lunes, 21 de junio de 2021

GR-225 La Fuga de Ezkaba ( De Sorogain a Urepel ) 4ª Etapa

Despuntando sobre los tejados de la capital navarra, el monte Ezkaba ( 895 m ) y su alargado “ lomo “ se extiende en direción NW-SE perdiendo paulatinamente altura desde su punto más elevado, la cima de Ezkaba ( 895 m ), hasta morir, en las inmediaciones de la ermita de la Trinidad ( 433 m ), a orillas del río Ulzama, cuyo cauce lo separa de Miravalles ( 598 m ).

Considerado como “ el monte de los pamploneses “, bajo su vertiente meridional se extiende la ciudad de Pamplona aunque en sus faldas, más cercanos si cabe, quedan enclavados otros municipios de “ menor “ entidad como Ansoáin/Antsoain, Berriozar o Villaba/Atarrabia.

Bajo la vertiente occidental destaca el municipio de Berrioplano, municipio compuesto por los concejos de Aizoáin, Anézcar, Artica, Ballariáin, Berrioplano ( capital administrativa ), Berriosuso, Elcarte, Larragueta, Loza y Oteiza de Berrioplano.

La vertiente septentrional es la menos poblada y por lo tanto la menos frecuentada, lo cual, desde mi modesto punto de vista, la hace más “ apetecible “ para nuestras salidas de montaña. Bajo dicha vertiente se extiende el Valle de Ezcabarte, compuesto por los concejos de: Arre, Azoz, Cildoz, Eusa, Maquirriáin, Oricáin, Orrio y Sorauren, además de los lugares de Aderiz, Anoz, Ezcaba y Garrués.

El topónimo Ezkaba además de dar nombre a este monte, coincide con el de un pequeño núcleo de población en el que apenas habitan unas pocas personas y que aparece enclavado bajo su vertiente septentrional. De la misma manera este topónimo ha dado lugar a la denominación con la que se conoce al Valle asentado también bajo su vertiente septentrional, Ezcabarte.

Además de cómo Ezkaba, esta montaña es conocida habitualmente como San Cristóbal, topónimo más popular que tiene su origen en la antigua ermita que estuvo enclavada en su cima desde el siglo XIII.

Cabe reseñar que, en la actualidad, la cima del monte Ezkaba ( 895 m ) esta “ ocupada “ por una fortaleza militar, aquella cuya construcción se inició en el año 1878 y que fue bautizada como el Fuerte de Alfonso XII, más conocido popularmente como Fuerte de San Cristóbal, recinto en el que tuvo lugar uno de los episodios más tristes de nuestro pasado más reciente. Aquel en el que un numeroso grupo de presos que en aquella época ocupaba el entonces penal, el Domingo 22 de Mayo de 1938 inicia una espectacular fuga.

 

La Fuga de Ezkaba

 

Corría la tarde del Domingo 22 de Mayo de 1938 en el fuerte Alfonso XII, más conocido como Fuerte de San Cristóbal, presidio político y símbolo de la represión franquista, cuando un numeroso grupo de presos intenta una de las fugas más espectaculares de la historia.

La fuga de Ezkaba tristemente pasará a ser una de las más destacadas en la historia de las evasiones, tanto por el número de fugados como por sus consecuencias.

Por aquella época había 2487 personas detenidas, en su mayoría dirigentes políticos y sindicales, además de militantes revolucionarios y republicanos. Estos sufrían maltratos, vejaciones, palizas y hambre extrema, habiendo constancia de la muerte por esas condiciones de 305 presos, contabilizadas entre el 1 de Enero de 1937 y el 6 de Julio de 1945, fecha de cierre de este penal.

La fuga fue preparada por unos 30 presos que utilizaron la lengua esperanto para poder comunicarse entre ellos sin ser entendidos por los demás. La huida se inició a la hora de la cena, momento en el que había más dispersión de los guardianes. En distintos grupos fueron desarmando a varios de ellos y tras coger su armamento se dirigieron a donde estaba cenando la compañía de soldados de guardia. Uno de estos soldados opuso resistencia y murió como consecuencia del golpe con una barra. Posteriormente se rindieron los soldados de las garitas y en aproximadamente media hora el fuerte fue tomado por los reclusos, momento que fue aprovechado para escapar de las instalaciones de la prisión.

Un soldado que volvía de Pamplona tras percatarse de lo que estaba ocurriendo bajo a la ciudad a dar la voz de alarma. Además, un preso, el falangista Angel Alcázar de Velasco ( 1909-2001 ) también corrió monte abajo para avisar de la fuga.

Cuando los camiones de los militares con reflectores se acercaron hacia el fuerte, algunos de los presos desistieron en su fuga, de tal forma que fueron contabilizados 1692 presos a las 3´30 horas de la madrugada. Se fugaron, por lo tanto, 795 de los reclusos que iban mal vestidos y mal calzados, desnutridos, con escasos fusiles y en “ desbandada “, sin organizar un plan de huida. Se inició inmediatamente “ la caza “ de los mismos, que sin resistencia fueron abatidos o detenidos. Consta que el mismo día 23 se detuvo a 259 evadidos y para el día 24 eran ya 445. El último fue capturado el 14 de Agosto, tres meses después, siendo apodado “ Tarzán “ por aguantar tanto tiempo sólo en el monte.

De los 795 fugados fueron detenidos 585, pasando sólo tres de ellos la frontera francesa. Se identificaron 187 cadáveres, a los que hay que añadir 20 muertos más sin identificar. Esto da, según la contabilidad del fuerte, cuatro más, que pudieran ser huidos de la represión en la retaguardia, encontrados tras las pesquisas desarrolladas para capturar a los fugados del fuerte. Aunque la mayor parte falleció en Ezcabarte, que es la cara norte del monte Ezkaba ( 895 m ), en Olaibar y Baztán, la mayoría está registrada en Ansoain, en la falda sur del monte. De los capturados, 17 fueron sometidos a juicio acusados de ser los cabecillas, uno fue internado en el “ manicomio “ de Pamplona y 14 de ellos fueron condenados a muerte, siendo fusilados en la Vuelta del Castillo, detrás de la Ciudadela, el 8 de Septiembre de ese mismo año.

En las posteriores diligencias aparece el delator falangista Angel Alcázar de Velasco ( 1909-2001 ) que vio reducida su pena. Con la reducción de penas también se vieron beneficiados otros 60 internos por colaborar. El director del fuerte, Alfonso de rojas, fue destituido de su cargo luego del hecho.

El total de muertos como consecuencia de la fuga ascendió a 206 personas.

 

      *Fuente: Wikipedia

 

Historia

 

La ermita erigida en honor a San Cristóbal, patrón de los viajeros, es la primera construcción documentada en la cima de Ezkaba o San Cristóbal ( 895 m ) ya desde el siglo XIII. Según parece, su origen responde a la preocupación por proteger caminos y caminantes que llegaban a Pamplona. A esta ermita se le atribuían cualidades curativas contra las cefalalgias, lo cual incentivó la peregrinación de numerosos devotos hasta el siglo XVI. Fue utilizada como lazareto para los enfermos de la epidemia de Peste que asoló Navarra en el año 1599. Estuvo en pie hasta finales del siglo XIX, en el que la construcción del Fuerte de Alfonso XII implicó su destrucción.

Desde antiguo, la posición estratégica de esta cumbre implicó además la presencia de construcciones militares destinadas a controlar los accesos a la Cuenca de Pamplona. Al igual que ocurrió con el monte, estas construcciones acabaron por tomar como nombre propio el del santo titular de la ermita. La más antigua testimoniada es el Castillo de San Cristóbal que fue arrasado el año 1276 por el señor de Beaujeu  tras destruir la ciudad vieja de Pamplona en la Guerra de la Navarrería.

A este castillo sucedieron otras torres de vigilancia y establecimientos militares hasta que a finales del siglo XIX la Tercera Guerra Carlista puso de manifiesto que las murallas de Pamplona habían quedado obsoletas por el desarrollo de la artillería. Por este motivo, en el año 1878 se inició la construcción del Fuerte de Alfonso XII, más conocido como Fuerte de San Cristóbal. El Fuerte, que nada más terminado quedó obsoleto militarmente por el desarrollo de la aviación, fue convertido en penal a raíz de la Revolución de Asturias de 1934 y estuvo destinado a este fin hasta el año 1945. Como presidio político viviría los capítulos más tristes durante la Guerra civil Española ( 1936-1939 ), siendo uno de los símbolos de la represión franquista. En este se produciría la que se considera una de las fugas más espectaculares de la historia, la de 795 presos que intentaron escapar aquel 22 de Mayo de 1938 y que fueron abatidos o capturados en su mayor parte. Tras su cierre como cárcel, cumplió diversos fines militares hasta el año 1991, en que quedó definitivamente abandonado.

Desde la Edad Media y hasta bien entrado el siglo XX, en las laderas del monte se han explotado además varias canteras de piedra, fundamentalmente en el extremo sureste, próximo al barrio pamplonés de Ezcaba. De ellas se extrajeron los materiales de construcción de algunos de los edificios más importantes de la capital navarra, tales como el Palacio de Navarra y el edificio histórico del Archivo Real y General de Navarra.

 

     *Fuente: Wikipedia

 

Presente y Futuro

 

Son muchos los pamploneses y vecinos de la Cuenca que siguen accediendo a este monte para su recreo y esparcimiento. Son numerosos los recorridos posibles a través de un buen número de senderos señalizados que permiten transitar la montaña en toda su extensión. Sin embargo, ninguno de los proyectos planteados desde el año 1998 para su conversión en Área Natural Recreativa se ha llevado a cabo. A esto se suman los daños provocados por los incendios que las maniobras militares han causado en sus laderas en los últimos años y el estado de completo abandono del Fuerte. Por todo ello, cada Otoño, la S.C.D.R Anaitasuna de Pamplona organiza la Marcha Popular a San Cristóbal como forma de reivindicar el uso y disfrute de un espacio natural tan cercano a la ciudad, con un paseo sencillo para amantes del senderismo y la montaña.

En el año 2007, ante la parálisis de la situación y la pasividad de las instituciones, el Ayuntamiento de Berrioplano decidió tomar la iniciativa e iniciar conversaciones con el Ministerio de Defensa, titular del Fuerte, de cara a una posible cesión del mismo. Con este fin se constituyó un Foro de reflexión sobre los posibles usos del Fuerte y aunque esta iniciativa quedó paralizada, consiguió suscitar el interés de los ayuntamientos e instituciones locales por el estado del monte y del Fuerte.

En 2009 la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona proyecta la conversión de la montaña en un gran parque comarcal, el segundo de la capital tras el Parque Fluvial del río Arga. Para ello se están elaborando diversos estudios, entre los que ha llamado la atención el análisis de viabilidad de un nuevo acceso a la cumbre a través de Funicular o teleférico.

 

     *Fuente: Wikipedia

 

Objetivo de innumerables “ deportistas “, Ezkaba o San Cristóbal ( 895 m ) recibe la visita de infinidad de personas que, tomando como punto de partida cualquiera de las localidades asentadas en sus inmediaciones, bien a pie, como excursión montañera o paseo, en bici o el cada vez más “ de moda “ trail running, buscan “ coronar “ su cima, un “ clásico “ entre los montes de la Cuenca de Pamplona y una de las cumbres más emblemáticas de nuestra tierra, Navarra.

 

El Valle des Aldudes o Alduides

 

El Valle des Aldudes o Alduides, en tierras de la Baja-Navarra, es un bucólico paraje enclavado en plena línea fronteriza que aparece “ encajonado “ bajo diferentes cordales montañosos. Si exceptuamos su vertiente septentrional, abierta hacia el Valle de Baigorry, el Valle des Aldudes se extiende bajo la cara norte de la cordillera pirenaica, allá donde las escabrosas cumbres han dado paso a redondeados y herbosos oteros en los que pacen plácidamente las innumerables cabezas de ganado que dan ese “ sabor “ típicamente ganadero al Valle.

La vertiente occidental del Valle des Aldudes aparece dominada por un extenso cordal en el que llaman nuestra atención las prominentes cumbres de Auza ( 1304 m ), Peña de Alba o Albako Harria ( 1074 m ) y Enekorri ( 1176 m ), sirviendo de frontera natural con tierras baztanesas. Por el Este destaca la alargada loma que desde Lindus ( 1220 m ), en las inmediaciones del Puerto de Ibañeta ( 1056 m ), se extiende en dirección Norte hasta alcanzar la cima de Adarza ( 1251 m ), cordal que ejerce de muga con las tierras de Valcarlos/Luzaide. La vertiente meridional del Valle aparece “ cerrada “ por el “ discreto “ cordal en el que destacan las cimas de Isterbegi ( 1028 m ), cumbre desprendida bajo la cara Norte del Adi ( 1457 m ), y el anteriormente citado, Lindus ( 1220 m ), alargada “ loma “ que limita con el Valle de Erro.

Tres localidades conforman el Valle des Aldudes: Banca/Banka ( 243 m ), la población más septentrional del Valle, Aldudes ( 370 m ), al que pertenece el barrio de Esnazu ( 551 m ), y Urepel ( 414 m ), el pueblo más meridional.

El Valle des Aldudes está atravesado por el río La Nive des Aldudes, el cual desemboca en las inmediaciones de Saint Martin D´Arrosa ( 130 m ) en La Nive o Errobi, río que a su vez discurre bajo la vertiente nororiental del monte Jara ( 812 m ), paralelo a la D-918, carretera que enlaza la capital bajonavarra, Saint Jean Pied de Port ( 181 m ), con Bayonne/Bayona ( 12 m ), capital de Lapurdi.

Los diferentes cordales montañosos que “ encierran “ el Valle y las diferentes cumbres, muchas de ellas sobradamente conocidas, sirven de objetivo para innumerables salidas montañeras que tendrán como punto de partida cualquiera de las localidades, anteriormente citadas, que conforman el Valle.

El monte Adi ( 1458 m ) es la cumbre más “ importante “, además de ser una de las más emblemáticas de Navarra, de las que “ otean “ el Valle des Aldudes. Su relativa cercanía a la capital navarra, una considerable altitud y el estar situada en una paraje más que interesante como puede ser Quinto Real/Kintoa, hace de esta cumbre una de las más visitadas de la Comunidad Foral. La estratégica posición que ocupa esta bella cumbre, la cual se alza solitaria sobresaliendo destacadamente sobre el resto de modestas cimas que encontramos a su alrededor y que, cubiertas en su mayor parte por un denso arbolado, apenas llaman nuestra atención, la convierten en un privilegiado mirador del macizo pirenaico, así como de gran parte de las cumbres que tapizan la vertiente cantábrica de Navarra y, cómo no, del precioso Valle des Alduides.

Urepel ( 414 m ), pueblecito situado en la vertiente septentrional de la montaña, nos ofrece la ascensión más larga y dura además de ser, desde mi modesto punto de vista, una de las excursiones más “ completas “, bellas e interesantes.

Auza ( 1304 m ), Peña de Alba o Albako Harria ( 1074 m ), Enekorri ( 1176 m ),  Isterbegi ( 1028 m ), Urtaray ( 1153 m ), Lindus ( 1220 m ), Lauriñak o Lauriñaga ( 1277 m ), Meatze ( 1208 m ) y Adarza ( 1251 m ) son algunas de las “ sobresalientes “ cumbres que rodean el Valle y principales objetivos de los montañeros que lo visitan.

Además de estas cumbres son numerosos los “ suaves y herbosos “ oteros que, con una más que discreta altitud y con un nombre “ menos conocido “, tapizan este bucólico y estratégico enclave.

Esta estratégica ubicación, en plena línea fronteriza, hace de este Valle una importante encrucijada de caminos, muchos de los cuales son utilizados para las ascensiones a muchas de las cimas anteriormente citadas, así como para la comunicación con los valles vecinos situados al otro lado de la frontera.

 

Uno de estos caminos, concretamente el que antaño comunicaba con el Valle de Sorogain, sirvió como ruta de huida para aquellos presos que aquel 22 de mayo de 1938 se fugaron del Fuerte de San Cristóbal, enclavado en el Monte Ezkaba ( 895 m ), buscando la libertad que les ofrecía atravesar la frontera.

 

Urepel

 

Pequeña localidad francesa situada en el bucólico Valle de Aldudes, el cual está enclavado en la región conocida como Baja-Navarra, una de las más occidentales del Pirineo. Esta región formó parte del Reino de Navarra junto a la actual Comunidad Foral de Navarra hasta el año 1512, fecha en la que Fernando el Católico la conquistó, incorporando el territorio controlado ( la Alta Navarra ) a la Corona de Castilla.

Si exceptuamos su vertiente septentrional, Urepel ( 414 m ) está rodeada prácticamente por todas sus vertientes por la línea fronteriza que la separa de territorio navarro. Urepel ( 414 m ) es la localidad más meridional del Valle de Aldudes, el cual linda por dicha vertiente con el Valle de Erro, por oriente lo hace con Valcarlos y Roncesvalles, con el Valle de Baztán por occidente y por el Norte con el Valle de Baigorri a la vez que también con tierras baztanesas. 

Urepel ( 414 m ) es una localidad independiente desde el año 1862, fecha en la que se segregó de Aldudes. Su población ronda los 340 habitantes, predominando las actividades agrícolas y ganaderas.

En un entorno privilegiado, rodeado de prados y extensos bosques, Urepel ( 414 m ) es uno de los puntos de partida habituales en las incursiones montañeras hacia las principales cumbres del cercano cordal fronterizo que rodea la localidad.

Uno de los personajes más célebres de este pequeño rincón del Valle de Aldudes, sin lugar a dudas, fue “ Xalbador “ ( 1920-1976 ), un mito del “ bertsolarismo “.

 

Xalbador ( El bertsolari de Urepel )

 

Fernando Aire Etxart “ Xalbador “, sobrenombre que toma de su caserío Xalbadorenea, nació en Urepel en el año 1920. Pastor en su localidad natal fue todo un mito en el arte del “ bertsolarismo “. El “ bertsolarismo o versolarismo “ es el arte de cantar en verso de manera improvisada para conversar o pronunciar un discurso, rimando y con una métrica establecida. La palabra “ bertso “ en euskera equivale a lo que en castellano es una estrofa escrita según una métrica.

El “ bertsolarismo o versolarismo “  es una manifestación cultural y muy popular en toda Euskal Herria, siendo muy anterior a cualquier manifestación escrita del euskera, ya que surge de una literatura oral espontánea. Este tipo de “ discusión dialéctica “ responde a un patrón que ha estado presente en un gran número de culturas. Está presente en la mayoría de fiestas populares.

La mayoría de los “ bertsolaris “ eran conocidos por sus sobrenombres, normalmente el nombre de los caseríos en los que residían o de los que eran originarios.

“ Xalbador “ participó en casi todos los certámenes y campeonatos de la época, ganando muchos de ellos o quedando en posiciones destacadas.

Murió de un ataque al corazón el día 7 de Noviembre de 1976, el día en que se le tributaba un merecido homenaje en su localidad natal, Urepel ( 414 m ).

 

Sorogain

 

Sorogain es un estrecho y encajonado “ vallecito “ enclavado en el Valle de Erro que linda en su vertiente septentrional con las tierras bajonavarras del Valle de Alduides.

Rodeado por suaves y redondeadas montañas, su vertiente meridional aparece “ flanqueado “ de frondosos hayedos mientras que su parte alta, la más septentrional, luce “ tapizada “ de una extensa zona de pastos.

Estos pastos hacen de Sorogain un “ codiciado “ paraje en el que gran parte del año pacen innumerables cabezas de ganado, habitualmente caballos y vacas.

Sorogain es zona de pastoreo desde tiempos ancestrales como así lo atestiguan los innumerables restos megalíticos que “ siembran “ la zona.

Enclavado en zona fronteriza, Sorogain es un estratégico lugar en el que confluyen innumerables caminos, todos ellos provenientes de los valles que rodean este bucólico paraje.

Ancestral zona de pastoreo, hoy en día también es un “ paraíso “ para los amantes de la montaña, principales visitantes de este paraje en la actualidad. Esto ha hecho que en la zona se hayan habilitado un albergue con bar, restaurante y habitaciones, una oficina de información y diferentes áreas de esparcimiento que harán más “ cómoda “ si cabe nuestra visita a este maravilloso enclave.

 

Quinto Real/Kintoa

 

Monte Alduide o Quinto Real/Kintoa es un bello paraje cubierto de un extenso y cuidado bosque que se encuentra al noroeste de Navarra. Este curioso nombre proviene de la Edad Media en la que “ la quinta “ era el impuesto que los usuarios de estos terrenos, debían pagar a la corona en concepto de aprovechamiento del monte y de los pastos ( uno de cada cinco cerdos ). Se reparten su propiedad los valles de Baztán, Esteribar, Erro y Alduides, beneficiándose de su explotación esencialmente forestal y cinegética, los ayuntamientos de Baztán y Erro en un 30 y 70 % respectivamente. Además de la riqueza forestal de este paraje, cabe destacar que en estas tierras nace el río Arga, antiguamente denominado “ Runa “ y que es considerado como “ el más navarro “ de nuestros ríos ya que sus 145 kilómetros de recorrido transcurren íntegramente por suelo foral.

Los restos de una antigua fábrica de armas, cuyos muros todavía aguantan a duras penas el paso del tiempo, son visibles junto a la carretera NA-138 que accede al Puerto de Urquiaga/Urkiaga ( 910 m ). Esta fábrica fue construida allá por el año 1766 y en ella llegaron a vivir hasta 500 personas, realizándose en ella principalmente la fundición de bombas y balas de diferente calibre hasta su abandono a mediados del S. XIX.

Estos son tan sólo algunos de los singulares rincones que esconde este espectacular paraje, en el que además destaca una rica flora y variada fauna. El resto lo tendremos que descubrir nosotros mismos, sorprendiéndonos a cada paso y en cada rincón de este maravilloso bosque.

 

GR-225 o Fuga de Ezkaba

 

Recientemente se ha balizado la “ posible “ ruta utilizada por los tres únicos fugados ( se especula que pudiera haber un cuarto fugado ) que lograron alcanzar territorio galo, la “ tierra prometida “ a la que si conseguían llegar les “ obsequiaba “ con la libertad.

Sin pretender “ recrear “ la ruta exacta, tarea prácticamente “ imposible “ teniendo en cuenta que los fugados desconocían el terreno en el que se movían y además debiendo suponer que la mayor parte de sus movimientos los harían amparados por la oscuridad de la noche, este itinerario ha buscado los caminos próximos a los lugares en los que se han encontrado los cuerpos de aquellos que no lograron su objetivo. 

La ruta ha sido bautizada como  “ GR-225 o La Fuga de Ezkaba “ y con un trazado aproximado de 54 kilómetros enlaza el Fuerte de Alfonso XII, más conocido popularmente como Fuerte de San Cristóbal, con la localidad de Urepel ( 414 m ), enclavada al otro lado de la frontera en territorio “ bajonavarro “.

La ruta se ha dividido en cuatro etapas en las que, si exceptuamos el punto de inicio de la primera etapa, el Fuerte de Ezkaba, en todos los comienzos y finales de etapa, o en sus inmediaciones, encontraremos lugares en los que “ reponer fuerzas “ y si fuera necesario, alojarnos. Las etapas son:

 

   * Primera etapa: Fuerte de Ezkaba-Olave/Olabe  ( 14 kilómetros aproximadamente )

   * Segunda etapa: Olave/Olabe-Saigos/Saigots ( 14 kilómetros aproximadamente )

   * Tercera etapa: Saigos/Saigots-Sorogain ( 16 kilómetros aproximadamente )

   * Cuarta etapa: Sorogain-Urepel ( 10 kilómetros aproximadamente )

 

Desde mi modesto punto de vista creo que las diferentes etapas, con su distancia y desnivel acumulado, son aptas para cualquier persona mínimamente acostumbrada a caminar por el monte. Sin dificultad reseñable, el trazado de las etapas discurre en su mayor parte por amplias y marcadas pistas así como por nítidos senderos que a día de hoy aparecen “ escrupulosamente “ balizados.

 

Habiendo realizado anteriormente la ruta en dos jornadas, es decir, dos etapas en cada una de ellas: La Fuga de Ezkaba ( Del Fuerte de Ezkaba a Saigos/Saigots ) y La Fuga de Ezkaba ( De Saigos/Saigots a Urepel ) e incluso habiéndola realizado de manera “ integral “: La Fuga de Ezkaba ( Integral ), ahora, acompañado de mi mujer, Edurne, me dispongo a afrontar las cuatro etapas en las que se ha dividido “ oficialmente “ este interesante itinerario.  

Esta que paso a reseñar será la cuarta y última etapa de las cuatro jornadas en las que dividiremos esta senda GR-225 o Fuga de Ezkaba y en ella partiremos desde el Albergue de Sorogain ( 830 m ) para terminar en Urepel ( 414 m ), localidad enclavada al otro lado de la frontera, en territorio “ bajonavarro “. Esta es mi propuesta, espero que la disfrutéis.

 

Resumen del Itinerario

 

La ruta GR-225 o Fuga de Ezkaba se ha dividido  “ oficialmente “ en cuatro etapas:

 

   * Primera etapa: Fuerte de Ezkaba-Olave/Olabe  ( 14 kilómetros aproximadamente )

   * Segunda etapa: Olave/Olabe-Saigos/Saigots ( 14 kilómetros aproximadamente )

   * Tercera etapa: Saigos/Saigots-Sorogain ( 16 kilómetros aproximadamente )

   * Cuarta etapa: Sorogain-Urepel ( 10 kilómetros aproximadamente )

 

Esta es la última de ellas y da comienzo en el Albergue de Sorogain ( 830 m ), bucólico paraje al que accederemos tomando el estrecho carretil asfaltado que nace desde la carretera N-135, vial que enlaza la capital Pamplona con Francia por Valcarlos. Entre las localidades de Viscarret-Guerendiain/Biscarreta-Gerendiain y Mezquiriz/Mezkiritz, pasado el kilómetro 35 en dirección a esta última localidad, nace esta estrecha carreterita, la NA-2532, que tras corto discurrir desemboca en la explanada en la que queda enclavado el citado albergue.

 

Dejamos atrás el citado albergue para continuar unos metros por el carretil asfaltado que asciende hacia el collado de Aztakarri ( 960 m ) aunque nosotros lo abandonaremos de inmediato por la derecha ( NE ) a la altura de un poste indicador y un panel informativo.

Continuaremos por amplia pista en busca del collado de Beraskoain ( 1009 m ), en el cual desembocaremos tras fuerte ascenso.

Las balizas de la GR-225 nos “ invitan “ a atravesar el citado cuello ( 1009 m ) e iniciar el descenso hacia Urepel ( 414 m ).

De inmediato damos alcance a Beraskoaingo Etxola ( 964 m ) para, junto a un abrevadero, continuar en paulatino descenso, primeramente por estrecho sendero y posteriormente por un marcado camino que discurre en todo momento escrupulosamente balizado.

Este camino termina desembocando, a la altura de una cerrada curva, en el estrecho carretil asfaltado que desde Urepel ( 414 m ) asciende hacia Sorogain.

Tomaremos este y en paulatino descenso continuaremos por la izquierda ( NW ) para, dejando a nuestro paso prados y caseríos, atravesar Gaineko Karrika ( 430 m ), barrio perteneciente a  la localidad bajonavarra de Urepel ( 414 m ), población en la que desembocaremos de inmediato y lugar en el que finaliza esta travesía. 

 

Datos del Itinerario

 

Desnivel: 273 m.  

Tiempo: De 3 h a 4 h

Distancia: 10 km aprox.

Inicio: Albergue de Sorogain ( Valle de Erro )   

Fecha de realización: Junio 2021

Época recomendada: Todo el año

Cimas: Travesía en la que no se ascienden cimas

 

 

Detalle del Itinerario

 

Comenzaremos a caminar desde el aparcamiento situado junto al Albergue de Sorogain ( 830 m ), bucólico paraje al que accederemos tomando el estrecho carretil asfaltado que nace desde la carretera N-135, vial que enlaza la capital Pamplona con Francia por Valcarlos. Entre las localidades de Viscarret-Guerendiain/Biscarreta-Gerendiain y Mezquiriz/Mezkiritz, pasado el kilómetro 35 en dirección a esta última localidad, nace esta estrecha carreterita, la NA-2532, que tras corto discurrir desemboca en la explanada en la que queda enclavado el citado albergue.

Nuestros primeros metros los recorreremos por la estrecha carreterita que, en dirección Norte, alcanza el collado de Aztakarri ( 959 m ) para desde aquí descender hacia Urepel ( 414 m ), localidad bajonavarra enclavada en el vecino Valle de Alduides y destino final de esta ruta.

Nada más comenzar a caminar, en las inmediaciones del Albergue de Sorogain, dejaremos a nuestro paso numerosos paneles informativos que hacen referencia a los diferentes senderos balizados que podremos encontrar por la zona, así como a la estación megalítica o a la actividad ganadera que tiene lugar en este bucólico paraje.

A nuestra izquierda ( W ) queda un gran redil para el ganado junto al que, abandonando el asfalto, continúa la balizada senda GR-11 para atravesar y posteriormente discurrir junto a la margen derecha de Sorogaingo Erreka, riachuelo que recoge el agua de, entre otras, Odiako Erreka y Aztakarriko Erreka.

Seguimos por asfalto hasta “ tropezar “, a la altura de un poste indicador y un panel informativo, con una amplia pista que nace por nuestra derecha ( NE ). 

Tomaremos esta pista para de inmediato atravesar el portillo que la cierra. Continuamos en paulatino ascenso para, en breve, alcanzar una marcada bifurcación en el paraje de Zaraka ( 877 m ). Un poste indicador la señaliza. Seguimos al frente ( N ).

La pista pierde altura para atravesar Beraskoaingo Erreka, momento a partir del cual inicia un, en principio, paulatino ascenso para posteriormente acentuar su pendiente y con algunos tramos cementados terminar desembocando en el collado de Beraskoain ( 1009 m ), amplio cuello abierto entre Asundegiko Gaina ( 1151 m ), cima que se eleva al NW. y Lanotegi ( 1072 m ), cumbre que visible se alza al SE. Un gran redil para el ganado y un poste indicador destacan en el lugar. Aquí confluyen las balizas de la senda GR-12 y “ nuestra “ GR-225.

Continuaremos al frente ( N ) siguiendo unas pequeñas balizas que nos “ invitan “ a tomar un, en principio, no muy nítido camino, el cual de inmediato ganará en notoriedad para abandonar el collado ( 1009 m ) en dirección al cercano hayedo.

Una vez bajo las hayas, de inmediato alcanzaremos Beraskoaingo Etxola ( 964 m ) para, junto a un abrevadero, continuar en paulatino descenso, primeramente por estrecho sendero y posteriormente por un marcado camino que discurre en todo momento escrupulosamente balizado.

Salimos a terreno despejado y alcanzamos una zona de prados, lugar en el que un portillo nos “ invita “ a entrar en uno de ellos. Caminamos junto a la alambrada que, a nuestra derecha ( E ), nos separa de otro prado. Alcanzamos el extremo opuesto del prado en el que otro portillo facilita nuestra salida del mismo.

El marcado camino pierde altura para, poco más adelante, atravesar la estrecha carreterita asfaltada que asciende hacia Sorogain ( 830 m ) y continuar al frente ( NW ), en todo momento por marcado camino.

Nuevamente un portillo nos “ invita “ a entrar en otro prado aunque de inmediato lo abandonaremos por el extremo opuesto, lugar en el que otro portillo facilita nuestra salida del mismo.

Seguimos por ancho camino, el cual de inmediato  termina desembocando, a la altura de una cerrada curva, en el estrecho carretil asfaltado que desde Urepel ( 414 m ) asciende hacia Sorogain.

Tomaremos este y, en paulatino descenso, continuaremos por la izquierda ( NW ) para dejar a nuestro paso una primera bifurcación, nuevamente a nuestra izquierda ( S ), y posteriormente otra segunda, también a la izquierda ( W ).

La carreterita atraviesa el puente que salva Soaluzeko Erreka, junto al que llamará nuestra atención un panel informativo. Dejamos atrás este para alcanzar la casa Erlanjoenea y junto a esta una marcada bifurcación en la que destacan varios indicadores. Haremos caso omiso de la carretera asfaltada que por la derecha ( E ) continúa hacia Roncesvalles y Lindus para continuar al frente ( S ) en dirección a Urepel ( 414 m ).

Entre  prados y caseríos, atravesaremos Gaineko Karrika ( 430 m ), barrio perteneciente a  la citada localidad bajonavarra ( 414 m ), población en la que desembocaremos de inmediato. Urepel ( 414 m ), bucólico lugar perteneciente al Valle des Aldudes en el que finaliza esta corta y placentera etapa, última del itinerario que para aquellos presos que consiguieron alcanzarlo supuso su libertad.


Track del Itinerario


Fotos del Itinerario


Albergue de Sorogain, punto de partida de esta cuarta y última etapa

Oficina de información

Detalle del panel informativo en la fachada de la Oficina de Información aledaña al Albergue de Sorogain

Detalle del panel informativo en la fachada de la Oficina de Información aledaña al Albergue de Sorogain

Talla de madera en la fachada del Albergue de Sorogain

Albergue de Sorogain

Escudo del Valle de Erro en la fachada del Albergue de Sorogain

Albergue de Sorogain y Oficina de Información ( dcha )

Dejamos atrás el Albergue de Sorogain para comenzar a caminar por el carretil asfaltado que asciende hacia el collado de Aztakarri. Varios paneles informativos ( dcha ) quedan a nuestro paso
 
Panel informativo en Sorogain
 
Panel informativo de la Fuga de Ezkaba o GR-225, nuestra ruta

Detalle del panel informativo. Esto es lo que nos queda: " un último esfuerzo "

Numerosos paneles informativos destacan en las inmediaciones del Albergue de Sorogain
 
Paneles informativos y poste indicador en las inmediaciones del Albergue de Sorogain

Detalle del panel informativo

Poste indicador
 
Bifurcación y poste indicador. Abandonamos el asfalto tomando la amplia pista que nace por la derecha entre el panel informativo y el citado indicador
 
Detalle del panel informativo enclavado en la bifurcación

Detalle del poste indicador enclavado en la bifurcación

Ganamos altura por pista cementada

Paulatinamente la pista cementada acentúa su inclinación

En el punto en el que la pendiente nos da una pequeña " tregua " la pista cementada pasa a ser de tierra 

La pista se bifurca en el paraje de Zaraka. Continuaremos al frente ( izda )

Poste indicador en la bifurcación. Continuaremos al frente ( centro )

Detalle del poste indicador enclavado en la bifurcación

La pista continúa en paulatino ascenso con Asundegiko Gaina ( centro ) asomando en primer término
 
Iturrunburu destaca en primer término

La pista discurre plácidamente mientras que al fondo asoma Lanotegi ( dcha )

Adi ( izda ) e Iturunburu ( dcha ) asoman cercanos al otro lado del Valle de Sorogain

La pista inicia un tendido descenso

Nuestro camino es atravesado por Beraskoaingo Erreka

Un pequeño abrevadero destaca junto a nuestro camino

El cauce seco de Beraskoaingo Erreka ( dcha ) discurre paralelo a nuestro camino

Nuestro camino finalmente se separa del cauce de Beraskoaingo Erreka para iniciar un brutal ascenso

La pista gana altura en acusado ascenso

Jornada muy calurosa en los que los tramos de sombra se " agradecen "

Lanotegi asoma sobre nuestro amplio camino

Las balizas señalizan escrupulosamente el camino a seguir

Nuevamente la pendiente se acentúa, momento en el que el carretil vuelve a ser cementado

Sobre nuestro cementado camino aparece la herbosa ladera de Asundegiko Gaina, donde pastan numerosas cabezas de ganado
 
Acusado ascenso hacia el ya " intuible " collado de Beraskoain

En las inmediaciones del collado de Beraskoain la pista comienza a perder inclinación y las cabezas de ganado comienzan a hacer acto de presencia

Numerosos caballos pacen plácidamente en las inmediaciones del collado de Beraskoain

La pista cementada, ya con apenas inclinación, pasa a ser de tierra

El collado de Beraskoain asoma cercano

Un redil para el ganado y un poste indicador destacan en el collado de Beraskoain

Caballos en las inmediaciones del collado de Beraskoain

Caballos en las inmediaciones del collado de Beraskoain

Collado de Beraskoain

Abrevadero en el collado de Beraskoain con Lanotegi despuntando sobre este

Un ciclista asciende por las herbosas laderas de Lanotegi

Poste indicador y portillo en el collado de Beraskoain. Lo atravesaremos

Detalle del poste indicador situado en el collado de Beraskoain

Una pequeña baliza señaliza el herboso y todavía inapreciable camino que desciende hacia Urepel

Poco más adelante una nueva baliza señaliza, el ahora si, notorio camino que se dirige al hayedo
 
No tardamos en penetrar en el hayedo. Las balizas señalizan en todo momento nuestro camino

Nuestro camino alcanza Beraskoaingo Etxola 

Desde el abrevadero situado metros antes de alcanzar Beraskoaingo Etxola tomaremos el notorio sendero que nace pos su derecha

Abrevadero e inicio del sendero que desciende hacia Urepel en las inmediaciones de Beraskoaingo Etxola

La senda discurre paralela a la alambrada que cierra el entorno de Beraskoaingo Etxola

Las balizas ( izda ) señalizan escrupulosamente nuestro camino

Conforme descendemos nuestro camino gana notoriedad

El balizaje es " escrupuloso "

Nuestro sendero parece bifurcarse. Las balizas no dejan lugar a la menos duda. Continuamos por la derecha

La marcada senda pierde altura en acusado descenso

En caso de realizar el itinerario en sentido contrario las balizas también son perfectamente visibles  

Esporádicos hitos " ayudan " en el balizaje del notorio camino

La senda atraviesa pequeños claros que se abren en el hayedo

Los helechos en algunos tramos amenazan con " cerrar " nuestro camino

A nuestro paso queda una borda en ruinas

El sendero, muy notorio, desciende entre helechos

Volvemos a entrar en el hayedo. Las balizas señalizan constantemente el camino

El camino gana notoriedad aunque eso no impide que mi mujer sufra un resbalón " tonto " que, más tarde sabremos, termina con un esguince de rodilla y tobillo. En principio puede caminar así que intentaremos alcanzar la carretera  

Bifurcación en la que destaca un abrevadero ( izda ). Como indican las balizas, continuaremos por la derecha

El camino discurre paralelo al muro de piedra que delimita un antiguo prado
  
El camino hacia Urepel discurre en cómodo trazado
 
Atravesamos algunos claros en el bosque, momento en el que el sendero  prácticamente " desaparece " entre los helechos aunque en todo momento discurre notorio

Nuevamente penetramos en el hayedo, momento en el que nuestro camino vuelve a ganar notoriedad 

Avanza la mañana y el calor se acentúa. Agradecemos la sombra del hayedo

Mi mujer, a pesar del dolor, continúa su particular " calvario "

El camino discurre en cómodo trazado
 
Bifurcación, momento en el que optaremos por tomar el camino de la izquierda que asciende junto al muro de piedra
 
Los hitos no dejan lugar a dudas. Hemos tomado el camino correcto aunque en esta época del año aparece muy " cerrado " por los helechos

La senda atraviesa entre helechos

Nuestro camino discurre en cómodo trazado mientras Bihurrietabuztanenea asoma en el fondo del " cerrado " valle

Bihurrietabuztanenea

Continuamos nuestro " sufrido " descenso

La senda paulatinamente vuelve a ganar notoriedad mientras discurre entre helechos  

La piramidal cota de Harriondoko Kaskoa destaca en primer término

La senda discurre dejando a su paso bajo esta un prado ( dcha )

El herboso camino vuelve a ganar notoriedad mientras que Auza ( centro ) asoma en el horizonte

Bifurcación en la que recibimos un camino por nuestra derecha. Seguimos al frente ( izda )

Mirada atrás hacia la bifurcación. Nuestro camino ( dcha ) desemboca en una más notorio que atraviesa perpendicularmente

La frondosidad de la época del año hace que el camino amenace con perder notoriedad

Las balizas señalizan escrupulosamente el camino a seguir

Pequeño portillo en nuestro camino. Lo atravesaremos
 
Mirada atrás hacia las cumbres que, escabrosas, se desprenden desde el cordal fronterizo

En algunos tramos nuestro camino gana altura paulatinamente

Nos encaminamos hacia el portillo que facilitará nuestro acceso al prado que debemos atravesar 

En el interior del prado caminaremos junto a la alambrada que lo delimita

Con Auza ( centro ) asomando en el horizonte, otro portillo nos " invita " a abandonar el prado
 
Una borda destaca en la parte alta del prado

El camino se " encajona " entre las alambradas que cierran los prados

La primavera ha hecho crecer la hierba bajo la que el camino prácticamente ha desaparecido


Bifurcación. Continuaremos por la derecha en descenso
 
 
Alcanzamos y atravesamos la carreterita asfaltada que desde Urepel asciende hacia Sorogain. Seguimos al frente

Una flecha pintada en el asfalto señaliza el camino que nace en el extremo opuesto de la carretera
 
 
Tomaremos el notorio sendero que nace desde la carretera

Mi mujer, Edurne, se queda esperando en la carretera esperando que vuelva con el coche. Ya ha hecho bastante con llegar hasta aquí

El camino discurre bajo un frondoso arbolado
       
Alcanzamos los prados que tapizan la parte baja del valle para continuar discurriendo junto a la alambrada que los cierra

Nuevamente alcanzamos un portillo que facilita nuestro acceso al interior de un prado

El camino atraviesa el prado discurriendo junto a una alambrada mientras que Urepel asoma en el fondo del valle ( izda )

Urepel ya asoma en el fondo del valle

Las balizas no dejan de señalizar nuestro camino mientras descendemos cómodamente por el interior del prado

Rápidamente alcanzamos el extremo opuesto del prado, lugar en el que otro portillo nos " invita " a salir

Una vez dejado el prado atrás, continuaremos descendiendo por un amplio camino 

El notorio camino pierde altura en agradable descenso 

Desembocamos en la cerrada curva que traza la estrecha carreterita que desde Urepel asciende hacia Sorogain, lugar en el que la tomaremos para continuar por la izquierda

De inmediato dejaremos a nuestro paso dos bifurcaciones en la que haremos caso omiso a los carretiles asfaltados que nacen por nuestra izquierda

Poste indicador y señal en una de las bifurcaciones a las que haremos caso omiso

En primer término llama nuestra atención la piramidal silueta de Munhoa, " cimita " que destaca sobre Gaineko Karrika

Continuaremos nuestro descenso por asfalto. Las balizas así nos lo indican

Con la casa Erlanjoenea asomando al fondo, el carretil asfaltado por el que caminamos atraviesa el puente que salva Soaluzeko Erreka

Soaluzeko Erreka apenas se deja ver entre la frondosidad del entorno

Atravesado el puente que salva Soaluzeko Erreka dejaremos a nuestro paso un panel informativo

Detalle del panel informativo

Alcanzamos la casa Erlanjoenea   

Erlanjoenea, gran caserón junto al que, por la derecha, continúa el carretil asfaltado hacia Lindus, Roncesvalles y el Bosque de Haira, camino al que haremos caso omiso. Seguimos de frente ( izda )

El carretil asfaltado continúa en dirección al disperso caserío de Gaineko Karrika, barriada de Urepel

Albergue en Gaineko Karrika ( Urepel )

Jardín del albergue de Gaineko Karrika ( Urepel )

Detalle en la fachada

A nuestro paso queda la casa Komartimenia ...................

...................... como así reza la piedra esculpida colocada en su fachada

Caminamos por la estrecha carreterita que discurre paralela a La Nive des Aldudes

A nuestro paso queda La Nive des Aldudes

Alcanzamos Gaineko Karrika
 
Bonito rincón en Gaineko Karrika

Bonitos detalles ornamentan este cuidado rincón de Gaineko Karrika

La carretera por la que caminamos atraviesa este cuidado barrio de Urepel
 
Viejos caserones, alguno rehabilitado, asoman a nuestro paso

Placa en la fachada del edificio rehabilitado

Abandonamos Gaineko Karrika

Vamos dejando atrás la barriada de Gaineko Karrika, sobre la que despunta Harriondoko Kaskoa
 
Entramos en Urepel

La torre de la iglesia de Urepel destaca sobre la carretera que da acceso al casco urbano de esta bella localidad del Valle des Aldudes

Entramos en Urepel y vamos dejando a nuestro paso grandes caserones

Inscripción en la fachada de unos de los grandes caserones que conforman el casco urbano de Urepel

Dejamos atrás la iglesia de Urepel
 
Hoy parece ser día " festivo " en la localidad

Accedemos al casco urbano de Urepel caminando por la estrecha calle principal que atraviesa la localidad

Plaza de Urepel

Edificio en la plaza de Urepel

Frontón de Urepel. Hoy la localidad aparece muy concurrida

Placa en la fachada del frontón de Urepel en homenajea a Xalbador, uno de los personajes ilustres de la localidad

A las afueras de Urepel destacan numerosos paneles informativos

Estela en homenaje al " bertsolari " Xalbador

Panel informativo en Urepel

Detalle de uno de los paneles informativos que dejaremos a nuestro paso

Detalle de uno de los paneles informativos que dejaremos a nuestro paso

Detalle de uno de los paneles informativos que dejaremos a nuestro paso

Postes indicadores en Urepel

Salimos de Urepel buscando el panel informativo de la Fuga de Ezkaba o GR-225 que aparece enclavado a las afueras de la localidad

Saliendo de Urepel aparece el panel informativo de la Fuga de Ezkaba o GR-225, lugar en el que daremos por finalizada esta última etapa 

Detalle del panel informativo de la Fuga de Ezkaba o GR-225

Detalle del panel informativo. Fin de la etapa y de la travesía


No hay comentarios:

Publicar un comentario