domingo, 9 de agosto de 2020

La Mesa de los Tres Reyes y La Table ( Desde el Rincón de Belagua )

Enclavada en el extremo nororiental de la provincia de Navarra, la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) es el punto más elevado del citado territorio y quizás sea por eso por lo que, sin lugar a dudas, es la montaña más emblemática para los montañeros navarros.
Además de ser el punto álgido del Reino de Navarra, en las inmediaciones de la cima de esta montaña, en la “ vecina “ cumbre de La Table ( 2428 m ), confluyen las tierras de la mencionada comunidad con los territorios de Aragón y Bearn ( Francia ), más concretamente aquí limitan los municipios de Isaba, Ansó y Lescún. Cuenta la leyenda que en este punto donde se juntan las tres regiones, se reunían los monarcas de estos antiguos reinos, cada uno en su territorio, para debatir los problemas que acaecían entre sus tierras y subditos.
La Mesa de los Tres Reyes, conocida como Hiru Erregeen Mahaia en euskera, Meseta d´os Tres Reis en aragonés, Table des Trois Rois en francés y Tabla d´eths Tros Rouyes en gascón, está coronada por una pequeña estatua de San Francisco Javier, patrón de Navarra y por una maqueta de su castillo, es decir, el Castillo de Javier.
Son variados los lugares utilizados como punto de partida por los numerosos montañeros que buscan alcanzar su cumbre.
La bucólica localidad bearnesa de Lescun ( 905 m ) sería el lugar de partida más utilizado por los montañeros que inician la ascensión desde territorio galo.
Aunque la ruta más concurrida, sin lugar a dudas, es la que parte desde el Refugio de Linza ( 1320 m ), ya que ofrece el itinerario más corto y sencillo de entre las diferentes opciones. Enclavado en territorio oscense, a este refugio le da acceso un sinuoso carretil asfaltado proveniente desde la localidad de Ansó ( 860 m ), vial que en las inmediaciones de Zuriza ( 1220 m ) confluye con la estrecha carreterita NA-2000 proveniente de Isaba ( 823 m ), población esta última situada en tierras navarras. Cabe reseñar que actualmente esta ruta sufre una sorprendente “ masificación “.
Antes de que se abriera la pista, en la actualidad carreterita asfaltada, que da acceso al Refugio de Linza ( 1320 m ), la vía más utilizada por los montañeros navarros que buscaban alcanzar la cima de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) era la que partía desde el Rincón de Belagua ( 983 m ). Posteriormente, al abrirse la carretera de Isaba ( 813 m ) a Arette ( 329 m ), hizo que un nuevo itinerario pasase a ser más utilizado, es el que partía desde el Refugio Angel Olorón ( 1428 m ), conocido coloquialmente como " Refugio de Belagua ".
Actualmente esta ruta apenas es utilizada, lo cual, unido a la ya citada “ masificación “ que sufre el itinerario que parte desde el Refugio de Linza ( 1320 m ), desde mi modesto punto de vista y a pesar de la mayor “ dureza “ del itinerario, le hace ganar interés.
Escrupulosamente balizada, la ruta que parte desde el Rincón de Belagua ( 983 m ) confluye en el collado de Larreria ( 1675 m ) con la proveniente del Refugio de Belagua ( 1428 m ) para, ya unidas, encaminarse hacia el “ techo “ de Navarra.

Evitando la ruta que nace en el Refugio de Linza ( 1320 m ), utilizada tantas y tantas veces en nuestras ya numerosas visitas a la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), y huyendo de la mencionada “ masificación “ que, de un tiempo a esta parte sufre este itinerario, decidimos tomar el Rincón de Belagua ( 983 m ) como punto de partida para nuestra última “ incursión “ hacia el punto más elevado de Navarra, una de las cumbres más visitadas del Pirineo Occidental. Esta es mi propuesta, espero la disfrutéis.


Resumen del Itinerario

Exigente ruta en la que, partiendo desde el amplio aparcamiento de Mata de la Haya ( 983 m ), enclavado en el Rincón de Belagua, buscaremos alcanzar la cima más elevada de Navarra, la Mesa de los Tres Reyes.
Comenzaremos nuestro plácido caminar siguiendo el “ viejo “ camino, hoy apenas utilizado, que antaño y antes de abrirse la pista de Linza, hoy carretera, se utilizaba por los montañeros que se dirigían hacia el “ techo “ de Navarra.
Escrupulosamente balizado como PR NA-203, este camino deja a su paso la Cueva de Antxomarro ( 1229 m ) para terminar desembocando en el Collado de Larrería ( 1675 m ), lugar en el que enlazamos con las balizas rojiblancas de la senda GR-12, marcas que nos acompañarán hasta la Foya del Portiello de Larra ( 1768 m ).
Desde este amplio “ vallecito “ ( 1768 m ) iniciamos un brutal ascenso hacia la Hoya de la Solana ( 2020 m ), paraje en el que confluimos con el camino proveniente de Linza ( 1320 m ), hoy “ sorprendentemente “ concurrido.
El marcado sendero, balizado con numerosos hitos, discurre bajo la vertiente meridional de Budoguia ( 2367 m ) para terminar desembocando en el pequeño collado de La Mesa ( 2335 m ), cuello que separa la citada cumbre de Budoguia ( 2367 m ) de nuestro objetivo, la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ).
Desde el mencionado collado ( 2343 m ) continuaremos ascendiendo por la notoria senda que, discurriendo bajo la vertiente meridional de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), busca la “ vía “ que da acceso a su cumbre.
Señalizado con hitos, un notorio sendero gana altura en brutal pendiente camino de un visible “ paso “ entre rocas, el cual superaremos sin dificultad reseñable para terminar desembocando en el punto más alto de Navarra, la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ).
Hoy “ sorprendentemente “ concurrida, la cima de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) no invita al descanso por lo que decidimos buscar la “ tranquilidad “ que ofrece la vecina cumbre de La Table ( 2428 m ).
Un corto “ destrepe “ desde la cima de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) nos deja en el collado ( 2383 m ) que la separa de la cumbre de La Table ( 2428 m ), en la que desembocamos tras corto y tendido ascenso.
Un corto “ descanso “ y tras volver al collado ( 2383 m ) que se abre entre las dos cumbres “ conquistadas “, tomaremos la marcada senda que, tras discurrir bajo la vertiente meridional de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), termina alcanzando el pequeño collado de La Mesa ( 2335 m ).
El camino utilizado en el ascenso nos devuelve a la Hoya de la Solana ( 2020 m ) y posteriormente a la Foya del Portiello de Larra ( 1768 m ), lugar en el que retomaremos las balizas rojiblancas de la senda GR-12.
Junto a estas continuaremos en todo momento hasta dar alcance a un poste indicador junto al que ya pasamos a nuestro ascenso, lugar en el que ahora nos desviaremos por la izquierda ( SW ) con la intención de “ variar “ la ruta de descenso hacia el aparcamiento de Mata de la Haya ( 983 m ).
Este notorio camino, señalizado en todo momento con hitos y balizas, nos hará desembocar sin dificultad reseñable en el lugar en el que dio comienzo este itinerario, el amplio aparcamiento de Mata de la Haya ( 983 m ), enclavado en el Rincón de Belagua.


Datos del Itinerario

Desnivel: 1736 m
Tiempo: De 8 h a 10 h
Distancia: 22´62 km
Inicio: Rincón de Belagua
Fecha de realización: Julio 2020
Epoca recomendada: Verano y otoño
Cimas: La Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ); La Table ( 2428 m )


Detalle del Itinerario

Estacionamos nuestro vehículo en el amplio aparcamiento de Mata de la Haya ( 983 m ), enclavado en el Rincón de Belagua pasado el punto kilométrico 45 de la carretera NA-137 que enlaza las localidades de Isaba ( 813 m ) y Arette ( 329 m ), justo unos pocos metros antes de atravesar el puente que, al fondo del Valle de Belagua, salva el cauce del río homónimo.
Comenzaremos a caminar desde el fondo del citado aparcamiento ( 983 m ), lugar en el que una barrera cierra el acceso al paso de vehículos. Varios paneles informativos y postes indicadores destacan en el lugar.
Atravesaremos la citada barrera, tras la que el amplio camino que nace desde esta de inmediato se bifurca. Un panel informativo y un poste indicador señalizan el camino que, por la izquierda ( SE ), se dirige hacia Lapakiza de Linzola ( 2104 m ) y la Mesa de los Tres Reyes ( 2144 m ), siendo este último nuestro objetivo.
El amplio camino discurre bajo un frondoso bosque de hayas para, poco más adelante, volver a bifurcarse. Nuevamente optamos por continuar por la izquierda ( E ) mientras caminamos en todo momento acompañados de las balizas amarillas y blancas de la senda PR NA-203 y las balizas verdes y blancas de la senda SL NA-81 que coinciden en este tramo.
En breve, nuestro camino vuelve a alcanzar un cruce, momento en el que nuevamente optaremos por continuar por el de la izquierda ( SE ), el cual no tarda en desembocar en una nueva bifurcación, momento en el que una amplio y notoria pista nos atraviesa perpendicularmente. Un poste indicador destaca en el lugar. Continuamos por la izquierda ( E ).
No tardamos en alcanzar una nueva barrera, que al igual que la superada al inicio del itinerario, cierra el paso a los vehículos. También la atravesaremos.
Superada esta, nuevamente el camino se bifurca, momento en el que optamos por continuar por la derecha ( SE ) caminando junto a la margen izquierda del cauce seco del río Belagua.
En nuestro discurrir junto al citado cauce obviaremos un primer cruce en el que, por la derecha ( S ), un camino da acceso a un prado.
Nuestro camino sigue de frente ( SE ) para, en breve y tras atravesar el cauce del río Belagua, continuar en la misma dirección ( SE ), en todo momento muy notorio.
En agradable caminar alcanzamos un nuevo cruce, lugar en el que optamos por seguir de frente ( SE ) haciendo caso omiso del camino que nace por la derecha ( E ) y que una baliza en forma de aspa nos hace “ obviarlo “.
Discurrimos por amplio camino llevando a nuestra izquierda ( N ) la alambrada que cierra el prado en cuyo interior destaca la Borda de Intza.
Poco más adelante, a la orilla del camino, nos topamos con un poste indicador. Este señaliza por nuestra derecha ( S ) el camino que se dirige a la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), el cual dejaremos para el regreso mientras optamos por continuar de frente ( E ) en dirección al señalizado collado de Larreria ( 1675 m ).
El camino continúa amplio y notorio para, en breve, alcanzar el cauce seco del Barranco Bitxitoza. Lo atravesaremos, aunque deberemos estar atentos para obviar el que continúa de frente ( SE ) mientras optamos por tomar el balizado que sigue por la izquierda ( E ).
Este discurre paralelo a la margen derecha del Barranco de Bitxitoza para, de inmediato, alcanzar un cruce, lugar en el que haremos caso omiso del herboso camino que nace por nuestra izquierda ( E ).
Seguimos discurriendo plácidamente junto a la orilla del citado barranco hasta que nuestro camino alcanza un portillo que nos cierra el paso. Una baliza de PR ( amarilla y blanca  ) nos “ invita “ a descender por la derecha ( S ) hasta el cauce seco del Barranco de Bitxitoza.
Caminaremos por el lecho del río acompañados en todo momento por las balizas amarillas y blancas de PR NA-203 hasta que estas nos “ invitan “ a abandonarlo por nuestra izquierda ( E ). Un poste indicador señaliza el lugar.
Un nítido sendero penetra bajo el frondoso bosque acompañado en todo momento por numerosos hitos y por marcas de pintura que lo balizan “ escrupulosamente “.
En acusado ascenso ganaremos altura por el joven hayedo y no tardamos en dejar a nuestro paso la Cueva de Antxomarro ( 1229 m ).
La senda continúa ascendiendo, en todo momento a “ la sombra “ del joven hayedo hasta terminar alcanzando el Collado de Larrería ( 1675 m ), lugar en el que recibimos por la izquierda ( NE ) el camino, balizado con las marcas “ rojiblancas “ de la senda GR-12, proveniente del Refugio de Belagua ( 1428 m ). Un poste indicador destaca en el lugar.
Tomamos por la derecha ( S ) las mencionadas balizas rojiblancas para continuar un paulatino ascenso por terreno herboso.
El notorio sendero discurre en todo momento “ perfectamente “ balizado y no tarda en alcanzar un nuevo poste indicador, lugar en el que haremos caso omiso del camino que desciende por nuestra derecha ( SW ), opción que tomaremos a nuestro regreso, mientras continuaremos ascendiendo por nuestra izquierda ( SE ).
La pendiente se acentúa en un primer tramo aunque posteriormente daremos alcance a unas amplias y herbosas praderas que deberemos atravesar dejando a nuestro paso algunas pequeñas charcas.
La senda, muy notoria en todo momento, alcanza un nuevo poste indicador, el cual señaliza un posible “ desvío “ hacia Lapakiza de Linzola ( 2104 m ). Obviaremos dicho “ desvío “ mientras continuamos por el nítido sendero que, tras corto ascenso, termina por descender a la Foya del Portiello de Larra ( 1768 m ), paraje en el que abandonaremos las balizas rojiblancas. Un poste indicador señaliza el lugar.
Atravesamos el amplio “ vallecito “ para continuar de frente ( E ) en dirección al “ tobogán “ herboso por el que un marcado sendero comienza a ganar altura en fortísima pendiente buscando alcanzar la Hoya de la Solana ( 2020 m ), lugar en el que desembocaremos no sin poco esfuerzo y en el que enlazamos con el “ concurridísimo “ camino proveniente del Refugio de Linza ( 1320 m ).
El notorio sendero comienza un, en principio, tendido ascenso bajo los rocosos murallones que defienden la vertiente meridional de Budoguia ( 2367 m ), en todo momento escrupulosamente balizado con numerosos hitos, para paulatinamente ir ganando inclinación y terminar desembocando en el collado de La Mesa ( 2335 m ). 
La marcada senda asciende en acusada pendiente buscando discurrir bajo la rocosa vertiente meridional de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) hasta alcanzar la discreta “ chimenea “ que, tras encajonarse en un corto tramo, da acceso a la cima más elevada del territorio navarro. La Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), pequeña y rocosa cumbre en la que destacan la maqueta del Castillo de Javier y la estatuilla del patrón de Navarra, San Francisco Javier. En condiciones “ normales “ siempre apetece descansar unos minutos en la tan ansiada cumbre y disfrutar de su abierta panorámica pero hoy, la numerosa multitud que nos encontramos en ella, hace que nosotros “ salgamos por patas “.
No muy distante, balo la vertiente oriental de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), asoma cercana la bella aunque no muy conocida, y por lo tanto habitualmente apenas visitada, cima de La Table ( 2428 m ). Hacia esta pretendemos descender.
Para ello “ destreparemos “ sin excesivas dificultades aunque con sumo cuidado, por la escabrosa y “ afilada “ ladera oriental de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) hasta terminar desembocando en el discreto collado ( 2383 m ) que la separa de la cima de La Table ( 2428 m ).
Para los que prefieran alcanzar el citado collado ( 2383 m ) de forma más “ cómoda “ o menos “ arriesgada “ recomiendo descender desde la cima de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) por la ruta utilizada en el ascenso hasta alcanzar el sendero que la evita bajo su vertiente meridional, el cual, por la izquierda ( E ) lo alcanzará sin dificultad reseñable.
Desde el pequeño collado ( 2383 m ), en corto y tendido ascenso, alcanzamos la amplia cima de La Table ( 2428 m ) “ plácidamente “. Un gran hito de piedras la señaliza. Espectacular panorámica. En sus inmediaciones destaca una placa obituaria. La visión que tenemos de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ) y de la vertiente por la que hemos descendido de ella, la verdad que impresiona.
Tras corto descanso descendemos nuevamente hasta el collado ( 2383 m ) que se abre entre las dos cimas “ conquistadas “ para, desde este, ascender hasta la base de la pared oriental de la Mesa de los Tres Reyes ( 2444 m ), lugar en el que tomaremos el notorio sendero que la evita bajo su vertiente oriental y que nos devuelve al collado de La Mesa ( 2335 m ).
El camino utilizado en el ascenso nos hace alcanzar la Hoya de la Solana  ( 2020 m ) nuevamente, lugar en el que abandonaremos la ruta que, por la izquierda ( S ), continúa hacia el refugio de Linza ( 1320 m ).
Seguimos el sendero utilizado en nuestro ascenso que continúa de frente ( W ) para,  descendiendo en fortísima pendiente, desembocar en la Foya del Portiello de Larra ( 1768 m ).
Nuevamente la atravesaremos para alcanzar el poste indicador junto al que ya pasamos anteriormente, el cual señaliza el balizado sendero que ya conocemos de nuestro ascenso.
Las balizas rojiblancas nos devuelven al poste indicador junto al que ya pasamos anteriormente, lugar en el que ahora vamos a variar el retorno. Abandonamos las balizas de la senda GR-12 que nos devolverían al collado de Larreria ( 1675 m ) para descender, ahora por nuestra izquierda ( SW ).
En sus primeros metros la senda no aparece muy notoria aunque de inmediato los hitos la hacen más visible. No tardamos en adentrarnos en un frondoso bosque, el cual iremos atravesando mientras que nuestro camino gana notoriedad.
Numerosos hitos de piedras y balizas señalizan el camino a seguir, el cual atraviesa varias regatas y barrancos hasta terminar alcanzando el cauce seco del río Belagua.
No reviste mayor dificultad seguir el camino, en todo momento balizado, que nos hará alcanzar el punto en el que confluyen el río Belagua con el Barranco de Bitxitoza. Abandonamos dicho cauce por nuestra derecha ( N ) para  desembocar de inmediato junto al poste indicador situado a la orilla del camino por el que ya pasamos al inicio de la ruta, el cual retomaremos para regresar al punto en el que dio comienzo este itinerario, el amplio aparcamiento de Mata de la Haya ( 983 m ), enclavado en el Rincón de Belagua.






Fotos del Itinerario



Aparcamiento del Rincón de Belagua a primeras horas de la mañana 

Área de descanso de Belagua

Comenzaremos a caminar desde el fondo del aparcamiento

Numerosos paneles informativos y postes indicadores destacan al fondo del aparcamiento del Rincón de Belagua

Panel informativo en el aparcamiento del Rincón de Belagua 

Panel informativo en el aparcamiento del Rincón de Belagua

Panel informativo y poste indicador en el aparcamiento del Rincón de Belagua

Una barrera cierra el paso para vehículos en el comienzo del camino que deberemos tomar, el cual de inmediato se bifurca. Continuaremos por la izquierda

Poste indicador situado en la bifurcación de caminos

Poste indicador situado en la bifurcación de caminos

Panel informativo y postes indicadores flanqueando el camino que deberemos tomar

Panel informativo y poste indicador señalizando el camino que deberemos tomar

Detalle del poste indicador que señaliza nuestro camino

El camino por el que comenzamos a caminar discurre a la sombra de un frondoso hayedo

No tardamos en alcanzar un nuevo cruce, lugar en el que volvemos a optar por continuar por la izquierda

Nuestro camino aparece perfectamente balizado

En algún tramo nuestro camino discurre bajo la sombra de los pinos

Las balizas señalizan en todo momento nuestro camino

Nuevo cruce. Como indica la baliza continuaremos por la izquierda

Nuestro camino desemboca en uno más notorio que atraviesa perpendicularmente. Un poste indicador señaliza el cruce. Continuamos por la izquierda

Detalle del poste indicador situado en el cruce

Alcanzamos una nueva barrera que cierra el paso de vehículos. La atravesaremos

El camino se bifurca. Continuamos por la derecha

Nuestro camino discurre paralelo al cauce seco del Río de Belagua. En el cruce que aparece ante nosotros haremos caso omiso del camino que por la derecha da acceso a un prado. Seguimos al frente

Caminamos junto al cauce del Río de Belagua 

Nuestro camino atraviesa el cauce del Río de Belagua para continuar al frente

Alcanzamos una nueva bifurcación. Como indica la baliza, obviaremos el camino que nace por la derecha mientras continuamos al frente

Baliza junto al camino. Deberemos continuar de frente por el notorio camino pero nos " asomamos " a ver el desvío por el que posteriormente regresaremos ( dcha )

Por ahí regresaremos

Detalle del poste indicador

El camino por el que continuamos es muy notorio

Nuestro camino alcanza el cauce del Barranco de Bitxitoza. Aunque vemos que el camino continúa al frente, no seguiremos por este 

Obviamos el camino que continúa por la margen izquierda del Barranco de Bitxitoza ( dcha ) mientras tomamos por la izquierda el camino junto al que parecen las balizas

El camino tomado discurre junto a la margen derecha del Barranco de Bitxitoza y alcanza en breve una bifurcación en la que hacemos caso omiso del herboso camino que nace por nuestra izquierda

Un portillo nos cierra el paso. No lo atravesaremos ya que una baliza amarilla y blanca nos invita a continuar por nuestra derecha

Volvemos a alcanzar el cauce del Barranco de Bitxitoza

Como señalizan las balizas ( dcha ) caminaremos por el cauce seco del Barranco de Bitxitoza

Un poste indicador señaliza el marcado sendero por el que abandonaremos el Barranco de Bitxitoza 

Detalle del poste indicador

La senda tomada parece muy marcada en el terreno

Nuestro camino discurre junto a la alambrada que cierra un prado, en cuyo interior asoma una típica borda roncalesa

Numerosos hitos balizan el sendero a seguir

El sendero por el que comenzamos a ganar altura en acusado ascenso aparece perfectamente balizado

Este primer tramo de sendero es muy empinado

Nos adentramos en un joven pero frondoso hayedo

No tardamos en divisar la Cueva de Antxomarro, cavidad que asoma en la pared de roca que aparece al fondo

Cueva de Antxomarro

No podemos resistirnos a acercarnos a la boca de la Cueva de Antxomarro

Continuamos ascendiendo por un pequeño " pasillo " abierto en el joven hayedo

Los hitos y las balizas de pintura señalizan escrupulosamente el camino a seguir

La senda gana altura mientras continúa perfectamente balizada

La frondosidad del bosque apenas permite que penetren los rayos de sol

En todo momento seguiremos, sin dificultad reseñable, las numerosas marcas de pintura ( PR ) que balizan el camino

La pendiente parece darnos " un respiro "

La senda busca abandonar la sombra del frondoso bosque

Definitivamente abandonamos la frondosidad del bosque para desembocar en terreno " abierto ". Estamos en el Collado de Larreria

En ese pequeño " colladito ", el Collado de Larreria, ha desembocado nuestro balizado sendero

Rápidamente alcanzamos una señalizada bifurcación en la que destaca un poste indicador

Detalle del poste indicador situado en la bifurcación

Dejamos atrás el poste indicador situado en el Collado de Larrería para continuar ascendiendo por el herboso y balizado sendero. Las balizas de la senda GR-12 nos acompañan 

Lapazarra destaca a nuestra espalda

Ganamos altura por un herboso sendero mientras que ante nosotros ya aparece Lapakiza de Linzola

Txamantxoia ( dcha ) despunta cercano mientras que al fondo asoma la rocosa mole de Peña Ezkaurre ( centro )

Por herboso terreno y en todo momento por balizado sendero, discurrimos bajo la vertiente septentrional de Lapakiza de Linzola, amplia cumbre que destaca sobre nuestras cabezas

Los pinos " salpican " las herbosas laderas por la s que caminamos

Las balizas de la senda GR-12 señalizan perfectamente el camino a seguir

A nuestra espalda despunta el macizo en el que reconocemos las cimas de Keleta, Ezkieta y Lakartxela

Caminamos plácidamente por el herboso sendero que aparece " flanqueado " por pinos

El estrecho pero notorio sendero atraviesa herbosas praderas

Con las balizas rojiblancas de la senda GR-12 señalizando en todo momento nuestro sendero avanzamos con Lapakiza de Linzola despuntando ante nosotros

Ante nosotros aparece un poste indicador, lugar en el que nuestro sendero se bifurca

Poste indicador

Detalle del poste indicador. Continuamos en dirección a la Mesa de los Tres Reyes

Nuestro sendero, en todo momento perfectamente balizado, vuelve a acentuar su pendiente

Por herboso terreno continuaremos ganando altura

Conforme vamos ganando altura echamos una mirada atrás. En primer término destaca Lapazarra ( dcha ) mientras que al fondo asoma el macizo de Lakartxela ( centro )

Macizo de Lakartxela. La cima de Lakartxela ( centro ) y Barazea ( dcha ) despuntan en este 

El sendero por el que caminamos gana notoriedad paulatinamente mientras continúa perfectamente balizado

Junto a nuestro herboso sendero dejaremos a nuestro paso una pequeña balsa  

El trazado del sendero se dibuja perfectamente ante nosotros

La vertiente septentrional de Lapakiza de Linzola despunta sobre nuestras cabezas

A nuestro paso dejaremos una nueva balsa

La senda, balizada en todo momento, se adentra en terreno más rocoso

Las balizas e hitos nos " acompañan " en todo momento

Un poste indicador asoma a lo lejos ( dcha )

No tardamos en alcanzar el citado poste indicador

Detalle del poste indicador

Petrechema ( dcha ) asoma en el horizonte

Petrechema ( izda ) y Acherito ( centro ) asoman en el horizonte

Petrechema

Nuestra senda inicia un paulatino descenso

Bajo nosotros se extiende la Foya del Portiello de Larra

Perdemos altura hacia la Foya del Portiello de Larra. Un poste indicador destaca en el lugar

Detalle del poste indicador enclavado en la Foya del Portiello de Larra

Atravesamos la Foya del Portiello de Larra en dirección al " tobogán " herboso que destaca ante nosotros

Un marcado sendero gana altura en brutal ascenso

En la parte alta del " tobogán " herboso, ya muy cerca de la Hoya de la Solana, la pendiente nos da una pequeña " tregua "

La senda gana notoriedad camino de la Hoya de la Solana

Alcanzamos la Hoya de la Solana y comienza a aparecer gente. No nos imaginamos lo que nos espera

Gran hito de piedras en la Hoya de la Solana. Recibimos por la derecha el camino proveniente del Refugio de Linza 

Dejamos atrás la Hoya de la Solana con Lapakiza de Linzola ( centro ) asomando al fondo. Un numeroso grupo de gente viene por detrás nuestro

Por delante también aparece bastante gente

Caminamos bajo los rocosos paredones de Budoguia mientras que La Mesa de los Tres Reyes y La Table ( dcha ) ya asoman al fondo

Comenzamos a divisar la " procesión " de gente que aparece ante nosotros

El sendero a seguir no ofrece lugar a duda y aparece notorio en todo momento

Numerosos hitos balizan la senda a seguir, algo menos notoria cuando penetramos en terreno rocoso

Mirada atrás, aparece gente por todos los lados. Al fondo asoman la Peña Ezkaurre ( izda ) y Lapakiza de Linzola ( dcha )

Atravesamos un pequeño nevero mientras ante nosotros aparece la cima de La Mesa de los Tres Reyes ( centro ) " repleta " de gente

Mirada hacia Petrechema y las Agujas d´Ansabere

En el horizonte asoma Bisaurín ( centro ), Collarada y Anayet ( izda )

El Collado de la Mesa se abre cercano ante nosotros 

Salimos al collado de La Mesa cruzándonos continuamente con gran cantidad de gente

Mirada hacia la vertiente occidental de La Mesa de los Tres Reyes desde el collado de La Mesa

Desde el collado de La Mesa ganamos altura en fortísima pendiente mientras continuamos cruzándonos con cantidad de gente

Rápidamente dejaremos atrás el collado de La Mesa

Un marcado sendero discurre bajo la vertiente meridional de La Mesa de los Tres Reyes

Caminamos bajo la cara sur de La Mesa de los Tres Reyes buscando la " vía " que da acceso a su cima

Localizamos sin excesivas dificultades, ya que hay mucha gente subiendo y bajando, la " vía " que da acceso a la cima de La Mesa de los Tres Reyes

El notorio sendero que asciende hacia la cima de La Mesa de los Tres Reyes se encajona entre grandes rocas

Pedregoso tramo final en los últimos metros hacia la cima de La Mesa de los Tres Reyes

La cima de La Mesa de los Tres Reyes asoma cercana

Obituario en las inmediaciones de la cima de La Mesa de los Tres Reyes

Concurrida cima de La Mesa de los Tres Reyes

Resulta difícil sacar una foto de la réplica del Castillo de Javier que corona la cima de La Mesa de los Tres Reyes

Una foto a la estatua de nuestro " santo " patrón, San Francisco Javier, que también " corona " la cima de La Mesa de los Tres Reyes 
En la cima de La Mesa de los Tres Reyes con todo el " mogollón " de gente detrás. Apenas paramos unos pocos minutos y nos vamos " pitando "

Desde la cima de La Mesa de los Tres Reyes buscamos descender hacia nuestro próximo objetivo, La Table, cima que despunta sobre el Lac de Lhurs ( izda )

Atrás queda la " concurrida " cima de La Mesa de los Tres Reyes

Mi compañero Joxerra iniciando el descenso hacia La Table desde la cima de La Mesa de los Tres Reyes 

Destrepamos por la abrupta vertiente oriental de La Mesa de los Tres Reyes

La cima de La Table asoma cercana mientras que el Midi d´Ossau ( centro ) y Collarada ( dcha ) despuntan en el horizonte

La cima de La Table aparece mucho menos " concurrida " que la cima de La Mesa de los Tres Reyes

Continuamos destrepando en busca del collado que da acceso a la cima de La Table

Un nevero ocupa el collado sobre el que asoma la cima de La Table

En tendido ascenso nos encaminamos hacia la cercana cima de La Table

Cima de La Table con vista a La Mesa de los Tres Reyes ( dcha ) 

La Mesa de los Tres Reyes vista desde la cima de La Table

Anie despunta cercano con La Countende a su derecha y Pene Blanque ( dcha ) en primer término

Billare, visitado hace unos pocos años, asoma cercano

El Midi d´Ossau ( centro ) destaca en el horizonte " escoltado " por el macizo de Balaitous-Frodellas ( izda ) e Infiernos-Garmo Negro-Argualas ( dcha )

Midi d´Ossau

Desde la cima de La Table disfrutamos de la panorámica hacia Billare ( izda ) y Dec de Lhurs ( dcha ), entre los que destaca el Lac de Lhurs 

Lescun visto desde la cima de La Table

Obituario en la cima de La Table

Un pequeño descanso en la cima de La Table disfrutando de la panorámica y de la " tranquilidad " que no nos ofrecía la cima de La Mesa de los Tres Reyes, cumbre que asoma cercana ( dcha )

La cima de La Mesa de los Tres Reyes continúa muy " concurrida "

" Concurrida " cima de La Mesa de los Tres Reyes

Panorámica desde la cima de La Table hacia Anayet ( izda ), Collarada, Bisaurín ( centro ), Castillo d´Achert y Agüerri

Hito en la cima de La Table con vista hacia Petrechema ( centro ), en primer término, mientras que al fondo asoma la Sierra de Alano

En la cima de La Table con La Mesa de los Tres Reyes asomando detrás

Dejamos atrás la cima de La Table 

Desde la cima de La Table descendemos nuevamente hacia el collado que la separa de La Mesa de los Tres Reyes

Alcanzamos el collado sobre el que destaca la vertiente oriental de La Mesa de los Tres Reyes

Ganamos altura en busca del estrecho sendero que discurre bajo la vertiente meridional de La Mesa de los Tres Reyes evitando su cima 

La vertiente oriental de La Mesa de los Tres Reyes, por la que anteriormente descendimos, destaca sobre nuestras cabezas

Situados sobre la escabrosa vertiente oriental de La Mesa de los Tres Reyes tomaremos la senda que discurre bajo su cara Sur

Una estrecha pero marcada senda discurre bajo la cara Sur de La Mesa de los Tres Reyes

Conforme avanzamos bajo la vertiente meridional de La Mesa de los Tres Reyes, la senda gana notoriedad

Una vez dejada atrás la vertiente meridional de La Mesa de los Tres Reyes descenderemos hacia el collado sobre el que destaca, en primer término, Budoguia. Al fondo asoma Ukerdi ( dcha ) y sobre este, al fondo, Orhy

Ukerdi destaca en primer término mientras que Orhy ( centro ) despunta en el horizonte entre nubes 

Alcanzamos el collado de La Mesa, cuello desde el que tomaremos la notoria senda que desciende por la izquierda

Desde el collado de La Mesa divisamos cercana la cima del Anie y la alargada loma de Añelarra

Desde el collado de La Mesa tomamos la notoria senda que, dando vista a Petrechema ( centro ), desciende por la izquierda

Con Budoguia despuntando sobre nuestras cabezas, la notoria senda comienza a perder altura hacia su vertiente meridional

Numerosos hitos balizan el notorio sendero por el que perdemos altura hacia la Hoya de la Solana

Sobre el marcado sendero por el que venimos descendiendo despunta la cima de La Mesa de los Tres Reyes ( centro ) y La Table ( dcha )

Nuevamente atravesamos el pequeño nevero por el que ya pasamos en el ascenso

Junto a la notoria senda por la que venimos descendiendo vamos dejando a nuestro paso numerosos grupos de personas que descansan plácidamente 

La notoria senda por la que venimos descendiendo discurre bajo la vertiente meridional de Budoguia

Numerosos hitos balizan la marcada senda desde la que damos vista a Lapakiza de Linzola ( centro )

La notoria senda alcanza la Hoya de la Solana 

Un gran hito señaliza la Hoya de la Solana

En la Hoya de la Solana dejaremos por la izquierda el señalizado camino hacia el refugio de Linza mientras continuamos al frente

Desde la Hoya de la Solana tomaremos el herboso sendero por el que continuamos descendiendo hacia la Foya del Portiello de Larra

Desde el sendero por el que venimos descendiendo desde la Hoya de la Solana ya divisamos la Foya del Portiello de Larra, abierto valle sobre el que destaca Lapakiza de Linzola ( izda )

En nuestro descenso hacia la Foya del Portiello de Larra nos encontramos con un par de montañeros que van hacia el Refugio de Linza por esta otra vía mucho menos concurrida

Alcanzamos la Foya del Portiello de Larra, lugar en que nos despedimos de esta pareja de montañeros. Ellos continuarán por la izquierda mientras que nosotros seguimos de frente

Atravesamos la Foya del Portiello de Larra

En la Foya del Portiello de Larra dejaremos a nuestro paso una pequeña " charca "

Una vez atravesada la Foya del Portiello de Larra volvemos a alcanzar el poste indicador junto al que ya pasamos anteriormente. Tomamos la senda que nace desde este

El sendero asciende en fuerte pendiente y la calor a estas horas " golpea " con fuerza

El herboso sendero gana altura en fortísimo ascenso

La notoria senda pierde inclinación y parece darnos un pequeño " respiro "

Los hitos y las balizas rojiblancas señalizan " escrupulosamente " el camino a seguir, por el que ya pasamos anteriormente

En tendido ascenso la senda vuelve a dar alcance al poste indicador por el que también pasamos anteriormente

Detalle del poste indicador

Dejado atrás el poste indicador iniciamos un tendido descenso

En todo momento caminaremos acompañados de las balizas rojiblancas de la senda GR-12

Perdemos altura en dirección al pequeño vallecito en el que se dibuja la notoria senda por la que lo atravesaremos

En primer término despunta la rocosa cumbre de Lapazarra, escoltada por el macizo de Lakartxela ( izda ) y Lákora ( dcha )

Una pequeña balsa destaca en el pequeño valle por el que discurriremos en breve

No tardamos en alcanzar la pequeña balsa

El sendero sigue siendo muy notorio

El marcado sendero continúa en paulatino descenso

Lapazarra ( centro ) despunta en primer término mientras que por detrás las nubes amenazan con " engullir " los macizos de Lakartxela ( izda ) y Lákora ( dcha )

Con Lapazarra ( dcha ) despuntando en primer término, al fondo asoma el macizo de Lakartxela mientras que las nubes entran por el collado de Arrakogoiti

Dejando el macizo de Lákora a la izquierda, las nubes también entran por el collado de Eraiz ( centro )

Continuaremos perdiendo altura en paulatino descenso con Txamantxoia ( dcha ) asomando al fondo 

Nuestro sendero continúa su descenso flanqueado por pinos mientras Lapazarra despunta cercano

Nuevamente desembocamos junto a un poste indicador por el que ya pasamos al inicio de la ruta. Anteriormente vinimos desde la derecha pero ahora, con la intención de variar ligeramente la ruta, descenderemos por la izquierda

Desde el poste indicador decididamente torceremos hacia nuestra izquierda

El sendero en sus primeros metros no es muy notorio

De inmediato los visibles hitos indican por donde deberemos comenzar a descender

En cuanto alcanzamos el primer hito, desde este ya divisamos más claramente el camino a seguir

Nuestro sendero rápidamente busca penetrar en el frondoso bosque

Una vez en el interior del bosque los hitos continúan balizando el camino a seguir

El camino por el que descendemos atraviesa algún claro en el bosque, momento en el que gana notoriedad

En todo momento los hitos continúan balizando el amplio y notorio camino

A la altura de otro claro en el bosque volvemos a " tropezar " con un nuevo poste indicador

Detalle del poste indicador

Nuevamente transformado en sendero volvemos a adentrarnos en el interior del frondoso bosque

Nuestro camino atraviesa el cauce del Barranco de Bitxitoza

Los hitos balizan el estrecho sendero que vuelve a adentrarse en el frondoso bosque

Nuevamente nuestro camino gana notoriedad  

Volvemos a alcanzar una nueva regata. La atravesaremos

Mi compañero Joxerra aprovecha para refrescarse ya que a estas horas del mediodía el calor " aprieta "

Sobre nuestras cabezas despunta la Peña del Rey

Atrás queda la pequeña regata mientras continuamos caminando por un pedregoso sendero

No tardamos en atravesar un nuevo cauce seco

Nuestro camino continúa discurriendo entre los pinos

El camino gana notoriedad mientras que se adentra en un frondoso bosque de hayas

El Río de Belagua atraviesa nuestro camino. Lo cruzamos 

Río de Belagua

Una vez atravesado el Río de Belagua nuestro camino continúa amplio y notorio

Algún que otro tronco caído nos cierra el paso aunque esto no supone mayor inconveniente en nuestro discurrir 

Atravesamos el Barranco de Aztaparreta

Nuevamente caminamos entre pinos ya por terreno más " abierto "

Los hitos balizan en todo momento nuestro camino

Agradable caminar por la parte baja del valle

Un hito señaliza el camino en el momento en el que este alcanza  un cauce seco 

Caminamos en un tramo por el cauce seco

Los hitos señalizan el momento en el que nuestro sendero abandona el cauce seco

Los hitos balizan en todo momento nuestro camino

Nuevamente desembocamos en el cauce seco del Río de Belagua

Con el macizo de La kartxela asomando al fondo caminaremos por el cauce seco del Río de Belagua

Alcanzamos el lugar en el que confluyen los cauces del Río de Belagua y el Barranco de Bitxitoza. Un hito ( dcha ) destaca en el lugar

Confluencia del Río de Belagua ( dcha ) y Barranco de Bitxitoza ( izda )

Un hito señaliza el sendero por el que abandonaremos el cauce seco donde confluyen el Río de Belagua y el Barranco de Bitxitoza. Al fondo asoma el panel indicador junto al que ya pasamos al comienzo de la ruta 

De inmediato alcanzamos el poste indicador y el camino por el que ya pasamos al comienzo del itinerario 

Panel informativo. Continuaremos por la izquierda

Detalle del panel informativo

Con el macizo de Lakartxela asomando al fondo continuaremos caminando por el amplio y notorio camino

Alcanzamos el cauce del Río de Belagua  

Nuestro camino atraviesa el cauce del Río de Belagua para continuar al frente

Bifurcación. Continuaremos por la izquierda

Alcanzamos una barrera que cierra el paso de vehículos. La atravesaremos

Nuevo cruce. Un panel informativo destaca en la bifurcación. Continuaremos por la derecha

El amplio camino discurre a la sombra del frondoso bosque

No tardamos en desembocar en el aparcamiento del Rincón de Belagua

Una barrera cierra el paso de vehículos desde el aparcamiento del Rincón de Belagua

Aparcamiento del Rincón de Belagua, comienzo y final de este itinerario 

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