuestras cabezas

Desembocamos rápidamente en una amplia terraza herbosa

La terraza herbosa nos permite una bella panorámica hacia los ibones de Anayet que se extienden a nuestros pies. Al fondo llama nuestra atención el macizo Infiernos-Argualas

Ya por terreno con la característica roca roja nos encaminamos hacia el " paso de la cadena "

Tirando de " zoom " divisamos el concurrido " paso de la cadena "

El marcado sendero continúa su acusado ascenso

En el entorno del " paso de la cadena " hay bastante " trajín "

" Paso de la cadena "

Mirada atrás en el acusado ascenso hacia el " paso de la cadena "

Mientras ascendemos hacia el Anayet echamos una mirada hacia el Vértice de Anayet, cima recién visitada que asoma en primer término

Conforme nos acercamos al " paso de la cadena " aumenta el " gentío "

El " paso de la cadena ", en condiciones normales, no reviste ninguna dificultad

El " paso de la cadena ", con la cantidad de gente que asciende al Anayet, se convierte en un " cuello de botella "

Toca esperar. Un nutrido grupo desciende el " paso de la cadena "

Hay gente a la que le cuesta mucho descender este sencillo " paso de la cadena "

Tras una larga espera, nos toca el turno. Iniciamos el ascenso del corto y sencillo " paso de la cadena "

Mi hijo Oscar en el inicio del " paso de la cadena "

De inmediato nos situamos en la parte alta del " paso de la cadena ". La marcada senda continúa por herboso terreno buscando alcanzar la base de la " chimenea " de ascenso a la cima de Anayet

De inmediato nos situamos en la base de la " chimenea " de ascenso a la cima de Anayet

Ganamos altura en acusado ascenso por la " chimenea " de ascenso a la cima de Anayet

En el ascenso por la " chimenea " de Anayet, en algunos tramos, deberemos ayudarnos de las manos

Conforme ascendemos por la " chimenea ", esta se torna más herbosa

Herboso tramo en la salida de la " chimenea "

En la parte alta de la " chimenea " el sendero traza una curva hacia la derecha buscando alcanzar la cima del Anayet

Desde la salida de la " chimenea " divisamos los últimos metros a la cima del Anayet

Mirada desde la salida a la cima de Anayet. En primer término asoma el Vértice de Anayet ( dcha ) mientras que al fondo despuntan la Pala de Ip ( izda ), la Punta de la Tronquera ( centro ) y La Moleta. En el horizonte destaca Collarada ( centro )

Mirada hacia el macizo de Aspe ( izda ), Bisaurín ( centro ), Castillo d´Achert, Mallo de Acherito y Petrechema ( dcha )

Concurrida cima del Anayet

Mi hijo Oscar en la cima del Anayet con Punta Escarra ( izda ), Pala de Ip y La Moleta ( dcha ) asomando al fondo

Piedra, a la que le falta un pedazo, que señaliza la cima de Anayet

Mi hijo Oscar en la cima del Anayet con el Midi d´Ossau asomando al fondo

Midi d´Ossau visto desde el Anayet

En el horizonte destacan el macizo de Balaitous-Frondellas ( izda ) e Infiernos-Argualas ( dcha )

Macizo Balaitous-Frondellas

Infiernos

Lurien ( izda ) y Arriel ( dcha ) con Pallas despuntando detrás

Desde la cima de Anayet divisamos los ibones de Anayet, en primer término, mientras que en el fondo del valle asoma Formigal ( centro ) bajo el macizo Infiernos-Argualas

Con La Raca despuntando en primer término, en el horizonte destaca buena parte del Pirineo occidental, desde Bisaurin ( izda ) hasta Anie ( dcha )

Nos despedimos de la cima del Anayet

Iniciamos el descenso del Anayet tomando la " chimenea " que utilizamos en el ascenso, yambién muy " transitada "

Mirada hacia arriba en el descenso de la " chimenea ". Cuidado con las piedras que puedan caer desde arriba

Descendemos cómodamente pero extremando las precauciones

Nuevamente miramos hacia arriba en la " chimenea "

No tardamos en alcanzar la base de la " chimenea ", lugar en el que la marcada senda nos devuelve al concurrido " paso de la cadena "

Parece que en el " paso de la cadena " nos va a tocar volver a esperar

Más rápidamente de lo esperado iniciamos el descenso del " paso de la cadena "

Descendiendo el sencillo " paso de la cadena "

Hora punta en el " paso de la cadena "

El grupo con el que coincidimos atraviesa sin dificultad reseñable y con agilidad el " paso de la cadena "

Últimos metros en el descenso del " paso de la cadena "

Mi hijo Oscar en el último tramo de cadena

Una sonrisa para la foto

Se acaba el sencillo " paso de la cadena "

Salimos del " paso de la cadena "

Hay a quien no le resulta tan sencillo el " paso de la cadena "

Tras dejar atrás el " paso de la cadena " continuaremos perdiendo altura por el pedregoso e inclinado sendero

Mirada atrás hacia el todavía concurrido " paso de la cadena " que salva la rocosa repisa que se abre bajo la pared del Anayet

Esporádicos hitos balizan el rojizo tramo de sendero que atravesamos con la vista puesta en el Vértice del Anayet ( centro )

Los hitos balizan el sendero, desde el que damos vista a la Punta de las Negras ( izda ), cima visitada anteriormente, mientras que en el horizonte destacan Petrechema y Anie

La marcada senda nos encamina hacia el ya visible collado de Anayet, sobre el que despunta el Vértice de Anayet

No tardamos en desembocar en el collado de Anayet

En el collado de Anayet tomaremos por la izquierda el sendero, por el que ya ascendimos anteriormente, que nos devolverá a los ibones de Anayet

La notoria senda deja atrás el collado de Anayet para iniciar un acusado descenso

Este tramo de camino también aparece muy concurrido

Echamos una mirada hacia los ibones de Anayet, hacia los que nos encaminamos y sobre los que despunta la herbosa cima de Espelunciecha. En el horizonte destacan los macizos Balaitous-Frondellas ( izda ) e Infiernos-Argualas ( centro )

Nuestra senda se bifurca. Obviaremos el camino de la derecha, utilizado en el ascenso, para ahora optar por el que se desvía por la izquierda, menos concurrido

El sendero tomado, muy notorio y balizado con hitos ( izda ), se adentra en una agradable pradera herbosa

Lurien, Pallas y Balaitous despuntan en el horizonte

La senda por la que caminamos discurre muy notoria

Paulatinamente la notoria senda parece difuminarse en el herboso praderío

Los hitos balizan en todo momento la senda a seguir mientras ante nosotros se extienden los Llanos de Anayet

Sobre los Llanos de Anayet despunta el pico del mismo nombre, Anayet

Mi hijo Oscar junto a la orilla del ibón de Anayet con el Midi d´Ossau asomando en el horizonte

La inconfundible silueta del Midi d´Ossau despunta sobre las aguas del ibón de Anayet

Desde la orilla del ibón de Anayet echamos una última mirada hacia Anayet

Atravesamos los Llanos de Anayet buscando alcanzar el marcado sendero que asoma al fondo, por el que accedimos a este bello paraje a nuestro ascenso

Una vez alcanzado el sendero continuamos por este hasta el extremo de los Llanos de Anayet

El sendero tomado aparece muy marcado en el terreno y además está perfectamente balizado

De inmediato la senda se bifurca. Abandonamos el " concurrido " sendero ( dcha ) por el que ascendimos anteriormente para tomar el más " tranquilo " que continúa por la izquierda

Como señaliza la baliza hemos abandonado la Senda GR-11 para continuar por un notorio y herboso sendero

La senda en todo momento aparece muy marcada en el terreno. El macizo Infiernos-Argualas ( centro ) despunta en el horizonte

Bajo el sendero por el que descendemos aparece la Senda GR-11 ( dcha ), más concurrida

La senda por la que descendemos discurre por una inclinada ladera

Alcanzamos un sendero que atraviesa perpendicularmente. Continuaremos por esta hacia la izquierda

Unos puntos de pintura roja ( izda ) balizan el sendero por el que descendemos

Mientras descendemos no podemos dejar de mirar hacia los macizos de Balaitous-Frondellas ( izda ) e Infiernos-Argualas ( dcha )

A nuestro paso dejaremos numerosas " florecillas "

Esporádicos hitos balizan nuestro sendero

En primer término, bajo nuestro camino, destaca la Punta de la Garganta ( centro ) y bajo esta aparece la Senda GR-11 por la que ascendimos al comienzo del itinerario

La marcada senda se dibuja en la herbosa ladera por la que descendemos

La senda se bifurca. Continuamos descendiendo por la derecha

Los hitos ( izda ) señalizan el sendero a seguir

La marcada senda atraviesa algún tramo algo más " pedregoso "

Nuevo cruce. Tomamos a la derecha siguiendo unas balizas azules y blancas

La marcada senda se encamina hacia la Cabaña de La Glera, pequeño edificio que asoma cercano

Nuestro sendero continúa por la derecha pero nos desviamos al frente para visitar la Cabaña de La Glera

Mi hijo Oscar en la Cabaña de La Glera

Inscripción en la fachada de la Cabaña de La Glera

Dejamos atrás la Cabaña de La Glera

Descendemos por el valle de La Glera de Anayet

Retomamos la herbosa senda para continuar descendiendo

Los puntos de color rojo continúan señalizando nuestro camino

Las balizas azules y blancas también aparecen junto al herboso sendero

Como indica el " aspa " en la roca, terminaremos abandonando la senda balizada con marcas azules y blancas para continuar por el herboso y notorio sendero

La marcada senda se encamina hacia el enorme aparcamiento de la estación de Anayet

La herbosa senda pierde altura en acusado descenso

Perdemos altura rápidamente por las herbosas laderas

Atravesamos una herbosa pista que cruza perpendicularmente

Continuamos descendiendo en dirección al enorme aparcamiento de la estación de Anayet aunque antes de alcanzarlo nos desviaremos hacia la visible carreterita ( izda )

Alcanzamos rápidamente la carreterita que da acceso a un gran edificio. Continuamos descendiendo por la derecha

La carretera se bifurca. Volvemos a tomar a la derecha

La carreterita termina desembocando en la carretera " principal " que, desde el Corral de las Mulas, da acceso a la Estación de Anayet, por la que ascendimos al comienzo del itinerario y por la que ahora continuaremos hacia la izquierda

Alcanzamos la carretera " principal " en el punto en el que esta atraviesa el puente que salva el Arroyo de Culivillas ( dcha )

Alcanzamos la carretera " principal " en el punto en el que esta atraviesa el puente que salva el Arroyo de Culivillas ( dcha ), lugar sobre el que destaca el Telesilla Garmet